Según anticipa la corporación financiera Fitch Ratings, las ventas mundiales de automóviles están abocadas a experimentar su mayor descenso desde la crisis financiera de 2008. Un dato que se debe al descenso global, pero que tiene como mayor responsable a la desaceleración de China. El país asiático crece al ritmo más bajo de los últimos 30 años.
Dicha corporación ha analizado el progreso de las ventas globales junto con otros factores para anticipar los datos. Según publica la cadena CNBC, su informe señala que las ventas mundiales de automóviles disminuirán aproximadamente 3,1 millones en 2019. Lo que significa un descenso del 4% desde 2018, bajando desde los 80,6 millones hasta los 77,5 millones.
No solo la desaceleración China
La caída en la demanda de vehículos nuevos en China ha sido un factor clave para la disminución general de las ventas en el resto del mundo. En los primeros 10 meses de este año, las ventas cayeron un 11% en comparación con el mismo período del año pasado.
En los Estados Unidos las ventas también han caído en 2019, aunque no tanto. Los expertos de Fitch Ratings esperan una disminución del 2% hasta alcanzar los 16,9 millones de vehículos para el final del año. En India las unidades vendidas también han disminuido por sus problemas con el sector bancario.
Descenso de ventas en España
Según los datos publicados por la Asociación de Constructores Europeos de Automóviles, las ventas en Europa han caído un 1,6% entre enero y septiembre, respecto al mismo periodo de 2018. Sin embargo, España ha experimentado un descenso en las ventas mucho mayor con un 7,4% en lo que va de año.
El mercado de vehículos no ha sido el único afectado. Según el economista jefe del equipo que ha elaborado el informe, Brian Coulton, la industria en general también se ha visto afectada a nivel global: «La recesión en el mercado mundial de automóviles desde mediados de 2018 ha sido una fuerza clave detrás de la caída en la fabricación mundial y el panorama de las ventas de automóviles está resultando mucho peor de lo que esperábamos en mayo.»
Coulton también añadió que: «Estructuralmente, las inquietudes medioambientales sobre los automóviles diésel, las regulaciones anticipadas, el crecimiento de los programas de viajes compartidos y las plataformas de carsharing están afectando la demanda de automóviles».