La electrificación del sector del automóvil parece avanzar a buen ritmo. Todas las marcas trabajan para dar forma a sus respectivas tecnologías y todas tienen un punto en común: están buscando que sean asequibles a sus clientes. Sin embargo, cada fabricante está «tirando por su camino» y quizá lo ideal sería buscar un estándar que una y sea más sencillo para, al final, bajar los costes productivos. Y Citroën ha decidido ser una de las pioneras…
Sí, porque la casa gala se ha marcado un objetivo ambicioso: poner en el mercado eléctricos asequibles. Así es que sus responsables están dándole vueltas al tema y habrían llegado a la siguiente conclusión. Bajarán en la gama al «estilo Dacia sin convertirse en Dacia» para ofrecer una competitiva gama de vehículos eléctricos. Y tal como recogen algunas fuentes el primero que verá la luz es el C3 de cuarta iteración con el ë-C3 más el nuevo C3 AirCross.
El nuevo Citroën C3 y su hermano eléctrico ë-C3 BEV debutarán a finales de 2023 y se basarán en el OLI (all-ë)…
Si haces un poco de memoria recordarás que hace nada presentaron al mundo el OLI (all-ë) Concept. Con él mostraban cómo podría ser un hipotético modelo de corte urbano con tintes de crossover y eléctrico. Pues bien, para dar continuidad a este proyecto Citroën presentaría la cuarta generación del C3 antes de que 2023 toque a su fin. Junto a él llegaría una versión cien por cien eléctrica que se llamará ë-C3 con un objetivo muy ambicioso…
Según varias fuentes, entre las que está L´argus, este ë-C3 debería tener un precio de venta final en torno a 25 mil euros. Esta cifra es la misma que se han marcado Volkswagen y otras marcas para sus urbanos a pilas. Pero hay más, pues todo apunta a que el ë-C3 eléctrico se fabricará en Kragujevac (Serbia) por lo que sería un paso al frente importante. Fabricación europea y un precio «cuasi» de derribo que no obligaría a traerlo desde China.
Por su parte, el C3 térmico (CC21) se montará en la fábrica que Citroën tiene en Trnava (Eslovaquia). Y el centro elegido no es casual, pues el sucesor del C3 AirCross (CC24) también saldría de estas instalaciones. Además lo haría con otra versión cien por cien eléctrica, pero no estarían listos hasta el primer semestre de 2024. Todos ellos tendrían en común formar parte del proyecto «Smart Car» que habría simplificado la plataforma CMP de PSA.
Respecto a la técnica del tren motriz, sería más sencillo que la de los actuales eléctricos de Citroën. Así, la batería del modelo de acceso sería de tipo litio-hierro-fosfato (LFP) con 40 kWh de capacidad energética para alimentar unos 82 CV de potencia. Las versiones más completas tendrían una batería de níquel-manganeso-cobalto (NMC) con 50 kWh de capacidad para alimentar un motor eléctrico de sólo 109 CV de potencia.
Con todo, el final de 2023 y 2024 están cada vez más cerca y con ello que conozcamos todos los planes que Citroën nos tiene preparados… Y los C3 y ë-C3 BEV llamarán mucho la atención… Al tiempo…
Fuente – L´argus
