Infiniti presenta una revisión profunda del gran SUV QX80

Infiniti QX80

Los SUV´s seguirán mandando en los rankings de ventas mundiales hasta que la moda pase o el precio del petróleo suba hasta límites estratosféricos. Estados Unidos y Oriente Medio son dos de las regiones del globo terráqueo que mayor número de vehículos de este tipo consume, y por tanto las marcas están como locas por saciar su demanda. Infiniti, aunque creamos lo contrario, es una de las marcas favoritas en este tipo de vehículos, y estos países adoran sus coches.

El SUV más grande que Infiniti tiene en su gama es el todo poderoso QX80. La anterior generación de este impresionante modelo databa del año 2010 y estaba desarrollado sobre la misma plataforma que da vida al Nissan Armada. En los años 2013 y 2015 sufrió sendos restylings que le ayudaron a mejorar su calidad y equipamiento pero 2017 se prefiguraba como el año clave para que llegara una nueva generación.

Infiniti QX80

El Concept QX80 Monograph marcaba el camino hacia esta nueva iteración, sin embargo, los responsables de la firma premium de Nissan, aseguraron que mantendría la misma plataforma y gama mecánica del modelo actual. Teniendo en cuenta este hecho, la nueva generación del Infiniti QX80 no será como tal un modelo concebido desde cero, sino que será una profunda actualización del que se vende en estos momentos.

Partiendo de esta base, los ingenieros y responsables de producto de Infiniti se han centrado en modificar su frontal con nuevos faros y líneas en parrilla y paragolpes. En la parte lateral del QX80 los cambios son menores, pues se limitan a nuevas llantas de aleación (de 20 a 22 pulgadas), barras para el techo y poco más. En la parte trasera, los faros reorganizan su estructura interior y pasan a incorporar tecnología led, junto a un nuevo paragolpes.

En el interior los cambios son más sutiles. El Infiniti QX80 es un modelo que en esas esferas, se vende prácticamente solo, y por tanto, como funciona bien han decidido no cambiarlo. El volante y salpicadero mantienen las formas ya conocidas, aunque las molduras cambian e incorporan otros materiales. En las plazas traseras, el único cambio que se puede apreciar es que las pantallas de los sistemas de infoentretenimiento crecen una pulgada.

A nivel mecánico, y como habíamos indicado antes, el único bloque disponible sigue siendo el V8 con 5.6 litros de cilindrada que rinde 400 cv y 560 Nm de par. Este motor está disponible con una caja de cambios automática por convertidor de par con siete relaciones. Su consumo y prestaciones oficiales no hay sido comunicados, pero seguro que son las mismas que tenía su predecesor. Por último, a la gama podría llegar más adelante una versión V6 Biturbo de potencia aún no especificada.

Fuente – Infiniti


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