Las luces antiniebla son un equipamiento de seguridad muy útil, siempre que se usen bien. Por eso te contamos cuáles son sus símbolos, cuándo usarlas y cómo.
Has de saber que el piloto trasero antiniebla es obligatorio para todos los coches, pero las luces delanteras no. Aunque nosotros te las recomendamos siempre que no tengas luces adaptativas de algún tipo.
Símbolo de las luces antiniebla
Los símbolos de las luces antiniebla que aparecen en los interruptores y el puesto de conducción están normalizados a nivel internacional. Aun así, hay conductores que confunden los testigos por las pocas veces que tienen que usarlos y conducen por error con la luz antiniebla trasera.
Para que no haya confusiones:
- el símbolo de control amarillo indica que el piloto antiniebla está encendido en la parte trasera del vehículo.
- el símbolo de control verde indica que las luces antiniebla delanteras están encendidas. Sin embargo, no se ha obligado a las marcas a poner un testigo de este tipo en el cuadro de mandos.
Para mayor diferenciación, ambos símbolos representan un faro, pero el símbolo amarillo del piloto trasero apunta a la derecha y el símbolo verde de las delanteras apunta a la izquierda.
Cuándo se usan las luces antiniebla
La iluminación antiniebla se emplea a menudo de forma incorrecta o abusiva. A veces se debe simplemente a equivocaciones, pero otras a la desconsideración de algunos con los demás conductores.
Según la DGT, las situaciones adecuadas para usar las luces antiniebla delanteras son:
- A pesar de su nombre, los faros antiniebla no sólo son una ayuda sólo cuando hay niebla espesa. Según nuestra normativa se pueden usar en cualquier condición que disminuya la visibilidad. Por ejemplo: lluvia o nieve intensa, humo, polvo denso y por supuesto niebla.
- Lo que no sabe todo el mundo es que también se pueden usar en carreteras estrechas con un grupo de curvas concatenadas que estén indicadas en las señales de tráfico. Es decir, que sean bastante cerradas. Esto se debe a que los faros antiniebla pueden ayudar a mantener iluminada la calzada cuando nuestros faros apuntan fuera de la curva. Algo innecesario si tenemos faros adaptativos para estos casos.
Dicha institución señala que el piloto trasero antiniebla se usa solo en las siguientes circunstancias:
- Lluvia o nieve intensas y niebla espesa. Cómo ves, aquí la DGT es más concreta y no deja la puerta abierta al polvo denso o al humo.
- Esta directriz tiene una excepción poco conocida: se debe apagar en atascos para no deslumbrar al que tengas justo detrás. A lo que nosotros añadimos un pequeño detalle: no la apagues si eres el último de la retención. No vaya a ser que por ser demasiado obediente, recibas una colisión por detrás porque no te ven los que vayan llegando.
Cómo usar las luces antiniebla
La mayoría de los coches sólo tienen un único mando para las dos luces antiniebla, pero con dos niveles:
- el nivel uno conecta los faros antiniebla delanteros
- el nivel dos activa también el piloto antiniebla de la parte trasera del vehículo.
Más de uno no se da cuenta y gira el conmutador directamente hasta el tope. De todas formas, no tendrás problemas ahora que sabes que el símbolo de las luces antiniebla traseras es amarillo y el de las delanteras verde (si lo hay).
Un detalle que ha acabado añadiendo en muchos coches nuevos es que la luz antiniebla trasera se desconecta al apagar el coche. Así, no te las puedes dejar puestas y en el siguiente arranque el conductor deberá volver a activarlas.
Faros antiniebla en otros países
Las normativas para el uso de luces traseras antiniebla y faros antiniebla difieren de un país a otro, pero los símbolos en los interruptores y en el cuadro de mandos son iguales en todos los países.
Las luces antiniebla traseras son mucho más brillantes que las luces traseras normales y, por lo tanto, deslumbran en caso de visibilidad normal. Las normativas permiten su uso sólo en caso de condiciones de visibilidad adversas. En algunos países, como en Alemania, su uso está permitido sólo en caso de niebla y no en caso de fuertes nevadas o lluvias.
Los faros antiniebla delanteros pueden usarse en la mayoría de los casos con visibilidad ligeramente reducida, por ejemplo, cuando llueve. Algunos países permiten incluso su empleo como luz diurna. También en caso de nieve ayudan a mejorar la visibilidad.