Durante buena parte de su historia, los modelos de Porsche han estado totalmente ligados a los motores atmosféricos. Poco a poco esto ha ido cambiando, encontrando muchísimas versiones sobrealimentadas en los últimos años, incluso en los pequeños Boxster y Cayman, así como en el 911.
Sin embargo, en la marca siguen queriendo mantener algunas versiones de admisión atmosférica. Son pocos los modelos atmosféricos que le quedan a la firma alemana, pero ahí aguantan los 718 Cayman GT4 y el 718 Spyder, así como los GTS 4.0. Esperamos que los próximos GT2 y GT3 del 911 (992) también sean atmosféricos. Pese a ello, dicen desde Stuttgart, que la intención es seguir explotando estas mecánicas tan puras, pero tal vez de una forma diferente. Os cuento.
Con las nuevas normativas de anticontaminación y el mayor peso de los vehículos, los motores de admisión forzada son más lógicos. ¿Por qué? Porque en teoría son menos contaminantes y porque ofrecen una mejor respuesta a bajas y medias revoluciones, moviendo al coche con una mayor soltura. Pese a ello, no tienen el mismo “picante” a la hora de ser conducidos.
Parece ser que una alternativa que barajan en Porsche es la hibridación de algunas mecánicas. No han comentado si se trataría de híbridos convencionales, híbridos enchufables o bien motorizaciones micro híbridas. La lógica nos hace pensar que esta última opción, la microhibridación, es la más sensata cuando se habla de modelos deportivos.
Porsche afirma estar muy motivada en mantener con vida las mecánicas atmosféricas y aclara que “el par motor eléctrico a bajas revoluciones y un motor atmosférico de altas revoluciones podría encajar perfectamente. Podría ayudar a sobrevivir a un motor de aspiración natural”. La parte negativa de las mecánicas hibridadas es que incrementan el peso del conjunto. Eso sí, considerablemente menos en un mild hybrid que en un híbrido enchufable.
Cuando se habla de deportividad, de altas prestaciones y de rendimiento, cada kilo de más influye negativamente. Es por ello que tal vez Porsche opte en algún momento por instalar estas mecánicas mild hybrid si realmente ven rentabilidad en mantener en el mercado propulsores atmosféricos. Lógicamente, el apoyo del motor eléctrico no es muy grande, pero puede ser que sea lo justo para solventar esa carencia natural de los propulsores sin sobrealimentación. Veremos…
Fuente – Autocar