Los frenos Brembo GT se han comportado impecablemente en ciudad, autovía y carretera. El siguiente desafío será el circuito Kotarr, en Tubilla del Lago (Aranda de Duero). Aquí podremos exigirle al máximo sin comprometer la seguridad.
En el circuito Kotarr prevalece la técnica sobre la potencia
Un circuito es el lugar adecuado para poner a prueba las prestaciones de los frenos (y ya de paso, del coche completo). Como dijo un célebre piloto, todo el tiempo que no estés acelerando al máximo o frenando al máximo (con un coche de tracción delantera), es tiempo que estás perdiendo. Aunque esta afirmación no es aplicable 100% a un circuito de asfalto, no hay duda de que vamos a exigir de lo lindo.
Nos lanzamos a una primera vuelta de calentamiento de frenos y neumáticos, para seguir con una tanda de 4 vueltas a fondo, concentrándonos más en apurar bien las frenadas que en trazar impecablemente. La temperatura de los frenos indica unos modestos 280ºC, con lo cual han ido bastante sobrados.
Tras las cuatro vueltas iniciales, realizamos otras 4 y nada más acabar, completamos 8 frenadas a fondo desde 100 km/h hasta su total detención. La temperatura ahora es de 330ºC, que es una temperatura alta pero lejos aún de poner en peligro la integridad del equipo de frenos (peligroso a partir de 600ºC aproximadamente).
Continuamos completando giros al circuito de Kotarr, siendo cada vez más evidente que el único síntoma de cansancio que da el coche es la temperatura del aceite, la cual ha subido hasta cotas que yo nunca había visto antes. Los neumáticos Michelin Pilot Exalto también muestran cierta degradación, pero aún les queda mucha vidilla.
La prueba en circuito ha sido más que satisfactoria. En parte me he sentido defraudado porque las prestaciones del Fiat Grande Punto (y eso que está reprogramado a 165 CV y 380 Nm) no han sido suficientes para poner en apuros a los Brembo Gran Turismo. En ningún momento sentí el pedal desfallecer (sólo ganó algo de recorrido), ni perdió potencia de frenado. Es más, a medida que el conjunto líquido, pastillas, discos y neumáticos ganaba temperatura, daba la impresión de frenar aún con más energía.
Ahora mismo los frenos llevan conmigo 8.000 Km, incluyendo la prueba en circuito y varias rutas de montaña en los que han acabado echando humo (está visto que la vida real puede ser incluso más exigente que un circuito).
En breve desmontaré para verificar el desgaste que ha sufrido el equipo y calcular aproximadamente cuanto nos va a durar. Un equipo tan caro como este debería de ser una inversión a largo plazo, ¿no?
Muy bueno, lo estábamos esperando pero, era evidente que en ese coche no ibas a conseguir abrasar esos pedazo de frenos facilmente, no crees
Chulo y interesante el articulo aunque todavia no voy a cambiar mis frenos y no me va a llegar para poner esos gggg
Haber cuanto duran esos frenos porque con la pasta que valen tiene que durarte media vida del coche x lo menos, no?
Dices que se calientan mas en uso por montaña que por circuito y es normal ya que en bajadas se suma el peso del coche a la potencia del motor. Esperamos que nos digan como estan de kemados ya esos frenos!