Ya han pasado algunas semanas desde que BMW presentara la versión más extrema jamás conocida de su mítica berlina de altas prestaciones, el M5. Por si andas un poco despistado, te aclaro la mente: hablamos del BMW M5 CS. Se trata de una versión especial que ya está disponible en los concesionarios.
Por supuesto, está basada en el restyling del Serie 5 de la firma bávara, tomando todas las actualizaciones. Pero BMW ha añadido todo su buen hacer en materia de deportividad extrema a su cómoda y lujosa berlina del segmento E. Más prestaciones del motor, puesta a punto más rígida y un tratado especial en todos los sentidos.
La compañía alemana dice que es uno de los BMW M más exclusivos de los últimos años, y la verdad es que no le falta razón. La filial deportiva de la marca automovilística ha llevado su motor V8 de 4.4 litros hasta los 635 CV. De este modo, se convierte en el modelo más potente jamás construido por la factoría.
Además, disfruta de una mayor ligereza, rebajando su peso en 70 kilos respecto al BMW M5 Competition. No han faltado ajustes en el chasis y en el control de la suspensión, retocando los cojinetes delanteros y traseros para dar esa mayor rigidez al conjunto.