
El Porsche 911 GT3 90 F. A. Porsche nace como una de esas ediciones especiales llamadas a convertirse en pieza de museo desde el primer día. No se trata solo de una versión más del 911, sino de un proyecto cuidadosamente planteado para celebrar el 90 aniversario del nacimiento de Ferdinand Alexander Porsche, el creador del 911 original y fundador de Porsche Design. La marca de Stuttgart ha recurrido a su programa de personalización más exclusivo, Sonderwunsch, para dar forma a un GT3 con un marcado componente emocional.
Esta serie limitada toma como punto de partida el 911 GT3 con paquete Touring y se ha desarrollado en estrecha colaboración con la familia del diseñador, especialmente con su hijo menor, Mark Porsche. El resultado es un deportivo que combina prestaciones puras con un lenguaje de diseño lleno de referencias personales a la vida y al estilo de F. A. Porsche, desde el color de la carrocería hasta el patrón del tapizado interior, pasando por un reloj de pulsera creado ex profeso para la ocasión.
Un GT3 muy especial: solo 90 unidades y enfoque de coleccionista

Porsche ha decidido limitar la producción de este modelo a 90 coches en todo el mundo, en honor a los 90 años que habría cumplido Ferdinand Alexander el 11 de diciembre de 2025. De esas unidades, una está reservada para Mark Porsche, mientras que las otras 89 se asignarán a clientes de distintos mercados, entre ellos España. La fabricación se realizará bajo pedido a través de Porsche Sonderwunsch, lo que permite a los compradores ajustar algunos elementos a su gusto dentro del marco de esta edición.
El calendario también está definido: el libro de pedidos se abrirá en abril de 2026 y la producción arrancará en la segunda mitad de ese mismo año, cuando las configuraciones definitivas estén cerradas. En el caso del mercado español, el precio se ha fijado en 408.806 euros, una cifra que sitúa al 911 GT3 90 F. A. Porsche claramente en la órbita de los coleccionistas y clientes más fieles de la marca.
Inspiración en el 911 de la serie G de los años 80

El hilo conductor de este proyecto es el 911 de la serie G que F. A. Porsche condujo en la década de 1980. Tanto el exterior como el interior del GT3 conmemorativo se inspiran en aquel coche personal, reinterpretando sus claves estéticas con un lenguaje actual. Mark Porsche ha explicado que muchos de los detalles elegidos son recuerdos directos de su padre, desde el color de la carrocería hasta el tejido de las chaquetas que solía llevar en casa.
La base técnica es el 911 GT3 con paquete Touring, es decir, la variante más discreta dentro de la gama GT3 al renunciar al alerón fijo por un alerón trasero extensible. Esto le otorga un aire más sobrio, cercano al de un 911 de uso diario, pero sin renunciar a la contundencia mecánica del modelo, algo que encaja bien con la filosofía funcional que defendía Ferdinand Alexander Porsche en sus diseños.
Verde F. A. metalizado: un color con historia propia

Uno de los elementos que más llama la atención es el tono exclusivo de carrocería Verde F. A. metalizado. Esta pintura no es un simple color de catálogo, sino un desarrollo específico llevado a cabo por el equipo de Paint to Sample Plus junto a la familia Porsche, tomando como referencia el histórico Oak Green Metallic del 911 personal de F. A. en los años 80. La idea era actualizar aquel verde, manteniendo su espíritu pero adaptándolo a los estándares actuales.
Con este modelo se introduce además una nueva identificación para las pinturas especiales: a partir de 2026, los Porsche configurados con Paint to Sample o Paint to Sample Plus llevarán una pequeña placa distintiva en el pilar A. El 911 GT3 90 F. A. Porsche es el primer coche que estrena esta etiqueta, lo que le añade otro matiz de exclusividad dentro del ya selecto entorno de la personalización de fábrica.
Llantas Sport Classic e insignias de aniversario

Más allá del color, el exterior incorpora varios guiños a la tradición de la marca. El coche monta llantas Sport Classic acabadas en negro satinado brillante, inspiradas en las míticas llantas Fuchs que marcaron la estética de muchas generaciones del 911. Estas llantas integran tuerca central y el histórico escudo de Porsche de 1963, un emblema que también aparece en otros puntos del vehículo, como el capó o el volante.
En la parte posterior, sobre la rejilla de la tapa del compartimento trasero, se ha colocado una insignia galvanizada y chapada en oro con el logotipo “90 F. A. Porsche”. Este emblema deja claro de un vistazo que no se trata de un GT3 convencional, sino de una edición conmemorativa muy acotada. Dependiendo de las imágenes facilitadas por la marca, también se han visto detalles gráficos como el número 72 en los laterales, referencia al año 1972 en el que se fundó Porsche Design, aunque la configuración final podrá variar según el cliente.
Interior: cuero marrón Truffle y tejido F. A. Grid-Weave
Si el exterior es diferenciado, el habitáculo es donde realmente se concentra la carga simbólica del proyecto. La tapicería combina cuero Club en color marrón Truffle con costuras decorativas en tono beige Chalk, creando una atmósfera cálida y clásica. La gran seña de identidad es, sin embargo, el tejido F. A. Grid-Weave, desarrollado específicamente para esta edición.
Este tejido especial se utiliza en las secciones centrales de los asientos, en la guantera, en la bolsa de viaje a juego y en la alfombrilla reversible del maletero delantero. El patrón mezcla cinco colores distintos —hilos negros, verdes, marrón Truffle, crema y rojo Bordeaux— y está inspirado directamente en el estampado de las chaquetas favoritas de F. A. Porsche. Para su hijo Mark, ese diseño textil está íntimamente ligado a la imagen que guarda de la oficina doméstica de su padre, con su lápiz, su pipa y su cenicero.
Detalles artesanales y placas «One of 90»

La atención al detalle continúa en elementos puntuales del interior. El pomo de la palanca de cambios está realizado en madera de nogal de poro abierto y lleva incrustada una pequeña placa con la firma grabada de F. A. Porsche. Se trata de un guiño directo a los materiales nobles que el diseñador valoraba, aplicado a una zona de contacto permanente para el conductor.
Cada unidad está identificada como pieza de colección mediante una placa chapada en oro situada en el salpicadero, donde figura la silueta del 911 original, la reproducción de la firma de Ferdinand Alexander y la inscripción “One of 90”. El compartimento portaobjetos de la consola central también incorpora un grabado que reproduce el motivo del emblema exterior del 90 aniversario, reforzando la coherencia entre el diseño exterior e interior.
Motor bóxer atmosférico de 510 CV y carácter purista

Bajo la piel, el 911 GT3 90 F. A. Porsche mantiene intacta la mecánica de la versión Touring. El protagonista es el motor bóxer atmosférico de seis cilindros y 4,0 litros, un propulsor de altas vueltas que desarrolla 510 CV de potencia y 450 Nm de par máximo. Esta configuración proporciona unas prestaciones al nivel de cualquier GT3 moderno, con una banda sonora y una respuesta que encajan con la idea de deportivo analógico que tantas veces se asocia al 911.
En función de la configuración elegida, el modelo puede equipar cambio manual de seis relaciones o transmisión automática PDK, aunque el enfoque general del paquete Touring, sin grandes aditamentos aerodinámicos fijos, apunta a un uso más centrado en la conducción pura que en el cronómetro. En cualquier caso, la parte técnica no se ha alterado de forma radical; la edición conmemorativa busca diferenciarse sobre todo por su lenguaje estético y su carga simbólica, más que por cambios mecánicos específicos.
Chronograph 1 exclusivo: del salpicadero a la muñeca
El vínculo entre automóvil y relojería es otro de los pilares de esta edición. En el salpicadero, sobre el panel de instrumentos, encontramos el reloj Sport Chrono con un diseño inspirado en el Chronograph I original que Porsche Design creó como pieza única para F. A. Porsche. La estética recuerda a los cuadros de instrumentos del 911 clásico: esfera negra mate, índices claros y excelente legibilidad en todo tipo de condiciones.

Cada comprador del 911 GT3 90 F. A. Porsche recibe además un Chronograph 1 de Porsche Design fabricado en exclusiva para esta serie. Este reloj de pulsera retoma el diseño del Chronograph 1 – 1972 Limited Edition, pero añade detalles específicos: un material luminiscente Super-LumiNova con efecto pátina que evoca el envejecimiento del radio o el tritio, el histórico logotipo de Porsche Design en la corona y el cierre, y las iniciales de F. A. Porsche en la ventana de día y fecha, en el lugar donde normalmente se sitúa el logotipo de la firma.
El movimiento automático incorpora un rotor cuyo diseño y color replican las llantas del vehículo, y el fondo de la caja, también en negro, lleva grabados con láser la firma del diseñador y el número de edición limitada (XX/90). La caja está realizada en titanio ultraligero e hipoalergénico, pintado en negro como el modelo de 1972. Se entrega con una correa metálica y una segunda correa de cuero cuyo material y costuras coinciden con los del interior del coche, y gracias a un sistema de cambio rápido pueden intercambiarse sin herramientas. Como es habitual en Porsche Design, el reloj cuenta con certificación COSC, que acredita su precisión cronométrica.
Bolsa de fin de semana a juego y cuidado por los accesorios
El paquete de la edición no se limita al coche y al reloj. Porsche ha desarrollado una bolsa de viaje específica pensada para escapadas de fin de semana, que reproduce fielmente la selección de materiales del habitáculo. El exterior está confeccionado en cuero marrón Truffle, con costuras en beige Chalk, y en el bolsillo frontal se emplea el mismo tejido F. A. Grid-Weave que se ve en los asientos.
El compartimento principal de la bolsa está forrado en microfibra de alta calidad para proteger el contenido, mientras que en el exterior se borda una insignia con el logotipo del aniversario, en línea con el emblema dorado que aparece en la rejilla trasera del coche. Es un detalle más que refuerza la idea de conjunto: vehículo, reloj y equipaje forman un pequeño ecosistema coherente alrededor del legado de Ferdinand Alexander Porsche.
Ferdinand Alexander Porsche y el origen de Porsche Design
Para entender la profundidad de este homenaje hay que mirar atrás. Ferdinand Alexander Porsche nació en 1935 y creció inmerso en el entorno técnico y creativo de la familia. Pasó buena parte de su juventud en la finca de Schüttgut, en Zell am See, y pronto desarrolló una inclinación natural hacia el diseño. Tras un breve paso por la Escuela de Diseño de Ulm, comenzó a trabajar en 1957 como becario en el departamento de modelado de Porsche.

Bajo su dirección se gestaron algunos de los proyectos más importantes de la marca, como el Porsche 901/911, el monoplaza de Fórmula 1 804 o el 904 Carrera GTS. En 1972, tras la salida de la familia del negocio operativo de Porsche KG, F. A. y su hermano Hans-Peter fundaron Porsche Design, un estudio que trasladó los principios del diseño funcional del automóvil a productos como relojes, gafas, encendedores, pipas o instrumentos de escritura. Aquellas creaciones se convirtieron en clásicos del diseño moderno y consolidaron su figura como referente internacional hasta su fallecimiento en 2012.
Con el 911 GT3 90 F. A. Porsche, la firma de Stuttgart condensa esa trayectoria en un coche que combina rendimiento de alto nivel, una estética fuertemente ligada a la historia de la marca y múltiples referencias personales al diseñador que definió la silueta del 911. No es simplemente un GT3 más caro o mejor equipado, sino un proyecto pensado para quienes valoran tanto la conducción como el relato que hay detrás de cada línea, textura y detalle.
Imágenes | Porsche

