Parece mentira que un modelo de corte deportivo continúe en el mercado después de 54 años. Los tiempos han cambiado muchísimo desde 1964 y, obviamente, desde que la primera unidad del Ford Mustang saliera de la planta de producción, este modelo americano ha cambiado mucho. Pese a ello, la esencia del original se mantiene más viva que nunca.
Sea como fuere, la marca del óvalo azul está celebración, pues su modelo más icónico y uno de los más reconocibles en todo el planeta ya suma 10 millones de unidades producidas. La unidad que redondea esta cifra es un Ford Mustang GT convertible con cambio manual y de color Blanco Wimbledon. El primer Mustang también montaba un V8, era de color blanco y recurría a una transmisión manual, aunque rendía 164 CV y tenía tres marchas.
Fue en 2015 cuando el mítico musclecar empezó a comercializarse oficialmente en Europa por el fabricante del óvalo azul, una estrategia que le está funcionando bastante bien pues en estos 3 años ya se han comercializado más de 38.000 unidades en el viejo continente. Sus principales mercados europeos son Alemania, Reino Unido, Francia, Bélgica y Suiza.
Decíamos al comienzo de este artículo que mucho ha cambiado el Mustang desde sus orígenes. En las primeras generaciones era un coche muy bello, pero también era complicado de conducir en comparación con el actual. Ahora cuenta con muchos sistemas de ayuda a la conducción y sistemas de seguridad, como el frenado de emergencia automático o la ayuda al mantenimiento de carril, por no hablar de los distintos modos de conducción o la suspensión adaptativa.