Desarrollar y fabricar un coche es un proceso al que las marcas de coches están muy acostumbradas. Los pasos que han de seguir para ello, en gran parte, están estandarizados, pero dependiendo de la firma pueden variar. Otro factor que influye es el mercado donde vayan a comercializar el modelo en cuestión, pues han de seguir la legislación establecida. De ahí, que a veces se produzcan llamadas a revisión para subsanar ciertos problemas.
La última de la que hemos tenido conocimiento es cuanto menos curiosa. La National Highway Traffic Safety Administration (NHTSA) ha llamado al Rolls Royce Cullinan. El todo camino británico no es un producto precisamente barato y por ello, sorprende que tenga fallos, o problemas, de fabricación. Aún así, tampoco es un problema importante, más que a la hora de diseñas sus faros, al ingeniero se le olvidó seguir la ley.
Los Rolls Royce Cullinan afectados están en EEUU
Según la NHTSA, el Rolls Royce Cullinan que se vende en Estados Unidos no cumple con la normativa que regula los grupos ópticos y luces. Al parecer, la luz de freno trasera podría no cumplir totalmente con la FMVSS 108, Sección 7.3.13.1 y la Tabla IX. En resumidas cuentas:
«Existe una ligera probabilidad de que la percepción de una, o ambas, luces de freno no sea adecuada por los usuarios de la carretera que conduzcan detrás del vehículo afectado, lo que puede incrementar el riesgo de un choque«
El número de unidades afectadas por este problema de diseño es 403. En principio es una cifra baja pero, teniendo en cuenta la exclusividad del Cullinan, no es baladí. Por ahora, la NHTSA y Rolls Royce se están encargando de avisar a los clientes afectados. Éstos, tendrán que pasar por el servicio oficial más cercano, para que verifiquen los grupos ópticos traseros.
Por ahora, como hemos mencionado anteriormente, la llamada a revisión del Rolls Royce Cullinan se limita a Estados Unidos. Habrá que ver si hay unidades afectadas en Europa, aunque es improbable. En el Viejo Continente tenemos otra normativa respecto a los grupos ópticos y luces, por lo que quizá el problema esté en que las unidades destinadas al continente americano estén diseñadas según nuestros parámetros.
Fuente – National Highway Traffic Safety Administration (NHTSA)