A diferencia de lo que ocurría hace muchos años, en la actualidad parece que Alfa Romeo siempre llega un poco tarde a los sitios, como al segmento de los SUV con el Stelvio. Bueno, o siempre quien llega primero triunfa. En cualquier caso, no es ningún secreto que los Alfa Giulia y Stelvio no están siendo muy demandados. ¿Será capaz el nuevo Alfa Romeo Tonale de cambiar esta línea? Vamos a probarlo a fondo con la versión gasolina microhíbrida de 130 CV.
El Alfa Tonale es un SUV del segmento C, un SUV compacto, el primero de la marca italiana. Está basado en la plataforma del Jeep Compass y no en la Giorgio de los Stelvio y Giulia, pero cuenta con una clara identidad Alfa. En cierto modo parece un Stelvio encogido, aunque también integra soluciones actualizadas que le dan un punto más tecnológico.
Bello… ¡y moderno! Así es el Alfa Romeo Tonale por fuera
La estética es algo muy personal de cada uno, pero creo que los Alfa modernos son coches realmente bellos. A decir verdad, siempre han sido bonitos a lo largo de toda su historia. El Tonale no es una excepción, combinando la elegancia habitual de la firma italiana y rasgos de sus antepasados, con un toque visual más moderno.
El frontal está presidido por la habitual calandra en forma de escudo y el logo de la marca, dejando la matrícula al lado izquierdo y en formato pequeño. La personalidad del Tonale respecto a sus hermanos de gama viene dada por el estilo de los faros LED con tecnología matricial.
Esta unidad, con la terminación Edizione Speciale, que era una versión de lanzamiento, monta unas preciosas llantas de 20 pulgadas, escondiendo en las delanteras unas pinzas fijas de 4 pistones de Brembo en color rojo.
Por su parte, la zona trasera vuelve a combinar elegancia y modernidad, con formas generales muy puras y añadiendo una característica línea de iluminación que comunica los finos pilotos de LED. Por si te lo estás preguntando, este color de carrocería tan llamativo es un verde tricapa que cuesta 1.500 euros.
En cuanto al tamaño concreto, el Alfa Tonale mide 4,53 metros de largo, 1,84 de ancho, 1,60 de alto y su distancia entre ejes es de 2,64 metros.
Un interior deportivo que mejora en tecnología
En el interior nos encontramos con buenas noticias. Y es que el sistema multimedia ha mejorado muchísimos enteros si lo comparamos con sus hermanos de gama. Tenemos una pantalla táctil de 10,25 pulgadas con integración de Alexa, Apple CarPlay y Android Auto. Además, y a diferencia de otros modelos del Grupo Stellantis, el climatizador se maneja de una forma sencilla con mandos independientes.
Otra pantalla encontramos tras el volante. El cuadro de instrumentos es digital y personalizable, con una diagonal de 12,3 pulgadas. Por su forma, vuelve a hacer un guiño a las habituales esferas que tan reconocibles hacían los salpicaderos de la marca. Por cierto, con tres modos de visualización diferentes para las informaciones.
Muy deportivo se percibe su volante por tacto y forma, incluyendo además el botón de arranque con un pulsador en el propio volante. Pero sin duda alguna, lo que más deportividad transmite en este coche son las enormes levas. El diseño es bellísimo, pero además son metálicas, con un tacto fantástico. Ya quisieran muchos clientes de superdeportivos tener unas levas como estas.
Algunos ajustes mejorables, pero buena nota a nivel general
Mientras tanto, en la consola central tenemos conexiones USB, una toma de 12 voltios, superficie de carga inalámbrica para el móvil y la ruleta del DNA. Son los modos de conducción que afectan al peso de la dirección y a la respuesta del motor y del cambio. Si la unidad lleva amortiguadores adaptativos, también a la dureza de los mismos. El modo D es el Dynamic, el N es el Natural o “Normal” y el A es el Advance Efficiency, es decir, un modo Eco de toda la vida.
Por lo demás, el habitáculo tiene una estética muy lograda, destacando también una moldura retroiluminada en el lado del acompañante. Es cierto que no todos los materiales son de altísima calidad, recurriendo a plásticos rígidos en algunas zonas que se combinan con otros mullidos en parte del salpicadero y de las puertas.
En cualquier caso, los ajustes dan buenas sensaciones y visualmente me parece que está muy conseguido. Además, y a diferencia de muchos coches, no hay superficies en negro piano. Los únicos grillos que han llamado la atención han venido de la zona del cuadro de instrumentos, pero sinceramente creo que es problema más de la unidad probada que algo generalizado.
Por último, podemos obtener una buena postura al volante gracias a los amplios reglajes de volante y asiento, aunque la visibilidad hacia la parte posterior no es de las mejores. Un punto positivo es que todos los mandos y botones que más utilizaremos caen muy a mano.
Plazas traseras correctas, pero no sobradas
El acceso a la segunda fila es sencillo y, una vez dentro, el espacio para las rodillas y pies es correcto, con un mullido agradable del asiento. Para la cabeza es un poco más justo, pero no se aleja de la media del segmento C-SUV. Eso sí, personas que superen el 1,80 tal vez se sientan un poco menos desahogadas en estas plazas traseras principalmente por la forma del guarnecido superior. La plaza central tampoco es demasiado práctica.
Por lo demás, tenemos salidas de aireación centrales, una toma USB normal y otra de tipo C. No hay ganchos para perchar algún traje o vestido, pero sí un práctico reposabrazos central con dos huecos para botellas y una trampilla para transportar objetos finos y largos, como unos esquís.
Maletero en la media del segmento con 500 litros
El maletero cuenta con apertura automática. Una vez abierto el portón tenemos un volumen que a simple vista no parece enorme. Sin embargo, tenemos una bandeja que como veis en el vídeo se puede sujetar con unos salientes para acceder al doble fondo, que sí es amplio.
Además, podemos colocar el suelo en la zona inferior y ahora sí, nos parece más satisfactorio. En total, hablamos de 500 litros, por lo que está en la media del segmento. Los respaldos traseros se pueden tumbar, pero no tenemos unos tiradores para hacerlo rápidamente desde el maletero, sino que tenemos que hacerlo desde los propios asientos.
Motores disponibles en el Alfa Tonale
En cuanto a mecánicas se refiere, el Alfa Romeo Tonale está disponible con dos motores gasolina microhíbridos a 48 voltios, recurriendo ambos a un bloque térmico de 1.5 litros y cuatro cilindros. Desarrollan 130 y 160 CV. También hay una opción diésel con un 1.600 de 130 CV y en apenas unas semanas aterrizará un híbrido enchufable que se situará como tope de gama, rindiendo 280 CV.
En nuestro caso estamos probando el microhíbrido menos potente, que da 130 CV y 240 Nm de par máximo. Su consumo homologado es de 5,9 l/100 km.
Al volante del Alfa Romeo Tonale gasolina de 130 CV (etiqueta Eco)
Como decía, este motor lleva un apoyo eléctrico, pero a diferencia de otras mecánicas similares, en este caso sí es capaz de mover las ruedas con el motor de gasolina apagado, aunque sólo en condiciones puntuales y a baja velocidad. Este pequeño propulsor eléctrico va integrado en la caja de cambios de doble embrague con 7 marchas, ofreciendo 20 CV y 55 Nm.
Por su funcionamiento, y gracias a que puede mover el coche con el motor térmico apagado, realmente se encuentra más cerca de un híbrido convencional que lo que hasta ahora conocíamos como microhíbrido.
Estamos en un Alfa Romeo, y eso siempre es sinónimo de deportividad. Sin embargo, este Tonale no toma la plataforma Giorgio que utilizan los Stelvio y Giulia; sino que recurre a la del Jeep Compass. ¿Es esto un problema?
No, un problema no es, pero no me ha parecido tan bonito de conducir como sus hermanos de gama. Podría decir que no tiene ese alma o ese Cuore Sportivo. Este coche es de tracción delantera y no de propulsión trasera, perdiendo parte de esa emoción que nos dan sus hermanos de gama. Tampoco cuenta con la altísima precisión, pero aquí acaban los aspectos negativos.
No tiene el más puro Cuore Sportivo, pero destaca en dinamismo
Porque a decir verdad la dirección de este coche marca la diferencia. No hubiera estado de más que fuera un pelín más pesada para darnos mayor sensibilidad, es lo único que le falta, pero la rapidez es brutal. Es una de las direcciones más directas del mercado, lo que nos permite movernos entre curvas con muy poco giro de volante y realizar rapidísimos cambios de trayectoria. Eso sí, el radio de giro para maniobras en sitios estrechos no es el mejor.
La suspensión también ayuda, con un tarado firme aunque no extremo. Es un coche que gira muy plano y que transmite una gran sensación de confianza a ritmo alegre. Por lo tanto, y aunque tiene la misma plataforma que el Jeep Compass, el comportamiento es muy distinto. Eso sí, a la hora de pasar por zonas muy bacheadas, el propio Compass u otros coches, como el Citroën C5, son considerablemente más cómodos.
Un poco más de potencia redondearía el conjunto
Lo que me da la impresión de no terminar de acompañar al Alfa Tonale es este motor. Ojo, que es un motor perfectamente válido para la mayoría de situaciones y conductores, pero con una estética tan deportiva, un chasis firme y una dirección tan directa dan ganas de tener mucha más potencia en el pedal derecho. Y al final, 130 CV en un coche de este tamaño no son suficientes para pintarte una sonrisa de oreja a oreja.
Vamos ahora con los consumos. En autopista a 120 clavados de limitador hemos obtenido una media de 6,3 l/100 km, que está bastante bien. Mientras, en ciudad si hacemos un uso un pelín suave del acelerador a la hora de arrancar no superarás los 7,5 litros, prácticamente garantizado. Es ahí donde más se nota el buen funcionamiento del sistema mild hybrid de este Tonale. En total, durante nuestra prueba hemos obtenido una media de 6,9 l/100 km; que tampoco me parece nada elevado.
Conclusiones
Bajo mi punto de vista, Alfa tiene un problema. Son coches muy atractivos a nivel estético y, por norma general, tienen una conducción fantástica. Sin embargo, ciertas malas famas de hace varias décadas y un precio un tanto alto hacen que muchos clientes digan, bueno, pues no me complico y me voy a por el Audi, el BMW, el Mercedes o el Volvo. ¡Qué poca personalidad!
La parte buena de este Tonale es que no resulta tan caro como un Stelvio o un Giulia y los apasionados de la marca italiana, los Alfistas, que son muchos, no tendrán la excusa del precio para adquirirlo; ya que es relativamente asumible dentro de que hoy día todos los coches son caros.
Y ya que he mencionado los precios, más abajo tenéis una tabla completa, pero las cifras principales son una tarifa de partida de 36.500 euros, que corresponde al acabado Super y al motor diésel. Si queremos la etiqueta Eco, esta variante probada microhíbrida de gasolina con 130 CV solo cuesta 550 euros, es decir, 37.050 euros. Por último, el híbrido enchufable de 280 CV arranca en los 51.000 euros.
Equipamientos Alfa Romeo Tonale
Super
- Llantas de 18 pulgadas
- V del frontal en cromo satinado
- Insignias cromadas
- Manillas de las puertas en color de la carrocería
- Spoiler trasero de techo
- Tapas de los espejos exteriores en negro
- Alfa DNA (modos de conducción)
- Arranque sin llave
- Climatizador bizona
- Luces interiores de LED
- Elevalunas en las cuatro ventanillas
- Freno de estacionamiento eléctrico
- Reposabrazos central delantero
- Freno de emergencia automática con advertencia de colisión frontal
- Asistente de salida de carril
- Limitador de velocidad y control de crucero
- Asistencia de velocidad inteligente
- Sensor de luces
- Reconocimiento de señales de tráfico
- Faros Full LED
- Cuadro digital de 12,3 pulgadas
- Tomas USB normal y tipo C
- Pantalla de 10,25 pulgadas
Sprint (añade)
- Espejos exteriores con plegado eléctrico
- Volante deportivo de cuero con botón de arranque
- Detector de fatiga
- Kit de reparación de neumáticos
- Luz ambiental monocolor
- Sensores de aparcamiento delanteros y traseros
- Apple CarPlay y Android Auto
- Carga inalámbrica para el móvil
- Arranque sin llave
- Espejo interior con atenuación automática
- Reposabrazos central trasero
- Asiento del conductor con ajuste lumbar eléctrico
Ti (añade)
- Insignia Ti plateada
- Inserciones en negro brillante
- Control de crucero adaptativo
- Cámara de marcha atrás y líneas dinámicas
- Iluminación ambiental personalizable
- Portón eléctrico
- Iluminación Matrix Full LED adaptativas
Veloce (añade)
- Llantas de 19 pulgadas
- Cristales oscurecidos
- Insignia Veloce en acabado oscuro
- Salidas de escape en cromado
- Umbral de la puerta en aluminio
- Calandra frontal con la V oscurecida
- Asientos de conductor y pasajero eléctricos
- Levas del cambio de aluminio fijas a la columna
- Pedales metálicos
- Suspensión deportiva con válvula de doble efecto
- Contorno de ventanillas en negro brillo
- Pinzas de freno pintadas en rojo
Precios Alfa Romeo Tonale
Motor | Cambio | Tracción | Acabado | Precio |
---|---|---|---|---|
Motor | Cambio | Tracción | Acabado | Precio |
1.6 diésel 130 | Automático | Delantera | Super | 36.500 € |
1.5 Hybrid gasolina 130 | Automático | Delantera | Super | 37.050 € |
1.6 diésel 130 | Automático | Delantera | Sprint | 38.900 € |
1.5 Hybrid gasolina 130 | Automático | Delantera | Sprint | 39.550 € |
1.6 diésel 130 | Automático | Delantera | Ti | 41.400 € |
1.5 Hybrid gasolina 160 | Automático | Delantera | Ti | 44.050 € |
Plug-in Hybrid 280 | Automático | Integral Q4 | Veloce | 56.000 € |
1.5 Hybrid gasolina 160 | Automático | Delantera | Veloce | 46.550 € |
Plug-in Hybrid 280 | Automático | Integral Q4 | Edizione Speciale | 51.000 € |
Opinión del editor
- Valoración del editor
- Puntuación 4 estrellas
- Excelente
- Alfa Romeo Tonale
- Reseña de: Diego Ávila
- Publicado el:
- Última modificación:
- Diseño exterior
- Diseño habitáculo
- Plazas delanteras
- Plazas traseras
- Maletero
- Mecánica
- Consumos
- Confort
- Precio
Pros
- Diseño exterior e interior
- Conducción dinámica
- Consumos estables y ajustados
Contras
- Algún ajuste del interior
- Se echa en falta más peso en la dirección
- Plazas traseras mejorables