Con el índice de criminalidad por las nubes en México, las ventas de coches a prueba de balas han llegado a su máximo histórico. Parece que coches del estilo del Skoda Superb blindado del que os hablamos hace unas semanas dejan de ser una rareza en aquel país, a pesar del elevado coste que tienen las transformaciones necesarias para soportar el impacto de una bala.
Con los más de 27.000 homicidios que se cometieron en 2017 en México, la demanda de este tipo de vehículos mantiene a las empresas de blindaje de coches trabajando a pleno rendimiento. De hecho, las solicitudes de coches blindados han aumentado tanto, que las marcas de automóviles han comenzado a construir estos coches en sus propias líneas de fabricación mexicanas.
Las marcas se lanzan a fabricar coches blindados
Por ejemplo, Audi ha comenzado a fabricar su propia versión a prueba de balas del Q5, con un precio de salida de 75.000 euros para la versión más básica. Un precio muy alto comparado con las versión normal, pero que es mucho más asequible que lo que suele cobrarse cuando hay una empresa intermediaria que transforma un modelo de serie.
Según datos de la Asociación Mexicana Automotriz de Blindaje, los datos registrados de ventas de coches blindados ha aumentado un 10%. En total se han vendido 3,284 unidades transformadas de diferentes marcas en 2017. Un aumento que supone un récord que deja atrás al máximo histórico que se alcanzó durante 2012.
Alquiler y compra de vehículos blindados
Las empresas de seguridad privada mexicanas también han ampliado sus ofertas de alquiler de estos coches con chófer incluido. Un tipo de servicio que cada vez es más popular en México. Alrededor del 80% de las ventas y alquileres de vehículos blindados son para el sector privado. Destinados a la protección de ejecutivos de grandes empresas y sus familias.
Fuente – auto.economictimes.indiatimes.com