En Actualidad Motor tenĆamos muchas ganas de probar el motor Ecoboost. Este motor, con 1 litro de cubicaje, tres cilindros y con dos variantes de 100 y 125 cv estĆ” recibiendo muy buenas crĆticas, ademĆ”s de haber recibido en 2012 y 2013 el galardón a mejor motor internacional del aƱo. La teorĆa pinta bien, ya veremos la prĆ”ctica. Probamos el motor en el Focus con acabado Titanium, un compacto con el que Ford se desmarca de la competencia por la cantidad de tecnologĆa y sistemas de seguridad activa que lleva, a buen precio.
El Focus lleva entre nosotros desde mediados de 2011 y sigue mostrando una estĆ©tica moderna. El diseƱo exterior muestra una silueta deportiva, con un frontal agresivo en el que destacan las tomas deĀ aire triangulares (solo estĆ©ticas) del paragolpes. De perfil llama la atención la lĆnea de cintura ascendenteĀ remarcada por el cromado inferior de las puertas. En la zaga destaca el alargamiento de los faros, que parecen Ā«abrazarĀ» la cintura del Focus, un detalle que puede gustar o no. En resumen un coche que sigue manifestando una imagen fresca y estilizada.
Respecto a su antecesor, mucho ha cambiado este Focus, con sus cosas buenas y malas. Exteriormente es mÔs agresivo, con formas menos redondeadas. Lo que me ha gustado menos es que ha perdido habitabilidad. Es chocante que las medidas exteriores del Focus son de las mayores del segmento y las medidas interiores se encuentran en la media. Podemos decir que sus medidas interiores son correctas, pero sólo eso.
En los asientos delanteros no se nota, en cuanto a espacio. Lo que si se «siente», es una ligera sensación de claustrofobia, provocada por la marcada inclinación del parabrisas, que ademÔs tiene todos los sensores tras el espejo interior y ocupan mucho espacio, lo que, aunque no resta visibilidad, puede ser algo molesto. AdemÔs, la consola central sobresale demasiado; todo ello junto con un salpicadero algo intrusivo provoca una sensación demasiado «envolvente» que a mi, particularmente, no me gustó.
Lo cierto es que, con el paso de los kilómetros con él, me fui acostumbrando a esa sensación. En los asientos traseros no existe ese agobio, pero se nota que hay espacio algo justo para las piernas, y la anchura también es justa, sobre todo viajando tres, que es cuando se nota. Con respecto al anterior Focus ha perdido nada mÔs y nada menos que 8 cm de anchura atrÔs. La mejor medida es la altura libre al techo, bastante buena.
El maletero tambiĆ©n ha perdido capacidad, cubicando ahora 363 litros con respecto a los 396 litros de la anterior generación. Podemos decir nuevamente que el espacio es correcto, sin mĆ”s. Aunque he de decir que tiene unas formas muy aprovechables, con una boca de carga grande. Nuestro Focus llevaba como opción la rueda Ā«de galletaĀ». De serie monta un kit reparapinchazos, para mi un fallo extendido a la mayorĆa de fabricantes. En cuanto a la calidad percibida, ajustes y materialesĀ del interior, en Ford se han puesto las pilas y merecen buena nota, dando un buen salto con respecto al anterior. Es un habitĆ”culo en el que se respira modernidad.
Ya en el puesto de conducción, vemos que en el cuadro de mandos hay una pantalla a color en el centro, en la que podemos ver reflejados todos los datos del ordenador de a bordo (Consumo medio, instantĆ”neo, autonomĆa, kilometraje parcialā¦)Ā y navegar por los menĆŗs de las opciones que traĆa nuestra unidad (Control automĆ”tico luces de carretera, Avisador y asistente de cambio de carril, Detector de Ć”ngulos muertos BLISā¦) y activarlos, desactivarlos o variar su repuesta medianteĀ el volante multifunción, forrado en cuero y que me pareció de un tacto muy bueno y un tamaƱo pequeƱo ideal para maniobrar y conducir.
Desde el volanteĀ ademĆ”s podemosĀ activar/desactivar el control de crucero adaptativo, el limitador de velocidad, y manejar el sistemaĀ SYNC de Ford entre otras funciones.Ā Con el SYNC podemos, mediante comandos de voz, llamar por telĆ©fono, cambiar de emisora, reproducir el usb, realizar una llamada de emergencia⦠Este sistema se obtiene cuando cogemos la opción del Navegador con pantalla de 5ā³,Ā que incluye un avisador de radares. Sino, tenemos de serie el V2C, un sistema parecido en su funcionamiento, aunque con menos opciones de uso.
La verdad es que la disposición de los mandos es buena, todos estĆ”n a mano y son fĆ”ciles de utilizar, excepto uno. Me refieroĀ concretamente alĀ equipoĀ de SonyĀ que montaba nuestra unidad. Ćste estĆ” plagado de botones, y no es paraĀ nada intuitivo en su manejo. Estuve peleĆ”ndome un rato para saber manejar los menĆŗs y sus funciones, asi que⦠ni se os ocurra empezar a manejarlo al principio en movimiento porque, requiereĀ de toda nuestra atención para empezar a utilizarlo.
Al final, tantos botones es normal que induzcan a confusión, deberĆanĀ de centralizar muchos botones en un mando Ā«generalĀ». Por lo demĆ”s, el manejo del climatizador, palancas tras el volante (con una forma un tanto rara, por cierto), mando giratorio de las luces, desempaƱado de luneta y parabrisas⦠es bastante sencillo.
Nuestra unidad, como suele pasar en los vehĆculos de prensa, venĆa plagada de extras. Por ejemplo, nuestro Focus tenĆa el paquete interior Individual, en el que destacan los asientos delanteros y traseros en cuero negro. NuncaĀ me ha llamado la atenciónĀ el cuero pero la verdad es queĀ te sientas en ellos y te das cuenta de la diferencia. Los asientos sonĀ muy cómodos y recogen muy bien el cuerpo. AdemĆ”sĀ son calefactados (delanteros) y con regulación electrónica el del conductor. El Focus cuenta de serie en la versión TitaniumĀ con el arranque/parada por botón, situado tras el volante a la derecha.
El interior se completa con un reposabrazos bastante cómodo con doble fondo y entrada USB y auxiliar en el interior con la tapa tapizada en piel, freno de mano (con forma de Z para aprovechar el espacio) y palanca de cambios forrados en cuero. El tĆŗnel centralĀ viene con dos posavasos y los botones que regulan los asientos calefactados (5 posiciones), con un encendedor en medio. La luz interior es realmente buena ya que utiliza LED y como curiosidad, el acabado Titanium incluyeĀ la opción Ford Ambient+. Esta opción, que se regula desde el techo donde se encuentra el portagafas, incluye varias luces en dicha zona, en la zonaĀ de los pies y las manetas de las puertas que cambian de color (blanco, rojo, azulā¦)Ā pulsando un botónĀ y dan Ā«ambienteĀ» al interior, cambiando de color cuando abrimos las puertas⦠vamos unaĀ opción bastante superflua, pienso yo.
Mañana arrancamos la verdadera razón de ser de esta prueba, el motor Ecoboost. Veremos si se merece los galardones que ostenta.
MĆ”s Información ā Prueba Ford Focus Titanium Ecoboost 125 cv, motor, conducción y consumos
MĆ”s Información ā Prueba Ford Focus Titanium Ecoboost 125 cv, equipamiento, precio y conclusiones