Si os preguntamos por el nombre de Gemballa igual a muchos os suena. Este mítico preparador es uno de los más afamados de Alemania, sobre todo porque suele colaborar «codo con codo» con fabricantes de la talla como Porsche. De hecho, uno de sus últimos lanzamientos fue el Gemballa Avalanche 4×4. Sin embargo, aunque muchos no lo puedan creer, las casualidades existen y esta es una de las más raras: el nacimiento de una nueva «Gemballa».
La firma de la que os hablamos es de Marc Philipp Gemballa. Pero antes de que os asustéis os diremos que no están asociados «directamente» con la empresa de tuning que ya conocemos. De hecho, debemos remarcar que son compañías diferentes aunque hay que indicar que Marc Philipp es hijo de Uwe Gemballa, el fundador de la firma original. Lo curioso es que el joven Philipp ha «parido» un Gemballa Marsien… siguiendo los pasos de su padre.
La producción del Gemballa Marsien se limitará a 40 unidades… y su precio parte de los 495 euros
Y os preguntaréis ¿Por qué ha seguido sus pasos? Sencillo, porque para dar a luz al Marsien se han basado en el Porsche 911. En este caso, han apostado por crear una versión que podría satisfacer las necesidades de aquellos que buscan la practicidad de un SUV sin tener que renunciar a la imagen de un coupé deportivo. Para ello, les ha bastado con hacer más agresiva su imagen y dotarlo de una técnica adecuada a su uso.
De entrada, su carrocería, fabricada en fibra de carbono, ha sido diseñada por Alan Derosier. Quizá no os suene, pero os diremos que hizo una reinterpretación del 908 magnífica. En segundo lugar, la suspensión tiene dos tipos de ajustes. Una para circular por carretera que tiene una altura libre al suelo de 12 centímetros. Otra, para campo y rodar por zonas rotas, que incrementa la distancia hasta alcanzar los 15 centímetros.
El responsable de esta puesta a punto es KW Automotive. La configuración delantera es de doble horquilla y cuenta con una amortiguación de pistón y control activo. Por su parte, la trasera presenta una configuración de tipo multibrazo. Además, los amortiguadores reaccionan en 20 milisegundos para adaptarse a cualquier tipo de terreno. Las llantas, forjadas, pueden ser de 20/21 pulgadas para calle y de 19/20 pulgadas para el campo.
Por último, debemos hablar del motor. La base es el bloque 3.7 litros que anima al 911 Turbo S, sin embargo gracias a Ruf la potencia sube hasta una cota «indecente». De esta forma, el motor bóxer de seis cilindros entrega más de 750 CV y 930 Nm de par. Para aquellos que buscan aún más potencia, hay una actualización que lleva el motor hasta 830 CV con turbocargadores VTG y una transmisión y centralita retocadas.
Fuente – Marc Philipp Gemballa