Stellantis podría vender sus marcas menos rentables ante una inminente reestructuración

Stellantis, uno de los principales conglomerados automovilísticos del mundo, se enfrenta a un panorama muy complejo donde la rentabilidad de sus marcas está en el punto de mira. Mientras la compañía busca un nuevo CEO tras la salida de Carlos Tavares, la viabilidad de sus 14 enseñas ha pasado a ser un asunto de máxima prioridad. La compañía, formada por la fusión de Fiat-Chrysler y PSA Peugeot en 2021, posee una de las carteras más extensas del sector. Esto, podría estar generando desafíos en términos de gestión y rentabilidad.

Algunas de sus marcas más icónicas, como Jeep y Peugeot, se mantienen fuertes en el mercado. Pero otras, como Alfa Romeo, DS, Chrysler, Dodge o Lancia están bajo escrutinio debido a su bajo rendimiento. Esto ha llevado a diversas especulaciones. Se trata de la posibilidad, cada vez más real y evidente, de que Stellantis opte por una estrategia de reducción de su portfolio. Y el objetivo no sería otro más que concentrar esfuerzos y mejorar su margen de beneficio.

La presión por una reestructuración…

El presidente de Stellantis, John Elkann, ha dejado claro que la reorganización de las marcas es un asunto prioritario. Según fuentes cercanas, cualquier candidato a CEO que no tenga una estrategia clara sobre el futuro de estas no será considerado para el cargo. La salida de Tavares fue un movimiento inesperado, pero reflejó la creciente presión por parte de accionistas y analistas que demandan un mejor desempeño financiero.

El mercado de EEUU ha sido uno de los mayores desafíos en los últimos años. Stellantis ha experimentado una caída en ventas y márgenes, lo que ha afectado especialmente a sus marcas más emblemáticas en EEUU, como Jeep, Ram, Chrysler y Dodge. Mientras Jeep sigue siendo un pilar dentro del grupo, Chrysler y Dodge han reducido notablemente su participación en el mercado, con volúmenes de ventas por debajo de las 150.000 unidades al año.

Marcas en la cuerda floja…

Diversos analistas señalan que marcas como Alfa Romeo, DS, Lancia y Maserati podrían ser las principales candidatas a una posible eliminación, fusión o reorientación dentro del conglomerado. Estas cuatro marcas, enfocadas en el segmento premium europeo, han tenido dificultades para competir con rivales consolidados como Audi, BMW o Mercedes-Benz.

Aunque Alfa Romeo cuenta con una base de seguidores leales, su presencia en el mercado sigue siendo limitada. En 2024, su participación de mercado en Europa fue de apenas un 0,3%. Un número insuficiente para el grupo y justificar su permanencia en la cartera de Stellantis a largo plazo. Algunos expertos sugieren que Alfa podría transformarse en una marca de nicho enfocada en modelos deportivos.

Por otro lado, Lancia, Maserati y DS enfrentan problemas similares. Con una cuota de mercado igualmente reducida y una estrategia de posicionamiento que no ha terminado de consolidarse. Esto pone en duda su viabilidad dentro del grupo. Sobre todo en un contexto donde la electrificación y la innovación tecnológica se han vuelto aspectos clave de la industria.

El dilema en EEUU y la competencia feroz en Europa…

Mientras en EEUU Stellantis lucha para recuperar terreno frente a rivales como Honda y Toyota, en Europa las dificultades no son menores. La compañía enfrenta un mercado altamente competitivo, con exigencias medioambientales cada vez más estrictas y una lenta transición hacia la electrificación en comparación con otros fabricantes.

Marcas como Peugeot y Opel parecen estar bien posicionadas en el segmento de masas, pero la superposición de productos dentro del grupo podría llevar a decisiones drásticas. Fiat, que sigue siendo un nombre fuerte en ciertos mercados emergentes, podría optar por centrarse en modelos asequibles, mientras que Opel y Peugeot continúan disputando el liderazgo en Europa.

Las decisiones clave están en el horizonte…

El próximo CEO de Stellantis tendrá la tarea de redefinir el rumbo del grupo, tomando decisiones que podrían cambiar la estructura de la compañía en los próximos años. La eliminación de algunas marcas podría ser una medida necesaria para simplificar la gestión, reducir costos y focalizar los esfuerzos en las más rentables.

Para los inversores, la clave estará en lograr un equilibrio entre eficiencia operativa y la permanencia de marcas con fuerte identidad. No será fácil deshacerse de nombres con décadas de historia, pero la presión del mercado podría obligar a Stellantis a tomar decisiones difíciles en un futuro próximo.

A medida que el sector del automóvil sigue evolucionando, Stellantis se encuentra en una encrucijada que definirá su estructura y competitividad en los próximos años. La posibilidad de reducir su cartera de marcas es una estrategia que busca optimizar recursos y mejorar la rentabilidad, pero cualquier decisión será tomada con sumo cuidado para evitar un impacto negativo en su imagen y en su presencia en los mercados clave.

Fuente – Reuters

Imágenes | Alfa Romeo – DS – Maserati – Lancia – Chrysler – Stellantis