La evolución del sector del automóvil obliga a los fabricantes a actualizar sus modelos cada vez más pronto. En las tres últimas décadas hemos visto cómo el ciclo comercial de un producto se ha acortado de unos 8 años a los 6. Esto se debe a los avances en materias como la seguridad, mecánica o diseño. Sin embargo, aún hay firmas que no tienen problema alguno en extender la vida de sus modelos y para prueba está el Grupo FCA o Infiniti.
El Infiniti QX80 es uno de los todo terreno más lujosos, exclusivos y veteranos del mundo. La prueba está en que se asienta sobre la plataforma F-Alpha que Nissan desarrolló en el año 2005 para modelos como la Titan o el Pathfinder. La actual generación, con código interno Z62, llegó al mundo en 2010 y en este tiempo se ha mantenido actual gracias a varios restylings. Ahora, con una década de vida afronta una nueva actualización.
El actual Infiniti QX80 lleva a la venta desde el año 2010
La última vez que el Infiniti QX80 pasó por quirófano fue hace unos meses. En concreto, fue para celebrar el treinta aniversario de vida de la firma premium de Nissan. Sin embargo, ahora asume cambios de mayor calado ya que su interior recibe más tecnología y mejores materiales. En primer lugar, porque estrena una nueva versión del sistema de cámara Smart Rearview Mirror con pantalla de 9,6 pulgadas de tamaño.
Con esta nueva función, la cámara de visión trasera ofrece una visión más amplia tanto horizontal como vertical. Además, para mejorar la visibilidad en conducción nocturna puede reducir el parpadeo de las luces LED que puedan reflejarse en ella. En segundo lugar el sistema de control de crucero adaptativo recibe una nueva calibración para funcionar de forma conjunta con el sistema de aviso en ángulo muerto o prevención de cambio de carril.
En cuanto a estética se refiere, las líneas básicas del Infiniti QX80 no cambian. Sus responsables lo han decorado con apliques en cromo oscuro y reflejos negros en la parrilla y llantas de aleación. Esta misma terminación también podemos verla en los espejos retrovisores, rejillas de ventilación de los guardabarros o la tira del portón trasero. Por último, en el interior estrena el tono Truffe Brown que se une a los Graphite y los Sahara Stone.
Por último toca hablar del tren motriz. Aquí tampoco hay cambios, y más cuando tiene en EEUU y países Árabes sus principales puntos de venta. Así, bajo el capó está el bloque gasolina 5.6 litros V8 con 405 CV de potencia y 560 Nm de par. La única transmisión disponible es de tipo automático con siete relaciones que envía la potencia tanto al tren posterior como a las cuatro ruedas. Una pena que no lo podamos disfrutar en Europa.
Fuente – Infiniti