Prueba Skoda Karoq 1.5 TSI 150 CV DSG 2022 Style (con vídeo)

El Skoda Karoq es uno de los modelos de la marca checa que se ha convertido en un pilar fundamental gracias a sus ventas. Ahora que ha llegado la mitad de vida de este SUV, Skoda ha realizado una actualización para mantenerlo actual con ligeros cambios tanto estéticos como tecnológicos. Además, se ha conseguido una mejora del 9% en su aerodinámica, por lo que ahora será más eficiente.

La unidad que hemos estado probando del Karoq tiene como corazón un motor 1.5 TSI de 150 CV, va acompañado de una caja de cambios automática DSG y el acabado Style. Una combinación muy interesante y que sin duda alguna, es perfecta para nuestro día a día.

Pocas diferencias en su diseño exterior

Teniendo en cuenta que estamos ante un restyling y no una nueva generación, es común que no haya demasiados cambios. En el caso del Skoda Karoq, prácticamente son inapreciables las diferencias en su diseño exterior. Varían principalmente algunos detallitos estéticos pero no demasiado importantes.

En la zona delantera observamos un nuevo diseño es su parrilla de color negro brillo, unas grandes entradas de aire en la zona inferior y también en los laterales, mejorando así el flujo de aire. Por otro lado, incorpora como opcional unas nuevas ópticas de tipo Matrix Led, un extra muy recomendable.

Avanzando hacia el lateral, resaltan las llantas de 18 pulgadas con medida 215 en perfil 50 y los pasos de rueda en plástico negro a juego con las protecciones inferiores de las puertas. Finalizando con la zaga, encontramos unos nuevos pilotos full LED con intermitentes dinámicos, el nombre del fabricante escrito y un parachoques en plástico negro.

En su interior sí se aprecian algunos cambios

Continuando hacia el habitáculo del Skoda Karoq, sí podremos notar algunos cambios. Se actualiza en cuanto a equipamiento tecnológico además de algún que otro cambio en su diseño, como es el caso del volante de tres radios con botones «flotantes». Por otro lado, sigue teniendo mandos físicos para el control de la climatización, algo que siempre se agradece.

Las calidades siguen siendo más que aceptables, teniendo en su mayoría mullido con buen tacto. Las zonas de plástico duro también tienen unos ajustes realmente buenos ya que es complicado encontrarles algún grillo. Lo único que no me gusta es su negro piano, que se araña con mirarlo y se ensucia conforme abres la puerta.

En cuanto a su apartado tecnológico, el Karoq equipa un cuadro de instrumentos digital de 10,25 pulgadas muy personalizable. Luego, tenemos una pantalla multimedia de 8 pulgadas con botones táctiles para los accesos rápidos y botones físicos para el control de volumen y que en añadido, tiene Apple Car Play y Android Auto de forma inalámbrica.

Pasando hacia los asientos, tienen un nivel de confort muy bueno al igual que la sujeción de los mismos. Además, los tejidos utilizados son muy variados, como piel sintética, tela y símil de alcantara. La unidad que hemos estado probando llevaba el opcional del reglaje eléctrico en ambas plazas, pero no solo eso, si no que también cuentan con función de memoria.

Plazas traseras muy habitables en el Skoda Karoq

Dando un salto hacia la segunda fila de asientos, el Skoda Karoq se caracteriza por tener muy buena habitabilidad. Yo soy una persona muy alta que mide 1,94 metros,y aún así, el espacio para la cabeza y rodillas teniendo el asiento del conductor ajustado a mi altura, sigue siendo excelente. Además, ofrecen un agradable mullido y suficiente agarre, mientras que su plaza central es algo más firme pero relativamente soportable.

Por otro lado, quiero destacaros las salidas de aireación con control de temperatura, una toma de tipo USB-C, una de 12 voltios, pero lo más importante, tenemos una toma de enchufe de casa de 220 voltios, algo muy interesante y que en más de una ocasión nos puede sacar de un apuro.

Maletero con muy buena amplitud

El SUV checo no para de sorprender en cuanto a espacio, y es que su maletero cubica una capacidad de 521 litros. Además, podremos encontrar varias zonas en los laterales para dejar pequeños objetos con correas para amarrarlos y una barra con unas perchas para dejar las bolsas de la compra o mochilas sin que vayan dando tumbos por el maletero.

En cuanto a su boca de carga, es muy cuadricular y con unas formas que agradeceremos de cara a meter objetos de grandes dimensiones. Por otro lado, en el doble fondo tenemos un buen espacio ya que no encontramos rueda de repuesto o subwoofer para el equipo de sonido.

Gasolina y diésel, estas son las únicas motorizaciones del Skoda Karoq

Si hablamos sobre las mecánicas disponibles en el Karoq, tenemos versiones tanto gasolina como diésel, aunque ninguna con la etiqueta ECO de la DGT, un aspecto cada vez más importante. Por otro lado, a día de hoy tampoco se comercializa ninguna versión híbrida enchufable.

Sobre los gasolina, encontramos los bloques 1.0 TSI de 110 CV, 1.5 TSI de 150 CV y 2.0 TSI de 190 CV que va acompañado de tracción a las cuatro ruedas. Según la motorización, podremos elegir entre caja de cambios automática o manual. En cuanto a los diésel, todos son 2.0 TDI con 116 CV y 150 CV. Al igual que las versiones de gasolina, tendremos la posibilidad de escoger caja de cambios manual o automática DSG de doble embrague.

Al volante del Skoda Karoq

Comenzando con el apartado dinámico del Skoda Karoq, quiero destacaros en primer lugar su posición de conducción, siendo esta ligeramente elevada pero muy cómoda gracias a su asiento y al reglaje eléctrico que llevaba la unidad que hemos estado probando, que además, tiene función de memoria.

Arrancamos el motor, comenzamos la marcha y notamos una suavidad de rodadura muy agradable gracias a su bloque 1.5 TSI y a la caja de cambios automática DSG que prácticamente es inapreciable entre cambios de marcha. El motor tampoco se llega a apreciar en el habitáculo debido al buen aislamiento que posee.

Realizando trayectos por ciudad y carreteras interurbanas, se desenvuelve de forma sobresaliente. Como ya he mencionado antes, los inicios de marcha se realizan de una forma muy suave gracias a su caja de cambios. Además, el modo «vela» hace que la caja ponga neutral para irse desplazando por su propia inercia, algo que nos ayudara a reducir los consumos.

Por otro lado, cuando ya llevamos un rato haciendo incorporaciones a autopistas, adelantamientos y situaciones que exigen un poco más de esta mecánica, el Karoq ofrece suficiente soltura, aunque hay que recordar que no es un coche que corra ya que su 0 a 100 lo hace en 9 segundos, pero sí tiene respuesta y sobre todo fuerza, que cuando estemos cargados, lo agradeceremos.

¿Es un coche con buen confort?

Pero vamos a lo importante, y es que el Skoda Karoq ofrece un nivel de comodidad realmente bueno por varios aspectos. Uno de ellos es su aislamiento, que incluso a 120 km/h, el ruido aerodinámico es poco notorio en el habitáculo aunque provocado principalmente por unos espejos algo grandes.

Su suspensión adaptativa es otro de los detalles que acompaña a que sea un coche realmente cómodo. Es un opcional que bajo mi punto de vista es muy recomendable ya que según el modo de conducción que elijamos (Confort,Normal y Sport), se convertirá más blandita o dura. También podremos ajustar a nuestro gusto los parámetros del coche con el modo individual, pudiendo configurar la suspensión, dirección, motor o respuesta de la climatización.

Consumos Skoda Karoq 1.5 TSI DSG

Si hablamos sobre uno de los temas más importantes, el consumo, el Skoda Karoq homologa 6,4l/100km según el ciclo WLTP, sin embargo, nosotros durante toda la semana de pruebas y haciendo un uso mixto, hemos tenido una media de 7,6l/100km, una diferencia que se corresponde a la habitual.

Por otro lado, en autopista es fácil conseguir consumos de 6,4l/100km, aunque eso sí, circulando a velocidades legales. Si nos centramos en un uso exclusivo de ciudad, aquí es donde se eleva considerablemente obteniendo una media de 9l/100km.

Conclusiones Skoda Karoq

Para finalizar con la prueba del SUV Checo, vamos a comentar las conclusiones finales tras más de 1.000 km hechos en todo tipo de usos. Sin duda alguna, si buscamos un todocamino con buen espacio interior pero que no sea demasiado grande, que esté bien equipado y que ofrezca una buena relación producto/precio, el Skoda Karoq lo cumple a la perfección.

Comenzando con sus puntos más positivos, me gusta mucho la combinación de la mecánica 1.5 TSI de 150 CV junto a la caja de cambios DSG, siendo perfecta para nuestro día a día. Por otro lado, la habitabilidad es otro de los puntos a destacar y sin olvidarnos de su maletero, que es realmente amplio como hemos podido comprobar.

En cuanto a los puntos negativos, me parece complicado sacar algunos aunque sí los hay. En primer lugar su diseño exterior sigue siendo muy parecido a la versión anterior, por lo que a simple vista nos seguirá pareciendo idéntico al que se lanzó en 2017. Prácticamente ocurre lo mismo en su interior, ya que es un diseño muy simple, algo que puede gustarnos o no, pero es normal teniendo en cuenta que simplemente es un restyling y no una nueva generación.

Equipamiento Skoda Karoq

Active

• Llantas aleación 16″
• Regulador de velocidad (Tempomat)
• Faros delanteros y traseros LED Basic
• Front Assist con detección peatones
• Infotainment Swing 4 altavoces
• LED «Day Light» y Faros antiniebla

Ambition

• Climatronic BiZona
• «LANE ASSIST»
• Cámara marcha atrás
• Infotainment Bolero 8″ con 8 altavoces
• Sensores aparcamiento traseros y delantero
• Luces traseras LED animadas con diseño especial
• Regulador de velocidad plus limitador de velocidad

Style

• Llanta de aleación 18″
• Techo panorámico
• Pedal Virtual
• Virtual Cockpit 10″
• Driving Mode Select
• Volante deportivo de cuero multifunción con levas
• Control de crucero adaptativo
• Keyless FULL

Sportline

• Llanta de aleación 18″
• Matrix LED
• Driving Mode Select
• Parachoques traseros y delanteros deportivos
• Paquete LED  Luz Ambiental
• Asientos delanteros deportivos

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