Dicen que el dinero no da la felicidad. Estoy de acuerdo, pero creo que prefiero llorar en cualquier superdeportivo antes que en un coche normal y corriente del que todavía me quedan unas cuantas cuotas por pagar. Bromas aparte, creo que cualquiera de nosotros estaría encantado de tener en su garaje -y poder disfrutar- de un buen deportivo con varios centenares de caballos esperando a galopar cuando apretemos el acelerador.
En el vídeo que os dejamos tras el salto, del canal de Youtube de Motorsport Magazine, han enfrentado a dos coches espectaculares. Por un lado tenemos al flamante y exclusivo McLaren Senna, mientras que al otro aparece el más extremo de los Porsche 911 homologados para la calle, el GT2 RS de la generación 991. Cualquiera de nosotros apostaría claramente por el Senna, pero hay sorpresa… La diferencia no es tan grande como hubiéramos esperado.
Una pista de aterrizaje siempre es un buen lugar para realizar una carrera de drag. En este caso han optado por hacer un sprint de un kilómetro partiendo desde parado, y es que lógicamente el cuarto de milla se queda demasiado corto para estas dos obras de ingeniería, cada una con su estilo propio y de conceptos distintos.
Como veis en el vídeo, el McLaren Senna toma ventaja en los primeros metros, pero llega un momento en el que el Porsche 911 GT2 RS no le deja irse más lejos y mantiene el ritmo del exclusivo modelo de Woking. Finalmente, el Senna cubre esos 1.000 metros antes que el GT2 RS, pero la diferencia es de solo 0,9 segundos. El primero tarda 18,2 segundos en completar el recorrido, mientras que el segundo lo hace en 19,1.
Entre los datos más destacados del McLaren Senna cabe destacar que toma su nombre del desaparecido y querido piloto Ayrton Senna. Pesa apenas 1.200 kilos y utiliza un V8 de 4.0 litros con nada menos que 800 CV. La tecnología y la aerodinámica son sus principales aliados. Su producción está limitada a 500 unidades, con un precio cercano a los 900.000 euros.
Mientras tanto, el Porsche 911 GT2 RS es la variante más extrema homologada para la calle del 911 de generación 991. Pesa algo menos de 1.500 kilos y en su parte trasera se ubica un motor 3.8 de seis cilindros que desarrolla 700 CV. Prácticamente es un vehículo de competición cuyo precio es de más de 320.000 euros.
Si tenemos en cuenta las diferencias de precio, peso y potencia, es sorprendente que el Porsche 911 GT2 RS se quede relativamente tan cerca del McLaren Senna en una carrera de aceleración de un kilómetro, más aún habiendo visto que la principal diferencia entre ambos está en los primeros metros, con una mejor tracción para el modelo de la firma británica.