Las siglas VTC significan Vehículo de Turismo con Conductor. Este término no define completamente las características de este tipo de transporte, el cual ha generado mucho debate debido a la competencia entre taxis y servicios como Uber y Cabify. Tradicionalmente, la licencia VTC se utilizaba para vehículos de lujo con chófer, como limusinas. Sin embargo, en la actualidad, estas licencias son usadas por empresas que ofrecen servicios a través de aplicaciones móviles para cualquier tipo de transporte urbano.
La administración define a los vehículos VTC como aquellos que tienen licencia para realizar transporte de viajeros bajo la modalidad de arrendamiento de vehículos con conductor. El término «arrendamiento» implica que el servicio debe ser contratado previamente, lo cual es una de las diferencias fundamentales con respecto a los taxis, que pueden ser tomados en cualquier momento y lugar mientras estén disponibles.
Las siglas VTC también se han interpretado como Vehículos de Transporte Concertado, lo cual enfatiza que el servicio debe ser acordado de antemano. A diferencia de los taxis, no es posible tomar un vehículo de Uber o Cabify directamente en la calle; el servicio debe ser solicitado con anticipación a través de una aplicación móvil.
Los VTC antes y ahora
Hace unos años, los mercados de los VTC y los taxis estaban claramente separados. Los VTC se limitaban a servicios de lujo, como traslados en limusina, y eran utilizados por quienes podían permitirse un transporte premium. Sin embargo, la aparición de plataformas como Uber y Cabify ha transformado este mercado, haciendo que los servicios VTC se asemejen mucho a los de los taxis, tanto en precio como en accesibilidad.
La introducción de un modelo de negocio basado en aplicaciones móviles ha permitido a las empresas de VTC reducir los costos, ofreciendo precios competitivos en comparación con los taxis. Además, los vehículos utilizados por estas plataformas suelen ser de una calidad similar a la de los taxis, y la facilidad de contratación a través del móvil hace que el servicio sea más accesible para los usuarios.
La licencia VTC
Las licencias VTC son gestionadas por las comunidades autónomas en España. Inicialmente, el costo de una licencia VTC rondaba los 5.000 euros, pero debido a la alta demanda y la restricción en la concesión de nuevas licencias, su precio en el mercado secundario ha aumentado significativamente, llegando hasta los 50.000 euros o más en algunas regiones.
En 2015, se estableció una normativa que limita el número de licencias VTC a una por cada 30 licencias de taxi. No obstante, esta proporción no se ha cumplido en la práctica. Por ejemplo, en Madrid, la proporción actual es de aproximadamente un VTC por cada cinco taxis. Para equilibrar esta situación, algunas comunidades autónomas, como Madrid, han dejado de emitir nuevas licencias VTC hasta que se alcance la proporción establecida por ley.
Requisitos para los vehículos con licencia VTC
Los vehículos utilizados para servicios VTC deben cumplir con ciertos requisitos específicos. Por ejemplo, en la Comunidad de Madrid:
- La antigüedad del vehículo no debe superar los 10 años desde su primera matriculación.
- Deben ser turismos, es decir, vehículos con capacidad para un máximo de 9 personas, incluido el conductor.
- El motor debe tener una potencia igual o superior a 12 caballos de vapor fiscales (CVF).
- La longitud mínima exterior del vehículo debe ser de 4,60 metros.
- Los vehículos que utilizan fuentes de energía alternativa no están sujetos a los requisitos de potencia y longitud.
- El permiso de circulación del vehículo debe indicar que su uso es para Alquiler con Conductor (ACC).
Diferencias clave entre VTC y taxis
Existen varias diferencias fundamentales entre los servicios VTC y los taxis. En primer lugar, los VTC requieren una contratación previa a través de aplicaciones móviles, mientras que los taxis pueden ser tomados directamente en la calle o en paradas específicas. Además, las tarifas de los taxis suelen calcularse al final del trayecto en función de la distancia recorrida y el tiempo, mientras que los precios de los VTC se fijan de antemano y se pagan a través de la aplicación.
Otra diferencia importante es el límite en la cantidad de licencias. Mientras que las licencias de taxi están limitadas a dos por persona, no existe un límite similar para las licencias VTC. Sin embargo, las tarifas de las licencias de taxi suelen ser más altas debido a la escasez y la alta demanda.
En términos de ingresos, los conductores de VTC a menudo ganan menos que los taxistas, especialmente después de descontar los gastos asociados con su actividad. Según diversas fuentes, los ingresos netos de los conductores de VTC pueden ser significativamente menores en comparación con los de los taxistas.
Regulación y futuro de los VTC en España
La regulación de los servicios VTC en España es un tema en constante evolución. En algunas regiones, como Cataluña, se han introducido normativas que requieren una precontratación con un tiempo mínimo de antelación para servicios VTC, lo que limita aún más su operación en comparación con los taxis. A medida que continúan las negociaciones y las discusiones entre los diferentes sectores, es probable que las regulaciones sobre los VTC sigan cambiando en el futuro.
Imágenes – Automobile Italia, Stock Catalog, Andreas Bloch