Prueba Mercedes SLK 200, descapotable para todo el año (parte II y ultima)

Viene de Prueba Mercedes SLK 200, descapotable para todo el año

Conducción y dinámica.

La unidad probada es el SLK 200 BlueEFFICIENCY de 184CV, que es básicamente el mismo motor que el del modelo anterior solo que ahora llevan turbo en vez de compresor. Da la casualidad de que del anterior SLK sólo pude probar este mismo motor, así que no puedo decir nada del resto de propulsores. No he notado diferencias apreciables entre el antiguo motor K (compresor) y este actual con turbo, salvo en el consumo que es bastante menor, sobre todo en ciudad gracias al sistema Start&Stop. Homologa casi un 20% menos de consumo y anda igual de bien, así que bravo por Mercedes.

Este motor resultará suficiente para la mayoría de los conductores. Recupera muy bien, empuja en bajas y se estira bastante arriba. Además el escape petardea en los cambios de marcha si se pisa el acelerador con decisión, aportado un plus de emoción a la conducción. El cambio automático 7G Tronic Plus de siete velocidades (antes de cinco) resulta lentorro y poco agradable de usar en conducción deportiva, sobre todo si no equipa levas en el volante (opcionales en esta unidad) y has de dedicarte a dar toquecitos a la palanca, de uso no muy intuitivo. En cualquier caso, este cambio 7G Tronic Plus es muy superior al anterior automático de 5 marchas, aunque peor para mi gusto que los de la competencia (Audi, BMW, etc.) en conducción agresiva y similar en conducción tranquila.

Puede llevar tres suspensiones, normal, deportiva y una de amortiguación variable electrónicamente. Esta unidad llevaba la normal, que unida al motor de 184 CV me parece que tiene muy buen compromiso entre comodidad y comportamiento. En mi recorrido de pruebas conjugué trazado urbano con badenes, autovía y dos carreteras (una en buen estado y otra muy irregular). El resultado me parece sobresaliente y oyendo los comentarios de compañeros que hay probado las otras suspensiones, quizá sea la mejor opción.

El Mercedes SLK 200 aporta gran seguridad al conducirlo y puede llevarse rápido fácilmente. El ESP tiene un tarado que no permite el más mínimo deslizamiento, ayudado por los enormes neumáticos traseros que se aferran al suelo como lapas. Siquiera acelerando a tope en curva podremos descolocar este coche…no es una configuración muy deportiva, pero permite ir rápido a cualquier conductor con mucha seguridad.

Descapotable o Coupé

Mi experiencia con coches descapotables es limitada, pero este Mercedes SLK me ha convencido.

Sin techo permite circular hasta 130 km/h sin problemas, e incluso a 160 km/h no es muy desagradable. El sistema AirScarf (bufanda de aire) proyecta un suave chorro de aire climatizado en la nuca y hombros del conductor, contribuyendo al confort. También puede llevar el sistema AIRGUIDE, que son unas piezas de plástico móviles que pueden instalarse detrás de los asientos. No he podido probarlas y no sé que tal funcionan.

Con techo puesto transmite sensación de gran solidez y el aislamiento es muy bueno. Está a años luz de los coches descapotables de lona de hace 10 ó 15 años.

Motor y consumo.

El Mercedes-Benz SLK puede llevar 3 motores de gasolina y uno Diesel. El Diésel es el 250 CDI BlueEFFICIENCY de 200CV con dos turbos. En gasolina está el 200 BlueEFFICIENCY de 184CV y el 250 BlueEFFICIENCY de 204 CV, que es el mismo bloque cuatro cilindros 1.8 litros con turbo. También tenemos el V6 350 BlueEFFICIENCY de 3,5 litros de cilindrada y 306 CV sin turbo. Todos los cambios automáticos son necesariamente 7G Tronic Plus de siete velocidades.

Todos los motores homologan consumos sensiblemente menores que antes (hasta un 20% menos en la unidad probada), gracias en parte al sistema Start&Stop y otra serie de medidas de ahorro.

Precio y equipamiento.

El Mercedes SLK parte de los 43.000€ aproximadamente. Como viene siendo habitual en Mercedes, este precio está por encima de la media del mercado.

Puede llevar equipamientos muy interesantes, como el sistema Pre-Safe que se adelanta a los impactos, el control de velocidad activo (que puede hasta frenar para disminuir las consecuencias de un golpe), el Attention Assist (que detecta la fatiga en el conductor y le aconseja parar), un techo solar de cristal con opacidad variable (dicen que es espectacular, pero es un extra carísimo), etc…

Conclusión:

El Mercedes SLK es exactamente lo que vemos, un excelente coupé-descapotable de clase alta para viajes solo o en pareja. Permite disfrutar del aire libre y de una conducción cómoda y tranquila, a la vez que no se desenvuelve mal en conducción deportiva ocasional. El motor básico de gasolina es suficiente para gozar de este coche, yo me ahorraría el dinero que cuestan los motores superiores y lo invertiría en interesantes extras.

Su precio es alto y por esa cantidad de euros hay muchas alternativas al SLK, pero…no todos llevan la estrella de Mercedes en el capó.

Agradecemos a Muvesa, concesionario Mercedes Benz en Valladolid, facilitarnos el coche para la prueba