Ebro, la histórica marca española de vehículos, ha dado un paso estratégico al convertirse en patrocinador oficial de la Selección Española de Fútbol. Este movimiento supone un impulso para la presencia de la firma en el ámbito deportivo nacional, además de asociarse con uno de los símbolos más reconocidos de nuestro país. La colaboración no solo amplía la visibilidad de Ebro, sino que también refuerza su apuesta por la innovación, la sostenibilidad y el trabajo en equipo.
El acuerdo, que ha sido rubricado en la sede de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) en Las Rozas, Madrid, contará con una vigencia inicial hasta 2028, con opción de prórroga hasta 2030. Estará presente en todas las convocatorias y campeonatos relevantes, involucrando tanto a la selección masculina y femenina como a la sub-21. De este modo, Ebro acompañará a los combinados nacionales en compromisos de máxima exigencia, como la Final Four de la Nations League —en la que debutará como socio—, el Mundial de 2026, la próxima Eurocopa y otras competiciones clave.
Acuerdo estratégico entre tradición y modernidad
La firma del contrato ha reunido a Pedro Calef, CEO de Ebro Motors, y a Rafael Louzán, presidente de la RFEF, en un acto que ha servido también para mostrar las últimas novedades de la marca. En concreto, los modelos S700 y S800, ambos con tecnología híbrida enchufable, y el recién presentado SUV S400, que verá la luz durante el Automobile Barcelona, han sido protagonistas. Todos estos vehículos se ensamblan en la planta que Ebro y el grupo chino Chery comparten en la Zona Franca de Barcelona, marcando una nueva etapa en la historia de la automovilística.
Su presencia se reflejará no sólo en los partidos internacionales y domésticos, sino también en numerosas acciones promocionales junto a los jugadores y el cuerpo técnico, contribuyendo a una mayor proximidad con los aficionados y fomentando el vínculo entre marca y afición.
Impulso a la movilidad sostenible y la industria local
El acuerdo también afianza la identidad de Ebro como emblema nacional, acercando la industria automovilística española al gran público y contribuyendo a la economía local a través de la fabricación y comercialización de coches en territorio nacional.
Tras décadas como icono de los vehículos comerciales, Ebro ha logrado reposicionarse con fuerza en el mercado de turismos, en especial vehículos SUV, y una fuerte apuesta por las raíces españolas.
Fuente e imagen | Ebro
