Hyundai y Kia quieren facilitarle la vida a los propietarios de coches eléctricos del futuro. El grupo compuesto por ambas marcas coreanas ha desarrollado un sistema de carga inalámbrica para vehículos eléctricos. Pero en este caso no se trata de una simple plataforma como la presentada por BMW. En realidad es todo un sistema automatizado que aparca los coches por sí solo para luego recargarlos. El futuro planteado por la película “Yo robot” ya está cerca.
Los responsables del grupo explican esta tecnología mediante un vídeo en el que el protagonista es el concept Le Fil Rouge de Hyundai. Según ellos el sistema está ideado para solucionar dos problemas de una vez: la falta de espacio para aparcar y la falta de puntos de carga. Unas situaciones que probablemente se agravarán con el tiempo, dado el fuerte crecimiento de las ventas de eléctricos en los últimos años.
Cómo funciona el sistema de Hyundai-Kia
Lo que hace la tecnología de Hyundai y Kia es dirigir los vehículos de forma autónoma a una estación de carga inalámbrica vacía. El sistema también saca los coches ya cargados de las estaciones (también de forma autónoma), para dejar espacio a los que van entrando.
Tan pronto como se completa la carga por inducción magnética, el Sistema Automatizado de Valet Parking (AVPS) estaciona el vehículo en un lugar vacío. Cuando el conductor llama al vehículo a través de una aplicación de teléfono inteligente, regresará de forma autónoma a la ubicación del conductor.
Todo controlado con el móvil
Todo esto es posible gracias a la comunicación continua entre el coche eléctrico, las instalaciones de estacionamiento, el sistema de carga y el móvil del conductor. La instalación envía la ubicación de espacios de aparcamiento vacíos y estaciones de carga al usuario. Además manda el estado de la batería al usuario en tiempo real.
Hyundai-Kia planea lanzar esta tecnología en torno al año 2025 cuando los vehículos autónomos de Nivel 4 también sean más comunes. Tanto Hyundai como Kia también tienen pensado vender coches con cierto nivel de autoconducción para ciudades inteligentes desde 2021, antes de lanzar vehículos completamente autónomos en 2030.