Como lo dice el título, no estamos en presencia de un lindo coche, sino más bien de un modelo innovador que pretende presentar la senda que recorre Ford en su lucha por los vehículos del tipo crossover.
Más de algún comentario se ha presentado respecto del parecido que tiene el modelo en cuestión con los presentados en “2001: Odisea en el espacio” por Stanley Kubrick, los cuales no tienen un lineamiento definido, que muestre un espíritu claro por ejemplo, sino mas bien se juega con la mezcla de distintos componentes esbozados en la obtención de buen espacio para mayor comodidad.
Quizás no sea muy atractivo el concepto presentado por los americanos para algunos, pero no deja de ser interesante el intento por ir cambiando un poco lo que ha sido hasta ahora el mercado de vehículos del tipo crossover, por eso es que hay cabida para hablar de este modelo, pues hay que ir viendo que se quiere producir para referir más adelante otros modelos al original, o sea al Airstream que se muestra en este artículo.
Por fuera podemos pensar muchas cosas, incluso si pegamos un logotipo aseguramos con la mano en el corazón que se trata de un tipo de reparto, más esa idea “lógica” en un comienzo, se ve terriblemente turbada al observar que las puertas se abren hacia arriba, o sea son del tipo “gaviota”, por lo cual inmediatamente pensaríamos que se trata de un reparto “especial”.
Más allá de las bromas se ha jugado con las formas y ello les ha costado el hecho de parecerse a una furgoneta, es verdad y no hay que negarlo, no es muy atractivo el modelo, a pesar de ser muy eficiente para una familia que necesite del espacio, no es precisamente el modelo que siempre hemos soñado, por ello que hay que intentar ver la intención al crear este concepto.
Se percata el usuario de la innumerable cantidad de ventanas presentes en el modelo, ellas con formas extrañas, en el mismo frontis podemos encontrar un sacado que apunta hacia la parte posterior del vehículo, la cual no tiene, al parecer, ningún objeto pero que entrega una potencial mejor visibilidad y contacto con el exterior, evitando lo que las “furgonetas” producen comúnmente, lo cual es justamente “encierro”.
Asimismo la ventana del conductor es muy coherente con el diseño, pero presenta una disyuntiva no menos importante, puesto que es sabido por todos que en trayectos largos o cortos los conductores gustan de abrir la ventana y tener el brazo sobre el marco, como para tener una mejor ventilación, apreciar mejor el paisaje o simplemente por gusto, en el modelo de Ford eso es imposible, porque la ubicación y forma de la misma no lo permite, por otra parte es posible que se haya querido decir que contara con un sistema de control de aire interior tan sofisticado que será “imposible” o quizás “innecesario” el tener que abrirlas pues el usuario contara con todo lo necesario y “más” como para estar muy a gusto en su interior, algo difícil de discernir, a lo mejor ridículo para algunos, pero detalle al fin.