Dos meses atrás asistíamos a la presentación del nuevo Opel Mokka X. Se trata de una actualización del anterior Opel Mokka, en el que se han introducido varios cambios estéticos para el exterior que le dan una presencia más seria, modificando también el interior con la introducción de nuevas tecnologías y un nuevo diseño mejorando así la seguridad activa del SUV alemán y facilitando el uso de sus sistemas de infoentretenimiento.
El Opel Mokka X pertenece al segmento B-SUV, una categoría muy disputada y que cada vez está cobrando más fuerza en el mercado europeo. Sus dimensiones relativamente contenidas acompañadas de un habitáculo espacioso y la facilidad de uso que presentan estos vehículos contribuyen a que cada vez más clientes se decanten por este tipo de vehículos urbanos de carrocería más elevada.
El Opel Mokka llegaba al mercado en 2012, manteniéndose en comercialización durante cuatro años. En este tiempo fue capaz de matricular unas 600.000 unidades a nivel global, de las que 35.000 se quedarían en España. Parece que el Opel Mokka X, que apenas lleva en nuestras carreteras un par de meses, superará los registros de su antecesor. Según informa la propia marca alemana, desde que se abrió su plazo de reserva en mayo de 2016, ya ha superado las 100.000 solicitudes.
Por tanto, el nuevo Opel Mokka X se ha convertido en el tercer modelo de la marca si nos ceñimos a volumen de ventas, estando por detrás de los superventas Opel Astra y Opel Corsa. Respecto al 2015, según datos facilitados por Opel, las ventas de Opel Mokka y Mokka X han conseguido que este vehículo quede en segundo lugar dentro de su segmento con una cuota de mercado del 15 %, suponiendo este dato un incremento de casi el 36 % respecto a los resultados obtenidos en 2015.