La historia de Aston Martin es una de las más convulsas del sector del automóvil. A lo largo de todos los años que lleva en activo ha pasado por mil y una vicisitudes incluso estar al borde de la quiebra por varias veces. Pero parece que, cuál Ave Fénix, renace para seguir ofreciendo a sus fieles modelos de altas prestaciones y diseño que está entre lo más granado del sector. Hoy día triunfa con el DB11 pero ¿Qué podemos decir del Aston Martin DB5?
El DB5 es uno de los modelos más icónicos de la casa de Gaydon. Quizá lo has olvidado pero se trata de un mito para los cinéfilos pues fue el primer modelo de la firma en aparecer en la saga de películas de James Bond. Fue en el año 1964 cuando de la mano de Sean Connery formó parte del elenco principal de Goldfinger cautivando a todo aficionado de Bond. Y así es como hemos llegado hasta hoy que, sorpresa, está celebrando sus 60 años de vida.
A pesar de sus 60 años, el diseño del mítico Aston Martin DB5 es una obra de arte…
Para refrescarte la memoria te contaremos algunas de las curiosidades del mítico DB5. Nació en 1963 como una evolución del DB4 que estuvo en producción entre los años 1958 y 1963. Su diseño, espectacular, corrió a cargo de los expertos del carrocero italiano Carrozzeria Touring Superleggera iniciando así una fructífera asociación que llega hasta nuestros días. Ellos fueron los que crearon su bella carrocería de Gran Turismo (GT) de estilo atemporal.
Otra curiosidad tiene que ver con su nombre. Las siglas DB corresponden al nombre de David Brown quien tomó las riendas de la marca en el año 1947 comprándola (junto a Lagonda) para rescatarla de la grave crisis que casi la hunde. Respecto a su técnica, bajo su piel había un motor 4.0 litros de seis cilindros en línea (evolución del 3.7 litros del DB4) con 282 CV de potencia. Con él, firmaba una velocidad máxima de 241 kilómetros por hora.