La pasada semana os comentábamos que un Maserati Levante de altas prestaciones iba a ser presentado en el Salón del Automóvil de Nueva York, que abrió sus puertas a la prensa el pasado miércoles 28. El caso es que pensábamos que todo parecía indicar que se trataría de una versión con apellido GTS, aunque finalmente la marca italiana apostó por la denominación Maserati Levante Trofeo para el SUV deportivo que veis en las imágenes.
Como reza el título de este artículo, el Maserati Levante Trofeo equipa en su vano motor un propulsor V8 Twin Turbo de 3.8 litros. Montado en Maranello por Ferrari, este V8 desarrolla la mayor potencia específica para un Maserati de producción jamás producido, con 156 CV por litro, entregando 590 CV a 6.250 rpm y 730 Nm de par entre 2.250 y 5.000 rpm. Junto con la tracción Q4 Intelligent All-Wheel Drive y el cambio automático, pasa de 0 a 100 en 3,9 segundos y supera los 300 km/h de velocidad máxima.
Por otra parte, cuenta con varios modos de conducción para adaptar la respuesta del vehículo y de la electrónica según lo que le apetezca al conductor en cada momento, con los programas Normal, ICE, Sport, Off road y el deportivo Corsa. En este último, ofrece una mayor respuesta del motor, más sonido de escape, cambios de marcha más rápidos, suspensión más rígida y una menor altura de la carrocería, así como una configuración más dinámica de la tracción Q4 y del control de estabilidad y ESP.
Estéticamente hay cambios notables respecto a la gama más accesible del Levante. El Maserati Levante Trofeo es un SUV con motor y prestaciones de superdeportivo, y eso hay que transmitirlo también a golpe de vista. Nuevos paragolpes, diseño de llantas específico en 22 pulgadas, tomas de aire de grandes dimensiones y algunos detalles en fibra de carbono. La parte trasera, por otro lado, combina los característicos y reconocibles pilotos de luces con la potencia visual que transmite el difusor inferior y sus cuatro salidas de escape.
Muy a tener en cuenta también su interior. Es cierto que el volante y toda la zona del salpicadero no son precisamente muy modernos o trabajados (a nivel visual). Nadie puede discutir su calidad, pero estéticamente parecen estar algo atrasados en el tiempo. Por suerte, se contrarresta con unas inserciones en fibra de carbono que le aportan un plus de deportividad y unos tapizados de los asientos muy deportivos y trabajados; con una estética muy del estilo italiano.
La producción de este deportivo SUV será muy limitada, iniciándose a principios de este verano en la planta de Maserati en Mirafiori, Turín. Eso sí, será complicado verlo por nuestras calles, pues principalmente se comercializará en Estados Unidos y Canadá.
