Tesla ha desarrollado un sistema que es capaz de diferenciar entre personas, para adaptar el funcionamiento del airbag en caso de accidente. Gracias a ello, esta medida de seguridad será capaz de responder de forma personalizada para minimizar los daños de cada uno de los ocupantes.
La solicitud de la patente de Tesla se hizo publica a principios de la semana pasada bajo el nombre de «Sensores para sistemas y métodos de clasificación de ocupantes de vehículos». En las imágenes se muestra cómo los ingenieros de la marca están trabajando en un método que diferencia por ejemplo entre la presencia de un niño o de adulto.
Los límites de la seguridad de los airbags
No hay que olvidar que el airbag es un dispositivo pirotécnico que siempre funciona de la misma forma en caso de choque. Por lo que está calibrado para proteger de la mejor manera posible a muchos tipos de personas. Sin embargo, este funcionamiento rígido tiene sus límites. No es lo mismo detener a una persona de 50 kg que a una de 130 kg.
La marca explica los retos que existen a día de hoy en el funcionamiento del airbag: “Los vehículos son cada vez más seguros porque incorporan sistemas automáticos capaces de vigilar los movimientos de un coche mientras está en marcha y de alertar o ayudar al conductor según sea necesario. Sin embargo, sigue habiendo dificultades para detectar de forma fiable la presencia de personas dentro del vehículo y clasificarlos con precisión…»
También sabe si estás mal sentado
La solución de Tesla es la utilización de unos sensores en los asientos que pesan a los ocupantes para que el airbag se adapte a ese dato. La empresa los describió como “un sistema de control para vehículos que puede incluir uno o más sensores de presencia y medida del peso de los pasajeros, además de dispositivos configurados para la comunicación con dichos sensores. Cada uno puede programarse para mandar información de un asiento en concreto. Estos dispositivos lógicos pueden configurarse para recoger esos datos y adaptar el funcionamiento de los sistemas de seguridad».
Otro de los inconvenientes del airbag es que está pensado para proteger a personas sentadas de forma óptima. Una circunstancia que los muñecos dummy de los test de seguridad siempre cumplen, pero que no hay que dar por asumido en la vida real. Según Tesla, este sistema también puede detectar la forma en la que están sentados los ocupantes. Un avance que permitiría una optimización aún más precisa de la forma en la que se despliegan los airbags.