Mini podría estar preparando un cambio radical para su icónico modelo Cooper. Según rumores recientes, la firma británica bajo el paraguas de BMW Gruop estaría considerando abandonar la tracción delantera, característica de los Mini modernos, en favor de una configuración de propulsión trasera. Esta posible transformación supondría un regreso a una arquitectura que ofrecería un comportamiento dinámico diferente y más purista.
Si somos justos, a lo largo de la historia de Mini, ninguno de sus modelos ha tenido propulsión trasera. De hecho fue la tracción delantera la razón de que Sir Alec Issigonis desarrollara el primer Mini de la historia. En cambio la tracción al eje posterior sí es una seña de identidad de BMW que, al ser matriz de la inglesa, impondría su idea pues al desarrollar la nueva plataforma obligaría a usarla para reducir costes. Toma nota de qué podría pasar…
Un cambio impulsado por la plataforma de BMW…
Los rumores sobre el cambio de orientación provienen de la posibilidad de que el próximo Mini Cooper adopte la plataforma Neue Klasse de BMW, una arquitectura modular que permitirá opciones de tracción trasera y de tracción total. Si bien Mini siempre ha sido conocido por su tracción delantera y su carácter ágil, un cambio a la propulsión trasera podría darle un enfoque más deportivo y exclusivo dentro de la gama.
La marca ya ha experimentado con variaciones en su configuración mecánica en ediciones limitadas de modelos que desarrolló en el pasado. Pero si este cambio se materializa, sería una de las modificaciones más significativas en la historia reciente de Mini.
Mayor diferenciación dentro de la gama Mini…
Uno de los objetivos de esta posible transición sería ofrecer un producto más diferenciado dentro de la familia Mini. Hoy día, todos los modelos de la marca comparten tracción delantera o total, por lo que un Mini Cooper de propulsión trasera podría convertirse en un vehículo más atractivo para los amantes de la conducción deportiva.
Además, la adopción de la plataforma Neue Klasse también brindaría posibilidades en cuanto a electrificación, otro punto clave en el desarrollo futuro de la gama Mini. Aunque aún no está claro si este supuesto Mini Cooper de tracción trasera sería exclusivamente eléctrico, híbrido o con un motor de combustión interna, la flexibilidad de la plataforma de BMW permitiría diferentes configuraciones.
¿Cuándo podríamos ver este nuevo Mini Cooper?
Por ahora, no hay confirmación oficial por parte de Mini o BMW respecto a este cambio. Sin embargo, los rumores sugieren que este proyecto podría estar en desarrollo y que en pocos años podríamos ver un adelanto de lo que va a ser el futuro Mini Cooper. Si al final la tracción trasera se convierte en una realidad para el Mini Cooper, marcaría un hito importante en la evolución de la marca y una posible vuelta a un estilo de conducción más deportivo.
Por ahora, solo queda esperar a que Mini confirme sus planes y ver cómo se posiciona este modelo dentro de su estrategia de electrificación y evolución tecnológica.
Fuente – BMW Blog
Imágenes | Mini