Stellantis y CATL invertirán 4.100 millones en una gigafactoría en Zaragoza

La alianza entre Stellantis y CATL ha dado un paso decisivo en la electrificación del sector del automóvil en España, con la confirmación de una inversión de 4.100 millones de euros para la construcción de una gigafactoría de baterías en Zaragoza. Este proyecto, que será desarrollado mediante una ‘joint venture’ al 50% entre ambas compañías, reafirma a España como un epicentro estratégico en la producción de tecnología vinculada a la movilidad sostenible.

La gigafactoría estará enfocada en la fabricación de baterías de litio y ferrofosfato (LFP), una tecnología que destaca por ser más asequible y duradera, aunque con menor densidad energética frente a otras opciones más costosas. Su ubicación estará estratégicamente integrada en las actuales instalaciones de Stellantis en Zaragoza, lo que permitirá sinergias para la producción de turismos, SUV y crossovers eléctricos de gama intermedia a precios competitivos.

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La planta, cuya producción está prevista para finales de 2026, tendrá una capacidad inicial que podría escalar hasta los 50 GWh, dependiendo de la evolución del mercado eléctrico en Europa y del apoyo de las autoridades locales y de la Unión Europea. Este es un paso clave para avanzar hacia una movilidad cero emisiones y reforzar la competitividad del sector automovilístico en España. A día de hoy, la fábrica de Zaragoza se convertirá en la mayor planta de baterías del país, por delante de otras iniciativas como la de Volkswagen en Sagunto.

La tecnología LFP es clave para reducir el coste de los vehículos eléctricos, lo que permitirá a Stellantis posicionarse en los segmentos B y C con modelos accesibles para un público más amplio. Este enfoque responde al plan estratégico Dare Forward 2030 de la compañía, que sitúa la sostenibilidad y la asequibilidad como pilares para consolidar su liderazgo en el sector.

Apoyo institucional y alianzas clave

El proyecto ha contado con un respaldo decidido por parte del Gobierno de España, que ha destinado cerca de 300 millones de euros en ayudas a Stellantis a través de diferentes convocatorias del PERTE del Vehículo Eléctrico y Conectado (PERTE VEC). La colaboración entre instituciones públicas y privadas ha sido determinante para asegurar que esta inversión histórica se materialice en territorio español.

Además, la reciente reunión entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el consejero delegado de CATL, Robin Zeng, ha sido clave para desbloquear los últimos flecos del acuerdo. En esta reunión, Sánchez subrayó la importancia de proyectos como este para consolidar la transición energética y la reindustrialización del sector automovilístico en España.

Impacto en la industria y el empleo

Esta inversión no solo asegura el futuro de la planta de Stellantis en Zaragoza, sino también el de otras fábricas del grupo en España, como las de Vigo y Madrid. En el caso de Zaragoza, la gigafactoría dinamizará tanto el empleo directo como el indirecto en la zona, asegurando la viabilidad de los planes industriales a largo plazo. Se estima que el impacto económico del proyecto será crucial para situar a España como líder en electromovilidad dentro de Europa.

En paralelo, el acuerdo también refuerza la cooperación tecnológica entre Stellantis y CATL, ofreciendo una oportunidad para desarrollar nuevas soluciones energéticas que podrían extenderse a otras regiones. Según ha destacado el presidente de CATL, Robin Zeng, «la asociación con Stellantis es un ejemplo de cómo nuestra tecnología puede contribuir a la transición hacia un futuro más sostenible».

Un futuro prometedor para la movilidad eléctrica

La construcción de esta gigafactoría llega en un momento crucial para el mercado europeo de vehículos eléctricos, que, aunque todavía enfrenta desafíos, muestra un crecimiento constante. La apuesta por una tecnología como la LFP, más asequible, responde a la necesidad de democratizar el acceso a los vehículos eléctricos, una pieza clave para alcanzar los objetivos de reducción de emisiones de carbono en el continente.

Este proyecto no solo consolida a Stellantis y CATL como líderes en innovación tecnológica, sino que también posiciona a España a la vanguardia de la transformación industrial hacia una movilidad más limpia y sostenible. La planta de Zaragoza será, sin duda, un antes y un después en el camino hacia una electrificación global.

Fuente – Stellantis

Imágenes | Stellantis