Cuando un fabricante desarrolla un modelo espera conseguir el máximo número posible de ventas. Los teóricos más «listos» dicen que superando las 100 mil unidades anuales se puede amortizar la inversión. Sin embargo no todos los modelos y segmentos pueden medirse por el mismo rasero. Hay marcas que con un puñado de unidades hacen caja y otras que necesitan varios cientos de miles para empezar a recuperar algo del dinero que pusieron en su desarrollo.
Pues bien, esta historia de rentabilidad y ventas es la misma que podría aplicarse al mítico Nissan Juke-R. ¿Recuerdas cuando la casa nipona puso a la venta esta bestia parda? Fue hace ya algunos años y las cosas como son, daba más miedo que seguridad. Sin embargo, con su muerte y desaparición dejó huérfanos a un sin fin de clientes de la firma. Sin embargo ¿Qué te parecería si volviese a la vida aprovechando la generación que se vende ahora? Ojito…
El Nissan Juke-R, por mucho que quieras, no verá la luz ni ahora ni en unos años…
De entrada te diremos que no hay posibilidades de que un nuevo Nissan Juke-R vea la luz. La razón básica que hay tras esta mala noticia es muy simple: la casa nipona será eléctrica en unos años y necesitan su dinero para el desarrollo de esta gama. Además, este tipo de vehículos de nicho no son rentables. Sí, porque aquellos que suspiran por ellos no los pueden pagar y los pocos que sí, pasan y se van a marcas premium aunque sean menos excitantes.
Sin embargo, que la realidad sea dura no ha impedido que el equipo de Kolesa se haya marcado este par de renders. Gracias a ellos podemos imaginar cómo sería el diseño de este hipotético Juke-R. S. Sobre todo en el frontal y zaga, que son las zonas que aglutina el mayor número de cambios que ha introducido este creador. Por ejemplo, los paragolpes, tomas de aire, alerones, salidas de escape, difusores o las taloneras y llantas de aleación más deportivas.