Prueba Volkswagen up! 1.0 75 CV Beats, refinado y muy habitable

Esta semana, en Actualidad Motor, tenemos entre manos un utilitario muy coqueto procedente de Alemania. Probamos el Volkswagen up! en el exclusivo acabado Beats, que se asocia al motor atmosférico 1.0 MPI de tres cilindros con 75 CV. Volkswagen es una de las marcas que toca casi “todos los palos”, desde utilitarios como este up! a grandes SUV como el Touareg pasando también por el segmento de las pick-up con el Amarok, sin olvidarnos de los legendarios Golf, Passat y Polo.

El Volkswagen up! es el modelo más pequeño y económico de la marca alemana, pero no penséis que por ello es su peor producto. El Volkswagen up! llegaba al mercado en 2011 y tras 700.000 unidades vendidas, en Salón de Ginebra de 2016, se presentaba una actualización que aterrizaba en nuestros concesionarios durante el pasado verano. ¿Sus rivales? Los más directos serán el Toyota Aygo, el Fiat 500, el Seat Mii o el Mitsubishi Space Star. ¿Nos acompañas a descubrir todos sus detalles y comportamiento?

Diseño exterior

Pese a que el Volkswagen up! no es un coche tan llamativo y refinado estilísticamente hablando como el Fiat 500, este acabado Beats junto al techo solar opcional de nuestra unidad dotan al pequeño urbanita de personalidad exterior.

El diseño frontal nos puede recordar a un vehículo eléctrico por sus pocas entradas de aire, pero no, este coche utiliza motor térmico, aunque queda la opción de adquirir el Volkswagen e-up!. En esta posición también vemos los retrovisores de color negro brillante. El logo de Volkswagen, tiene unas grandes dimensiones y una línea cromada lo comunica con los faros. Más abajo encontraremos las redondeadas ópticas de antiniebla que también hacen la función de iluminación en curva. En la zona más baja del paragolpes encontramos un pequeño labio que pone una pizca de deportividad a la delantera.

Nos movemos y con la vista lateral ya veis que estamos ante la carrocería de cinco puertas. El pilar central no utiliza el color de la carrocería, sino un tono negro brillante que aporta elegancia. En la parte baja de las puertas podemos observar unas dinámicas líneas de vinilo en colores blanco y negro. Este acabado trae consigo, de serie, las llantas de 15 pulgadas que vemos en las imágenes. En la parte trasera destacará el cristal trasero, que hace las veces de portón del maletero, como en el Toyota Aygo. Nuevamente el logo de Volkswagen aparece en grandes dimensiones. Olvídate de buscar el tubo de escape, está muy camuflado en los bajos.

Nos engaña, es más grande de lo que parece

Ya hemos comentado que el Volkswagen up! se actualizaba en 2016, aunque no era un relevo generacional; por tanto las dimensiones exteriores son prácticamente idénticas variando ligeramente por la forma de los paragolpes. Así, sus cotas son de 3,60 metros de largo, por 1,64 de ancho y 1,50 de alto. Su distancia entre ejes se mantiene, con 2,4 metros. Como veis, las ruedas se encuentran prácticamente en las cuatro esquinas de este modelo alemán del segmento A, lo que permite aprovechar al máximo sus dimensiones exteriores en el habitáculo.

Las plazas delanteras permiten una habitabilidad holgada, aunque al tratarse de un coche de esta categoría parecerá que estamos demasiado cerca de nuestro acompañante. No obstante, el techo solar dejará pasar luz si abrimos su cortinilla manual, lo que aumenta la percepción visual de amplitud. La sujeción de los asientos es bastante decente para la media habitual del segmento.

Pasamos a los asientos traseros. Este utilitario está homologado para cuatro personas, lo que nos parece algo bastante lógico. Si el conductor no es una persona de gran altura, el ajuste de su asiento dejará espacio para que una persona de 1,75 metros disfrute de espacio para las rodillas. Aunque no llega al nivel del Hyundai i10, la cota de altura es muy buena y tampoco habrá grandes problemas de anchura. En resumen podemos decir que su habitáculo es bueno para tratarse de un coche de este tamaño.

El maletero tampoco estará nada mal. Al abrir el portón, perdón, cristal del maletero nos parecerá que tiene un tamaño demasiado pequeño, pero lo cierto es que cuentan con un doble fondo muy grande, por lo que directamente podríamos quitar la bandeja de separación de ambos huecos. En total cubica 251 litros, que es un volumen generoso y similar a la media del segmento B de hace unos años. De los mejores del segmento A. Abatiendo la segunda fila de asientos se ampliará hasta los 959 litros. En el fondo de este maletero nos encontraremos con un kit de reparación de pinchazos y un subwoofer que viene de serie en el acabado Beats.

Un interior con mucha calidad

El pequeño de Volkswagen destacará en este terreno, aunque no esperes materiales acolchados o grandes pantallas táctiles. El acabado Beats trae consigo unos bonitos contrastes de colores con blanco y negro además del tono de la carrocería en la parte superior de las puertas, en este caso el Rojo Tornado. Además de este juego de colores, llamará nuestra atención un elemento que hace las veces de soporte para el móvil, así podremos amarrarlo y que alguna aplicación GPS nos guíe a nuestro destino, ya que no cuenta con navegador.

Justo debajo tenemos los mandos del aire acondicionado (tampoco tiene climatizador) y algunos botones como la calefacción para los asientos delanteros. Inmediatamente después se ubica una pequeña pantalla digital pero sin manejo táctil que gestionará el audio y algún que otro sistema más. Sí hemos echado de menos alguna salida de aire central en esta zona. En la zona inferior del salpicadero se encuentran unos grandes y prácticos espacios portaobjetos, lo que contrarresta la ausencia de un reposabrazos central con hueco en su interior.

El cuadro de instrumentos está presidido por un gran dial para la velocidad. Personalmente hubiera preferido un velocímetro más pequeño y una mayor superficie para el cuentarrevoluciones, ya que se antoja algo pequeño. En la zona baja y central tiene lugar el navegador de abordo con los típicos datos de consumos, autonomías, cuentakilómetros parcial, etc.

Por su parte, el volante presenta un diseño muy habitual al resto de modelos de Volkswagen pero, en este caso, parte de su superficie recibe el color blanco. Su regulación solo se puede realizar en altura y no en profundidad, un punto negativo, aunque en la marca les consolará que prácticamente ningún modelo de este segmento ofrece ajuste en profundidad. El cinturón de seguridad tampoco permite regulación.

Una de las cosas que más me han gustado de este Volkswagen up! en acabado Beats son sus asientos. Su estética podrá gustar más o menos, habiendo escuchado opiniones de ambos extremos en estos días. Lo que no se puede negar es su conseguido confort y la alta calidad de su tapizado, con alcántara en los laterales y en el reposacabezas integrado. El del conductor tiene regulación longitudinal, en inclinación y también altura, aunque por ésta última hay que pagar un sobrecoste de 85 euros. Además son calefactados si escogemos el paquete invierno (385 euros).

1.0 MPI 75 CV

Abrimos el capó y allí nos espera un vano de contenidas dimensiones. En él se encuentra el motor 1.0 MPI de tres cilindros y aspiración natural con 12 válvulas. Desarrolla 75 CV que aparecen a 6.200 rpm y 95 Nm entre 3.000 y 4.300 rpm. Al ser un motor sin sobrealimentación, el par motor no es muy elevado y se encuentra a altas revoluciones.

Este tricilíndrico no busca deportividad aunque, según los datos de homologación, puede lanzar al up! hasta los 172 km/h. No podrá ser muy corta la recta, ya que simplemente para pasar de 0 a 100 km/h necesita 13,5 segundos. En cualquier caso, si el uso va ser casi siempre en ciudad, será suficiente. Su consumo homologado es de 4,1 litros a los 100 km y emite 101 gramos de CO2 por kilómetro.

El acabado Beats nos obliga a equipar este propulsor 1.0 de 75 CV asociado al cambio manual de cinco velocidades, aunque en los otros dos acabados (“Move up!” y “High up”) podremos escoger entre una versión de 60 CV o una mecánica de 90 CV con sobrealimentación, que dará más vida a este utilitario cuando abandonemos la urbe. También hay opción a un cambio automático ASG de cinco marchas y a una variante que puede funcionar con GNC como combustible rindiendo 68 CV.

Suavidad y eficiencia, pero baja respuesta

Conducir el Volkswagen up! en ciudad es una auténtica delicia. Sus contenidas dimensiones exteriores nos permitirán circular por calles estrechas, como las que veis en las imágenes, sin ningún problema cuando con vehículos del segmento C empezaría a entrarnos un profundo sudor frío. Otra ventaja es que no echaremos de menos la cámara de visión trasera o los sensores de aparcamiento, ya que estacionarlo será pan comido incluso en huecos estrechos. También hay que destacar la insonorización general del habitáculo, donde apenas llegará ruidos del motor, de la rodadura o aerodinámicos

He de decir que, normalmente, este tipo de vehículos tienen una puesta a punto de la suspensión demasiado blanda, lo que no siempre es algo cómodo. Con este coche no notaremos rebotes excesivos en los típicos resaltos que pueblan nuestras ciudades y tampoco inclinará excesivamente su carrocería cuando avivemos el ritmo. El equilibrio es difícilmente mejorable, ya que sin ser blanda tampoco llega a ser seca. Además, rodando por autovías (muy lejos de su hábitat natural) transmite un aplomo similar al de coches que rondan los 4 metros.

Si circulamos por una vía rápida y ésta no tiene desniveles, el Volkswagen up! no se quejará demasiado a ritmos legales, con un consumo a 120 km/h que rondará los 6,2 litros. El problema llega cuando afrontamos alguna pendiente por leve que sea, ya que perderemos velocidad y tendremos que recurrir al cambio, lo que aumentará el consumo de combustible. Las recuperaciones serán muy lentas y es que, como ya hemos dicho, si vamos a salir habitualmente de la ciudad mejor apostar por otra versión con el 1.0 TSI de 90 CV. El consumo medio de la prueba ha sido de 6 litros a los 100 según ha indicado el cuadro de instrumentos.

Por su parte, la dirección cuenta con una gran asistencia, lo que será un punto muy favorable en terreno urbano, aunque perderemos algo de feeling en vías rápidas. Pese a ello, se muestra muy precisa y no nos obligará a realizar constantes correcciones en el volante en curvas rápidas.

Conclusiones

Después de revisar a fondo cómo es este Volkswagen up!, llega el momento de irse despidiendo de la prueba, pero antes recapitularemos los puntos clave de este utilitario del fabricante del “coche del pueblo”.

Este Volkswagen up! es un coche que me ha gustado bastante y que, por tamaño y comportamiento, se posiciona como una de las opciones del segmento A con mejor acabado general. La edición Beats aporta un plus de diferenciación, más en el interior que en el exterior. A destacar los buenos ajustes del interior, la suavidad de funcionamiento y los bajos consumos de su propulsor, el confort que otorgan las suspensiones y su buena habitabilidad.

Menos nos ha gustado la entrega de energía del motor, que es escasa en cuanto abandonamos la ciudad, los largos desarrollos de la caja de cambios que le restan agilidad y penalizan a la hora de ganar velocidad con soltura, así como la ausencia del climatizador de serie en este alto nivel de acabado o el reposabrazos central. Sabemos que es un coche de reducidas dimensiones, pero consideramos que no debería existir la ausencia de estos dos pequeños detalles cuando nuestra unidad probada cuesta 16.765 euros según el configurador de la marca.

Equipamiento del Volkswagen up!

Move up!

• Faros halógenos y luces diurnas LED
• Volante de tres radios
• Airbag para conductor y acompañante
• Frenos delanteros de disco ventilados
• Ordenador de viaje
• Elevalunas delanteros eléctricos

High up!

• 4 llantas de aleación ligera «radial» 5,5 J x 15
• Tapizado de asientos en tela, diseño «dots»

Beats

• Sistema de sonido «beats», 6 altavoces, amplificador digital de 8 canales, subwoofer y 300 vatios de potencia total
• Radio «Composition Phone»
• Soporte Smartphone
• Antinieblas delanteros con iluminación en curva
• 4 llantas de aleación ligera «radial» 5,5 J x 15

Precios Volkswagen up! en España

Opinión del editor

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