Tres décadas parece mucho tiempo pero no lo es. Sino que se lo digan al Subaru Impreza que vio la luz allá por el año 1992 en el Salón del Automóvil de Los Ángeles. En estos treinta años la evolución del automóvil no ha cesado pero el compacto nipón sigue fiel a su esencia más pura. Y precisamente ser fiel a su herencia le ha permitido ser un icono en prácticamente todos los mercados en los que ha estado y está a la venta. Y no morirá…
Sí, porque la firma nipona acaba de presentar en la presente edición del Salón de Los Ángeles a la sexta entrega. Pero esta vez parece que público y crítica no están convencidos a partes iguales. Sobre todo porque esta evolución no se ve como tal, sino más bien como un profundo restyling del que vendían hasta ahora. Con todo, hay cambios y se aprecian a simple vista, aunque para entender la personalidad del Subaru Impreza hay que conocerlo muy bien. ¿No?
Se confirma: la estética del renovado Subaru Impreza sigue los pasos del Crosstrek…
Como puedes ver en las imágenes y vídeo adjunto, la fisonomía del nuevo Subaru Impreza cambia. Pero no lo hace en un giro radical, sino más bien continuista siguiendo los pasos de su hermano SUV Crosstrek. De hecho, si nos fijamos bien, podríamos decir que se trata del mismo coche pero sin los aditamentos off road. Con todo elementos como las ópticas más rasgadas, la parrilla hexagonal más grande y los paragolpes cambian por completo.
Tampoco podemos obviar que la zaga experimenta más cambios que el frontal. Sobre todo porque las ópticas si son nuevas, el paragolpes luce líneas más agresivas y el difusor está más marcado. Además la salida de escape está a la vista y no oculta como en la gran mayoría de los modelos actuales. Con todo, si estos cambios te parecen que no están a la altura, la marca ha diseñado los acabados Sport y RS con los que darle un toque más exclusivo.
La terminación Sport (azul en las imágenes) es la intermedia pero la que se llevará el protagonismo es la RS. Además vuelve a la alineación comercial tras varios años ausente. Para dotarla de mayor exclusividad incluye aditamentos en color gris oscuro y negro en coquillas de los retrovisores o paragolpes. Tampoco faltan unas llantas de aleación con 18 pulgadas de tamaño, ópticas LED o un interior específico con decoración en tela negra y roja.
La carrocería sedán de 4 puertas desaparece de la gama, incluso en EEUU…
Como dato comercial a tener en cuenta, a menos en Estados Unidos, la sexta iteración del Impreza deja atrás a la carrocería sedán de cuatro puertas. Por ahora no sabemos si llegará en una segunda fase comercial, pero de inicio el cliente medio no podrá adquirirla. En Europa no la «echaremos» de menos pues desde hace un tiempo no se vende y no parece que vaya a hacerlo en un futuro próximo. En todo caso, habrá que esperar a su debut europeo…
Interior renovado «a medias» con más tecnología y seguridad…
De puertas adentro la evolución del Subaru Impreza es notable, aunque según el acabado elegido. La gama parte de tres niveles que se llaman: Base, Sport y RS. El esquema de diseño es similar en los tres aunque en el primero el display táctil central de 11,6 pulgadas cambia por dos de 7 pulgadas. El primero se ubica en la zona alta del salpicadero y el segundo en la zona intermedia. El resto de elementos no varía en exceso, salvo excepción…
Sí, porque el diseño y ubicación de los controles del climatizador cambian o por ejemplo las salidas de ventilación. El dato que aún desconocemos es el de la capacidad del maletero, pero debería ser similar al de su antecesor. Donde no escatima es en seguridad ya que incluye la última evolución del sistema EyeSight Driver Assist. Ahora identifica a bicicletas y peatones antes en las intersecciones y también incluye recordatorio para el asiento trasero.
Técnica conocida, fiable y del gusto del cliente yanqui… en la que no faltan los motores bóxer…
Como era de esperar, el nuevo Subaru Impreza se asienta sobre la última evolución de la Subaru Global Platform. Es una base muy versátil y sólida, destacando por una mejora en la rigidez torsional del 10%. Con todo su gama para Estados Unidos se reduce a dos versiones que recurren al ya mítico motor Bóxer. El primero es un 2.0 con 154 CV que puede asociarse a los acabados Base y Sport. El segundo, un 2.5 litros de 185 CV sólo disponible en el RS.
En ambos casos la transmisión automática asociada es la conocida Lineartronic CVT (Continuously Variable Transmission). En este caso, cuenta con levas tras el volante y ocho relaciones «preestablecidas» para su uso en modo secuencial. Tampoco falta la tracción total Symmetrical All Wheel Drive que mejora su rendimiento gracias al sistema de vectorización de par y el sistema de gestión de rendimiento SI-Drive. Y ya, no se espera versión híbrida…
¿Cuándo llegará al mercado europeo la nueva iteración del Subaru Impreza…?
Parece que el nuevo Subaru Impreza ha seguido la máxima que dice «Si algo funciona, no lo toques». Y aunque en la marca podrían haber sido un poco más agresivos, no podemos olvidar que este modelo está destinado al mercado en el que más unidades venden: Estados Unidos. En efecto, por ahora quedan por saber muchos secretos y aún no hay una fecha para su debut en Europa. Así es que habrá que esperar para saber cuáles son los planes de la marca.
Sobre todo teniendo en cuenta que sus ventas en el Viejo Continente son residuales y que la normativa de emisiones es cada vez más restrictiva. Eso sí, no nos extrañaría nada ver cómo apuesta por una versión híbrida al estilo de la que ya monta la actual y quinta iteración. Si vives en EEUU podrás hacerte con él en la próxima primavera y a nosotros nos tocará seguir esperando…
Fuente – Subaru
Más información sobre este modelo
- Plazas 5
- Potencia 150 cv
- Consumo 7,7 l/100km
- Valoración 3,9