Stellantis apuesta por la electrificación de Norteamérica y los minerales de Sudamérica

Stellantis, uno de los mayores fabricantes de automóviles a escala global y multinacional propietaria de más de una quincena de firmas de origen estadounidense francés, alemán e italiano, ha anunciado recientemente que la producción de su nuevo EDM (módulo de accionamiento eléctrico) se llevará a cabo en Kokomo, Indiana (EE.UU.). Para ello, habrá una dotación presupuestaria de 155 millones de dólares (unos 147 millones de euros al cambio de divisa). En paralelo, la compañía ha comunicado una inversión estratégica en una mina de cobre «sostenible» sita en Argentina.

El EDM de última generación de Stellantis proporcionará una solución integral para las cadenas cinemáticas de sus futuros vehículos eléctricos, ofreciendo mejor rendimiento y flexibilidad a un coste inferior. Las inversiones necesarias para la producción de este sistema se llevarán a cabo en las plantas Indiana Transmission, Kokomo Transmission y Kokomo Casting. Es un anuncio significativo para la región, ya que gracias a esta decisión se van a conservar 265 puestos de trabajo. Las inversiones en Indiana desde 2020 para apoyar los objetivos de electrificación aumentan a casi 3.300 millones de dólares. Aquí se incluye la “gigafactoría” que sirve de base para la alianza con Samsung SDI.

Esta noticia pone de relieve el interés de Stellantis por liderar la transición ecológica del sector automovilístico en Norteamérica, uno de sus principales mercados. También es un gran paso para la estrategia corporativa de una empresa que pretende alcanzar un 50% de ventas de vehículos 100% eléctricos en Estados Unidos para 2030. Este hito dará comiezo con el lanzamiento de los primeros vehículos RAM y Jeep totalmente eléctricos a partir de 2023 y 2024, respectivamente.

La elección de Kokomo como ubicación para la producción del nuevo EDM es un reflejo de la capacidad del estado de Indiana para atraer y mantener la inversión de la industria automotriz. La presencia de plantas de producción ya establecidas en la zona ha sido un factor determinante en la decisión. Dicho módulo para sistemas de propulsión eléctrica, si se combina con la batería adecuada, ayudará a cada plataforma a alcanzar autonomías de hasta 800 km por carga completa. Servirán para ensamblar decenas de modelos BEV diseñados sobre las modernas e innovadoras arquitecturas STLA Large y STLA Frame.

Pero no todo queda ahí. Stellantis ha confirmado otra inversión, también por valor de 155 millones de dólares, en McEwen Cooper, una sociedad canadiense que se encuentra inmersa en un proyecto de explotación “sostenible” de minas de cobre en Argentina (se hace llamar Los Azules). La compañía de coches se asegura así el abastecimiento de tal mineral (puro al 99,9%) para la producción de baterías entre 2027 y 2060. Prevé extraer cerca de 100.000 toneladas anuales. Estas potentes inyecciones económicas respaldan la ambición de Stellantis por lograr cero emisiones netas de CO2 para 2038, en la línea de su plan estratégico Dare Forward 2030.

Fuente – Stellantis