El DS 7 Crossback llegará a nuestro mercado a principios de 2018 y quiere entrar por la puerta grande. Su objetivo, presentar batalla a las marcas premium con niveles de equipamiento y acabados a su altura. Por este motivo, DS lanza su nueva suspensión Active Scan, que escanea el terreno para adaptarse a la circunstancia en todo momento. Se trata de un sistema que utilizan modelos de la talla del BMW Serie 7 o el Mercedes Clase S.
El grupo PSA está haciendo grandes esfuerzos para que su reciente marca DS sea acogida entre los modelos de la alta gama. Esto es algo que se le está dando bastante bien, si tenemos en cuenta que el DS 7 fue elegido por el presidente francés Emmanuel Macron para su investidura. Pero, si lo que se quiere es competir con los grandes, hay que ofrecer equipamientos como esta nueva suspensión u otros como la cámara de visión nocturna, y DS está cumpliendo.
Cómo funciona la suspensión Active Scan de DS
La suspensión Active Scan funciona gracias a una cámara que escanea la superficie del suelo hasta una distancia de 20 metros por delante del coche. El sistema detecta las imperfecciones de la carretera, como baches, grietas o badenes y se anticipa a ellos regulando la dureza de la suspensión en el preciso momento. La encargada de gestionar todos los datos captados es una centralita electrónica, que puede actuar sobre los 4 amortiguadores de forma independiente.
La cámara está situada detrás del parabrisas y es ayudada por cuatro sensores que miden la estabilidad de la carrocería, además de tres acelerómetros que monitorizan la reacciones del vehículo. Todos estos elementos tienen en cuenta la velocidad del coche y las acciones del conductor para adaptarse lo mejor posible.
La inclusión de este equipamiento opcional en el DS 7 Crossback es una vuelta a la tecnología punta en suspensiones, algo que ya consiguió el DS “Tiburón” en los años 50. Aquél automóvil fue un hito en innovación gracias a su suspensión hidroneumática con corrector automático de altura.
