La suspensión neumática y activa del nuevo Audi A8 es la bomba

Existen dos sistemas clave que suelen quebrar la cabeza de los ingenieros y de todo aquel que se dispone a crear un coche, ya sea un coche para la conducción normal en las calles y carreteras, un deportivo de altas prestaciones o un coche específicamente para circuito: la dirección y la suspensión. Cierto es que ya no es tan complejo como antes, pues la evolución y los estudios lo hacen más sencillo, pero hay quien quiere ir más allá; como el Audi A8.

Ya hemos visto varias “píldoras” de la próxima generación del Audi A8, que será desvelado oficialmente el próximo 11 de julio en Barcelona. Este modelo es la berlina de representación de la marca alemana y, como es habitual, en cada generación incorpora novedosas tecnologías y sistemas que pueden llegar o no al resto de la gama. En este caso nos centramos en la suspensión neumática del A8, que es activa, inteligente y muy segura. Vas a alucinar.

La suspensión neumática no es ninguna novedad, como tampoco lo es la suspensión activa. Igual el sistema de suspensión electromecánico activo con ajustes neumáticos, que controla cada rueda de forma individual, y que incorpora cuatro motores eléctricos de 48 voltios… sí. Más aún con una curiosa y sorprendente función de seguridad que os explicaremos unas líneas más abajo.

El caso es que el nuevo Audi A8 se adaptará a las situaciones de marcha, haciendo que los baches, resaltos, badenes y demás irregularidades del asfalto se noten mucho menos en su habitáculo.

¿Cómo lo consigue y cuáles son sus ventajas?

El Audi A8 tiene una cámara de vídeo ubicada en su frontal que analiza 18 veces por segundo el estado del terreno. Si ésta detecta alguna irregularidad, antes de que la gran berlina lo alcance, la suspensión ya se habrá adaptado. De este modo, el tarado será más rígido o más blando, según convenga, consiguiendo que las sacudidas de algún brusco bache lleguen mucho más filtradas a los ocupantes controlando los movimientos de la carrocería, lo que a su vez se traduce en una mayor estabilidad.

En el caso de las curvas, la suspensión neumática activa también interfiere para reducir las inclinaciones y balanceos de la carrocería. Todo esto es una gran ventaja tanto para el conductor, pues tiene una mayor sensación de confort y seguridad al volante, como para el ejecutivo que vaya en las plazas traseras realizando sus gestiones.

Además, el eje trasero también es direccional, por lo que gana varios puntos en agilidad, tanto cuando se busca confort como cuando se incrementa el ritmo de conducción. Comenta la marca que el radio de giro del Audi A8 es inferior que el de un A4 (de dimensiones mucho más contenidas). Sorprendente.

Mucha más seguridad en caso de impacto lateral gracias a la suspensión. ¿Cómo?

El nuevo Audi A8 también trae consigo el sistema de seguridad Audi pre sense 360, que en combinación con esta suspensión neumática reduce la carga que sufrirán los ocupantes en caso de accidente lateral en un 50 % a más de 25 km/h. Los sensores detectan si un vehículo se acerca hacia el costado de nuestro A8 y si se va a producir un choque inminente.

En caso de que esta situación se produzca con un impacto a más de 25 km/h, los actuadores de la suspensión entran en acción. Estos elementos elevan la carrocería nada menos que 8 cm en solo medio segundo. ¿Te preguntas qué se consigue con esto? La fuerza de la colisión no se recibe totalmente en las puertas o en las aletas, pues se dirige a las zonas más reforzadas de la carrocería como los largueros del chasis o la estructura del piso (que también es muy rígida). Con ello se consigue, como hemos citado en el párrafo anterior, que la carga que puedan sufrir los ocupantes del nuevo Audi A8 se reduzca en un 50 % comparado con un vehículo idéntico que no eleve su carrocería.

Te recordamos que los golpes laterales son los que más daños producen al conductor y los ocupantes en caso de accidente, pues la superficie de absorción y deformación de la carrocería es mínima, llegando muchas más inercias al habitáculo. Reconócelo, has alucinado tanto como nosotros.