La casa de la estrella entra en un nuevo segmento del mercado con el nuevo Mercedes GLA, el de los crossover compactos. Mercedes quiere repetir el éxito que están teniendo sus modelos más accesibles (A, CLA y B) y para ello presenta este SUV de 4.41 metros de longitud y 1.80 de anchura, que supera a la Clase A en altura por nueve centímetros (1.49).
Será el primer SUV de la marca en ofrecer el sistema de tracción 4Matic en opción. Los modelos más económicos serán de tracción delantera. Este nuevo Mercedes GLA debutará en septiembre en el Salón de Frankfurt, y se podrán realizar los primeros pedidos a partir del mes de noviembre, a pesar de que hasta primeros de 2014 no lo vayamos a ver por los concesionarios.
A las imágenes me remito para hablar del diseño del nuevo Mercedes GLA, con una imagen agresiva y joven que está funcionando muy bien en la gama baja de la marca. Para ser un crossover tiene una línea muy deportiva, conseguida gracias a que no es muy alto para su anchura, o al menos no da esa sensación en absoluto. Que la marca recurre al nuevo lenguaje de diseño estrenado por la Clase B es algo que queda patente en este GLA.
Cuatro motorizaciones y dos transmisiones
La gama inicial de motores del GLA se compone, en gasolina, de dos motores, un 1.6 y un 2.0 sobrealimentados de 156 y 211CV respectivamente en las versiones GLA 200 y GLA 250. La oferta diésel que complementará a los gasolina se compondrá del GLA 200 CDI de 136CV y el 220 CDI con 170CV, en ambos casos se recurre a un bloque de 2.2 litros. Todos ellos incorporan Stop&Start de serie.
El GLA 250 es el más rápido de todos, con un 0-100 de 7.1 segundos y una velocidad máxima de 235 kilómetros por hora. Su consumo medio homologado es de 7.1 litros, adecuado considerando las prestaciones. Si miramos al GLA desde el punto de vista de la eficiencia, será el 200 CDI el favorito, con un consumo medio de 4.3 litros a los 100 y 114 gramos de CO2 en cuanto a emisiones.
La gama del GLA ofrecerá dos cajas de cambios, una manual de seis velocidades o una automática de doble embrague de siete, que es la única disponible en los dos más potentes (gasolina y diésel) y en las variantes 4Matic, sistema de tracción opcional en cualquiera de las motorizaciones salvo la gasolina de acceso.El sistema de tracción 4Matic es inteligente y varía constantemente la entrega de par entre los dos ejes. La caja de transferencia está acoplada a la caja de cambios automática, y posibilita el envío de par a las ruedas traseras, a las cuales se distribuye a través de un diferencial multidisco de accionamiento electrohidráulico.
El Mercedes GLA recurre a una suspensión McPherson para el eje delantero y a una multilink para el posterior. La dirección asistida es electromecánica, reduciendo el consumo de combustible y ofreciendo la funcionalidad del contravolante automático gracias al modelo del ESP, así como el sistema de cambio involuntario de carril. Seguridad no faltará a bordo del GLA, ya que equipa de serie un sistema de frenada de emergencia por debajo de los 7km/h para evitar pequeños golpes en circulación urbana. Si queremos esta funcionalidad hasta los 30 kilómetros por hora, deberemos hacer un desembolso extra.
Un interior que resulta familiar
No hay sorpresas en el interior, puesto que es idéntico a modelos como el Clase A o el CLA, con cinco salidas de aire redondas con forma de turbina de avión y una consola central limpia en las versiones automáticas dado que la palanca va situada de forma muy práctica tras el volante. Desafortunadamente hereda de sus hermanos de gama esa tablet que los ingenieros añadieron apresuradamente antes de cerrar el proyecto, y que es un vivo ejemplo de un elemento mal integrado en un salpicadero con una línea realmente bonita a pesar de clásica. El Mercedes GLA cuenta con un maletero de 421 litros, que casi se duplica al abatir los respaldos de los asientos posteriores, que también pueden regularse en inclinación.
En el inminente Salón de Frankfurt conoceremos más detalles sobre este modelo relativos a precios, la completa gama de opcionales que ofrecerá y posibles nuevas motorizaciones de menor potencia. ¿Y un AMG?
Fuente: Mercedes
