Las suscripciones a servicios están a la orden del día. Seguro que más de uno habréis oído la expresión «el Netflix de (añada servicio multimedia)». Tanto los videojuegos, como la música, hasta los deportes…y ahora también esta tendencia ha llegado a los automóviles.
BMW ha sido el primer fabricante en hacer de Apple Car Play un servicio de suscripción. En mi opinión, me extrañaría que vaya a ser el único. Esta estrategia sólo afecta a los usuarios de iPhone, los cuales tendrán que pagar una cuota anual de 95 euros.
Eso sí, quienes quieran contar con este servicio hasta el final de la vida útil de su vehículo, tendrán que desembolsar 329 euros. Por otro lado, la compañía alemana no dispone de Android Auto, por lo que no quedará otra que pasar por caja si quieres conectar tu teléfono, en este caso un iPhone, a tu BMW. Este movimiento por parte de BMW se implementa con la actualización de su sistema operativo a la versión 7.0.
El sistema operativo de Apple para los vehículos ofrece numerosos servicios, como la navegación o aplicaciones como Spotify, al alcance del usuario sin necesidad de utilizar su teléfono móvil mientras conduce, una conducta que tristemente se puede ver cada vez más a menudo por nuestras carreteras.
La decisión de la empresa alemana sorprende a más de uno, y es que mientras un usuario de un coche generalista, pongamos un Peugeot 3008, podrá contar con ambos sistemas operativos sin pagar un precio extra al valor del coche, un usuario que decida poseer un BMW, deberá pagar para contar con este tipo de innovaciones. Eso sí, siempre que disponga de un iPhone.
¿Qué os parece esta estrategia de BMW? ¿Pensáis que los fabricantes de vehículos premium seguirán esta tendencia? Y tú, ¿pagarías por disponer de un software que es gratis en otros vehículos? Déjanos tu opinión en los comentarios.