En los últimos años, Toyota ha apostado por recuperar su legado deportivo a través de modelos como el GR86, el GR Yaris y el Supra. Sin embargo, la continuidad de algunos de estos vehículos ha estado en duda debido a la necesidad de alianzas estratégicas para su desarrollo. Ahí es donde entra en juego una posible colaboración con Mazda, que podría definir el futuro del GR86 de próxima generación.
Según rumores provenientes de Japón, Toyota estaría considerando trabajar con Mazda en el desarrollo del GR86 de tercera generación, abandonando su histórica asociación con Subaru. Recordemos que el actual GR86 y su gemelo BRZ fueron fruto de una colaboración con la firma de las estrellas, pero esta vez, Toyota podría optar por otro socio con amplia experiencia en deportivos ligeros y ágiles.
¿Mazda aportará su experiencia en deportivos ligeros?
Diversas fuentes indican que ingenieros de Mazda podrían estar involucrados en el desarrollo del nuevo GR86, aportando su conocimiento en chasis y dinámica de conducción. Esta influencia podría hacer que el futuro coupé de Toyota adopte ciertas características del icónico Mazda MX-5, especialmente en términos de peso, agilidad y comportamiento dinámico. Si quieres conocer más sobre la colaboración entre Mazda y Toyota, puedes visitar este artículo sobre cómo Mazda se une a Toyota.
Otro aspecto clave de esta posible unión es la mecánica. El GR86 actual utiliza un motor bóxer de Subaru, pero si Toyota rompe esta alianza, el próximo modelo podría equipar un motor turbo de 3 o 4 cilindros. Entre las opciones posibles se encuentra el motor de 1.6 litros turbo del GR Yaris o alguno de los nuevos propulsores desarrollados conjuntamente por Toyota y Mazda.
Un GR86 con motor turbo, ¿adiós al bóxer?
Hasta ahora, el GR86 se ha caracterizado por su motor bóxer atmosférico, que proporciona una respuesta lineal y un sonido típico muy característico. Con todo, si Toyota decide trabajar con Mazda, podríamos ver un cambio significativo en la mecánica del modelo. Se habla de la posibilidad de un motor turbo con una potencia final de entre los 250 y 300 CV. Además, si buscas comparar la dinámica de conducción de distintos modelos, aquí tienes una comparativa entre Mazda y Toyota.
Además del motor, otros componentes del próximo GR86 podrían recibir una dosis de ADN de Mazda. Por ejemplo, el chasis y la suspensión podrían seguir los principios «livianos» del MX-5, buscando una experiencia de conducción más pura y enfocada en la diversión al volante. No obstante, Toyota insistiría en mantener la tracción trasera y la opción de una caja de cambios manual.
Un proyecto conjunto que podría ir más allá del GR86…
El alcance de esta asociación podría no limitarse únicamente al GR86. Se especula que Mazda también podría involucrarse en otros proyectos deportivos de Toyota, como el regreso del Celica y del icónico MR2. Esta sinergia permitiría compartir plataformas y motores entre varios modelos, reduciendo costes y asegurando una mayor diferenciación entre ellos.
Si bien estos rumores aún no han sido confirmados oficialmente por ninguna de las marcas, la posibilidad de ver un Toyota GR86 con la influencia de Mazda resulta muy interesante. La unión de la fiabilidad de Toyota con la experiencia de Mazda en la fabricación de deportivos ligeros promete un modelo con una identidad renovada y un carácter definido.
Queda por ver si la colaboración se materializa y cómo afectará al legado del GR86. Lo que sí está claro es que Toyota sigue apostando por los deportivos asequibles y de conducción emocionante, asegurando que la diversión al volante siga siendo una prioridad en su gama de modelos. Si estás interesado en los planes de electrificación, puedes consultar qué ha dicho Mazda sobre su intención de electrificar modelos.
Fuente – Carscoops
Imágenes | Toyota – Mazda