Los modelos SUV y crossover están de moda, siendo el mercado que más crecimiento representa con mucha diferencia. Esto no es ninguna novedad, pero lo que empezó siendo un vehículo con carrocería elevada, estética algo parecida a un vehículo más orientado a la conducción fuera del asfalto y un tamaño medio, hoy ya se divide en varios segmentos. Muy demandados están siendo últimamente los crossovers urbanos. Dimensiones exteriores compactas, altura elevada y un práctico a la par que amplio habitáculo.
Opel es una de las firmas que quiere explotar esta tendencia al alza de los vehículos SUV y crossovers. El Opel Mokka X ha sido y sigue siendo un éxito en ventas, pero los alemanes no se conforman con ello y están aumentado su oferta de productos. Así nace el Opel Crossland X, y lo hará dentro de unos meses el Opel Grandland X.
El Opel Crossland X es el sustituto natural del Meriva, que en su última etapa no tuvo un gran rendimiento debido, entre otras cosas, precisamente al auge de los SUV. El nuevo modelo de Opel, que está diseñado sobre una plataforma de PSA por una colaboración entre fabricantes (anterior a la compra de Opel por parte del grupo francés), mide 4,21 metros de largo por lo que es ligeramente más corto que un Mokka X y 16 cm más corto que un Astra. Aunque visualmente parece un vehículo más largo, se sitúa en el segmento B. Producido en Zaragoza, Opel pretende vender unas 11.000 unidades anuales en España.
Así es su exterior
El Crossland X tiene una carrocería que parece mezclar, a nivel estético, un todocamino con un monovolumen. Me explico. Las partes inferiores de la carrocería y los pasos de rueda están protegidos por un plástico de color negro, al igual que en el frontal y en la zaga aparece otro plástico en color gris. Con esto Opel, aunque sabe perfectamente que su coche no es más apto para el campo que un Corsa (y quien se lo compre también debe saberlo), quiere dar sensación de robustez. Por otro lado, se ve un coche alto y guarda un guiño al Opel Adam con la forma del techo flotante y el pilar C.
Mientras que en el frontal veremos claramente la nueva identidad de la marca alemana por la rejilla principal y por los faros Full LED, la parte trasera es novedosa. Los pilotos de luces quedan a una altura más elevada de lo común, buscando dinamismo y la división del pilar C con el apéndice que se desliza por la aleta trasera. Mientras tanto, la superficie del portón es muy grande.
Así es el habitáculo del Opel Crossland X
Pese a que no hemos podido conducirlo por ser una presentación estática, sí hemos podido inspeccionar su habitáculo. El diseño del salpicadero, volante y cuadro de instrumentos es idéntico al de un Mokka X o al de un Astra, por lo que no merece la pena entretenernos demasiado. Eso sí, podríamos pensar que al ser un coche más económico que estos dos modelos citados, las calidades serían peores. A priori, tanto al tacto como a la vista resultan agradables y parecer tan bien ajustados como en ellos dos. La pantalla principal de serie es de 7 pulgadas, aunque con el navegador será de 8 pulgadas.
En cuanto a espacio, ciertamente ha parecido bastante amplio. Las plazas delanteras son más que suficientes para personas de corpulencia normal o grande, mientras que las plazas traseras nos han dado la impresión de que incluso podrían viajar cinco ocupantes con relativa comodidad. Siempre irán mejor cuatro personas que cinco, pero la plaza central parece lo suficientemente grande como para ser realmente utilizable. Lo comprobaremos a ciencia cierta cuando dispongamos de una unidad para probar, pero la sensación ha sido muy gratificante en este sentido.
Otra ventaja es que, dependiendo de la versión, la segunda fila de asientos puede ser desplazada longitudinalmente en 15 cm. De este modo, podemos ganar algo de espacio para las piernas o para el maletero. Un maletero que, por cierto, cubica 410 litros cuando los asientos traseros están en su posición más retrasada y 520 litros cuando están en la posición más adelantada. Si los abatimos completamente el espacio alcanza los 1.255 litros.
Motores PSA entre 81 y 130 CV
En la oferta mecánica vemos más detalles de la colaboración entre PSA y Opel. El Opel Crossland X estará disponible con las motorizaciones del fabricante francés. De este modo, la gama gasolina estará compuesta por un tres cilindros 1.2 atmosférico de 81 CV (más adelante llegará una versión de GLP) y el motor 1.2 sobrealimentado en potencias de 110 CV y 130 CV, también de tres cilindros. Las versiones diésel cuentan con un bloque 1.6 en variantes de 99 y 120 CV.
Dependiendo de las versiones, el Crossland X se ofrecerá con transmisiones de 5 o 6 velocidades en cambio manual, o bien un automático de 6. Lo que no estará disponible en ningún caso es la tracción a las cuatro ruedas, terreno que deja para el Mokka X.
Precios y equipamiento
Hasta el mes de junio no se lanzará al mercado este Opel Crossland X y todavía no hay lista de precios ni tampoco niveles de acabados concretos. Opel nos comenta que, para hacernos una idea aproximada de su precio, el precio de un acabado alto del Crossland X será muy similar al de un acabado medio del Mokka X. Podemos intuir que arrancará en torno a los 14.000 o 15.000 euros en su versión 1.2 de 81 CV, aunque no es para nada oficial ni se ha comentado por parte de la marca.
Respecto al equipamiento del Opel Crossland X, no sabemos el escalado de acabados, pero sí sabemos que podrá disponer, entre otras cosas, de: faros Full LED con luz en curva y largas automáticas, Head-up Display, cámara de visión trasera de 180 grados, asistente avanzado para el aparcamiento, alerta de colisión frontal con frenada total automática hasta 30 km/h y detección de peatones, aviso de fatiga, asistente de mantenimiento de carril, sensor de ángulo muerto, sistema OnStar, asientos AGR, cargador inalámbrico y conectividad para Smartphone mediante Apple CarPlay y Android Auto.
