Las expectativas en torno a Renault Group y su actividad industrial en España experimentan un salto cualitativo de cara a los próximos años. El fabricante francés tiene sobre la mesa un ambicioso plan para introducir nuevos modelos eléctricos en la fábrica de Palencia, según fuentes internas consultadas por medios del sector. Sus movimientos forman parte de la estrategia global de la marca para afianzar su posición en el segmento de vehículos cero emisiones y consolidar su apuesta industrial dentro del país.
El proyecto, conocido internamente como C-EV, gira en torno a la fabricación de hasta tres modelos eléctricos del segmento C en las instalaciones de Villamuriel de Cerrato. Las previsiones contemplan la llegada de la segunda generación del Scenic E-Tech –que en la actualidad se produce en Francia– así como variantes electrificadas de los modelos Austral y Rafale. Aunque aún no existe confirmación oficial sobre la versión eléctrica elegida para el tercer modelo, todo apunta a que finalmente será el Rafale, ya que el segmento de SUV familiares de siete plazas muestra síntomas de ralentización en la demanda.
La fabricación de eléctricos, en el horizonte de 2027…
Fuentes del sector sitúan el arranque de producción del Scenic E-Tech en Palencia para finales de 2027 o primeros de 2028. El Austral eléctrico iniciaría su ensamblaje con una diferencia de entre tres y seis meses respecto al Scenic, seguido después por el Rafale cero emisiones en un plazo similar. Sus llegadas permitirían a la fábrica alcanzar unos volúmenes anuales superiores a las 220.000 unidades.
Esto implicaría mantener dos turnos de trabajo completos y un tercero nocturno reducido, según las capacidades que actualmente se han estimado para la fábrica. En la actualidad, la factoría opera con dos turnos (uno plenamente saturado y otro que funciona parcialmente), y se prevé que esta configuración se mantenga al menos hasta la llegada de los nuevos eléctricos.
Coexistencia temporal de modelos híbridos y eléctricos…
Uno de los aspectos más relevantes del nuevo plan industrial es que los modelos eléctricos convivirán durante unos dos años con la gama híbrida actual, formada por el Austral, el Espace y el Rafale. La llegada de los vehículos cero emisiones supone una modificación respecto a las previsiones de Renault en el pasado año, que pasaba por introducir un SUV eléctrico sustituto del Austral a partir de 2028.
Para entonces, todos los SUV de la línea palentina habrán recibido una actualización estética, mientras que el Rafale, lanzado poco más tarde, afrontará ese restyling algo más adelante. Además, tanto Austral como Rafale experimentarán una revisión de sus motorizaciones en 2026, preparando así la transición hacia una cartera de productos donde la electrificación tomará mayor protagonismo.
Producción gradual y apoyo institucional…
El desarrollo de esta nueva gama eléctrica estará respaldado por ayudas públicas, ya que el proyecto C-EV ha obtenido fondos del Perte VEC 2, con una subvención que supera los 53 millones de euros y financiación adicional cercana a 13 millones. Aunque las fuentes apuntan a que el aumento de la producción será progresivo, se prevé que el Scenic llegue a representar un tercio de los volúmenes actuales del Austral.
Hoy día, el Austral es el modelo líder en fabricación con cerca de 2.000 unidades semanales, mientras que el Espace y el Rafale presentan cifras de 600 y hasta 800 unidades respectivamente.
El futuro eléctrico de la planta de Valladolid…
La electrificación avanza también en la factoría vallisoletana, que podría iniciar la adaptación hacia la fabricación de este tipo de vehículos ya en la próxima década. Aunque Renault decidió el año pasado posponer algunas inversiones previstas y rechazar ciertas ayudas públicas del Perte VEC relacionadas con la producción de eléctricos y baterías, desde la compañía aseguran que la inversión no se cancela, sino que se replantea, confiando en que pueda retomarse en futuras convocatorias.
El Ministerio de Industria ha anunciado la próxima apertura de nuevas líneas de apoyo, lo que podría facilitar el impulso definitivo para la conversión de Valladolid en un polo estratégico dentro de la red industrial española de Renault. Por su parte el fabricante galo proyecta un proceso de renovación en su oferta y capacidad productiva en España, apostando de manera decidida por la electrificación pero sin abandonar los modelos híbridos que hoy por hoy siguen ocupando un papel relevante en el mercado y en sus líneas de ensamblaje.
Fuente – L´argus
Imágenes | Renault