El segmento B es uno de los más disputados en la actualidad, de hecho, es el de mayor volumen de ventas junto al segmento de los compactos. Es por ello que los fabricantes se preocupan de mantener a sus modelos “frescos” durante el máximo tiempo posible para atraer el interés de los clientes durante todo el ciclo comercial de la generación. La generación actual del Toyota Yaris aparecía en 2011, renovándose en 2015. Ahora, en 2017, recibe otra actualización.
Cuentan desde la marca japonesa que han invertido 90 millones de euros para la actualización del Toyota Yaris que hoy os presentamos, instalando 900 componentes nuevos en su modelo. Los cambios más notables de este coche llegan de la mano de modificaciones estéticas, nuevo diseño del interior, un equipamiento más completo teniendo muy en cuenta los sistemas de seguridad, mejoras en la variante híbrida y un nuevo motor 1.5 que ya os presentamos hace unos días. Además, también una variante de altas prestaciones.
Como decíamos, este Toyota Yaris de 2017 no es un relevo generacional sino una actualización pero, pese a ello, es un restyling en el que sí podemos encontrar diferencias claras de su carrocería. El frontal se acerca más al resto de la gama Toyota con la nueva disposición de faros con iluminación diurna en tecnología LED. El paragolpes delantero también es nuevo, así como la gran parrilla con diseño en forma de panal de abeja y los antinieblas con un nuevo contorno cromado. En la vista lateral el cambio más destacado es la introducción de una moldura en la zona baja de las puertas.
La zona posterior del Toyota Yaris también ha recibido un notable rediseño. Como podemos ver, Toyota busca ahora unas líneas más horizontales, lo que se traduce en una mayor sensación de anchura. Así, los pilotos de luces (con iluminación parcial de LED dependiendo de las versiones) se encuentran en posición horizontal, extendiéndose levemente por las aletas traseras. El paragolpes también es nuevo y nuevamente busca una mayor sensación de anchura.