Prueba Honda HR-V Híbrido de 131 CV y acabado Advance (con vídeo)

La firma nipona Honda, vuelve a la carga con la tercera generación de uno de sus modelos más importantes, el Honda HR-V. Se trata de un SUV de tamaño medio con hibridación y que, por lo tanto, obtiene la ventajosa pegatina ECO de la DGT, algo muy útil en las grandes ciudades.

El HR-V que hemos estado probando esta semana equipa el acabado Advance, es decir, el intermedio. En cuanto a su mecánica, solo encontramos una disponible denominada i-MMD 1.5 que ofrece 131 CV de potencia, 253 Nm de par y una caja de cambios automática de tipo CVT.

Aspecto discreto, elegante e incluso con caída «coupé»

La firma japonesa reconoce al HR-V como un SUV del segmento C con 4.34 metros de largo, 1.79 metros de ancho y 1.58 metros de alto. En cuanto a su diseño, nos recuerda mucho al que siguen otros modelos de su misma categoría, sobre todo por esa especie de caída coupé en la parte trasera.

En cuanto a los apartados más destacables de su diseño exterior, en la zona delantera resalta una discreta parrilla con unas ligeras entradas de aire horizontales, un aspecto que personalmente me recuerda al de un coche eléctrico. Por otro lado, tenemos unas perfiladas ópticas full LED que incorporan intermitentes dinámicos y unas protecciones inferiores en plástico cromado para así darle una esencia un poco más campera.

En el lateral encontramos unas llantas de 18 pulgadas con cinco radios, pasos de rueda en color contraste, protecciones en la parte inferior de las puertas en plástico y esa silueta anteriormente mencionada de aspecto coupé. La zona trasera se caracteriza por unos pilotos que no son full LED, estos quedan unidos por una franja roja que también se ilumina y, por otro lado, un parachoques en color negro brillo con aplicaciones en plateado.

Su interior sí es un poco más clasista

Adentrándonos hacia el habitáculo del HR-V, Honda mantiene la línea que tanto les caracteriza. Da muy buena sensación de calidad percibida, los materiales son correctos al igual que los ajustes, ya que prácticamente no encontramos ningún grillo. Sí es verdad que su diseño puede gustar más o menos, pero es cómodo e incluso tenemos mandos físicos para el control de la climatización, algo que poco a poco estamos perdiendo.

En cuanto a equipamiento tecnológico se refiere, el HR-V se queda por debajo de sus competidores. El cuadro de instrumentos no es totalmente digital y con un diseño demasiado clásico, aunque al menos tenemos diferentes opciones de información de la conducción. Por otro lado, la pantalla multimedia es de 9 pulgadas con botones físicos, el sistema de infoentrenimiento es muy sencillo e intuitivo. Además tiene integración con Apple Car Play y Android Auto.

Continuando, el HR-V tiene una función muy interesante. Se tratan de una ruleta para dirigir el flujo de aire y que así no nos dé de manera directa en la cara o manos. Por otro lado, en la consola central, tenemos los botones para cambiar entre los diferentes modos a la conducción e incluso activar la función de frenado en descenso. Sí echo en falta que el reposa brazos central tuviese algún tipo de ajuste tanto vertical como horizontal.

En cuanto a su confort, el espacio en las plazas delanteras es muy amplio, tiene unas cómodas butacas con una tapicería a de tela y piel sintética. Lo único que no me ha convencido es que el volante tiene poco ajuste de profundidad, se me sigue quedando muy alejado con mi posición de asiento y provoca que tenga que estirar demasiado los brazos.

Plazas traseras realmente amplias

Si continuamos hacia la segunda fila de asientos, el Honda HR-V obtiene un punto muy positivo gracias a su habitabilidad. Tengo el asiento del conductor ajustado a mi altura de 1,94 metros y, aún así, el espacio sigue siendo sobresaliente para las rodillas. Sí es verdad que en la cabeza me encuentro algo más justo, pero es soportable. Los asientos tienen buen mullido, faltaría algo de sujeción lateral pero son muy ergonómicos, aunque eso sí, la plaza central es prácticamente inservible por su firmeza e incomodidad.

Un detalle que caracteriza mucho a los modelos de la firma nipona son los «Magic Seats». Es un sistema el cual podremos poner de manera vertical la banqueta y, de esta manera, obtendremos un espacio extra para dejar grandes objetos en las plazas posteriores. Por otro lado, podremos encontrar dos salidas de aireación y dos tomas de tipo USB para la recarga de nuestros dispositivos.

El maletero no va muy acorde a sus dimensiones

Pues sí, a pesar de ser un coche de 4,34 metros de largo, el maletero del HR-V deja mucho que desear. Cubica una capacidad de 335 litros, todavía menos de la que podríamos encontrar por ejemplo en un Volkswagen Polo. Además, la caída de estilo coupé perjudica aún más para dejar objetos de mayor volumen o, por el contrario, cargarlo hasta arriba de maletas. En definitiva, no tiene un espacio muy acorde para irse de viaje una semana con cuatro ocupantes.

Al menos la apertura es eléctrica a partir de este acabado intermedio Advance, sus formas son muy cuadriculadas y eso ayudará a poder meter objetos de grandes dimensiones sin muchos problemas. El piso del maletero se queda casi a ras de la zona inferior de la boca de carga, por lo que es otro aspecto a tener en cuenta y que nos facilitará la carga.

¿Qué tal funciona el único propulsor del Honda HR-V?

La mecánica del Honda HR-V es la 1.5 i-MMD, es decir, un motor que cubica 1.5 litros, tiene 4 cilindros y es atmosférico. Por otro lado, tenemos dos unidades de potencia eléctricas, una que recarga energía y otra que utiliza esa energía para propulsar el vehículo, aunque el motor térmico también es capaz de recargar la batería del sistema híbrido. En conjunto, la potencia del HR-V es de 131 CV y 253 Nm de par motor, hace el 0 a 100 en 10,6 segundos y tiene una caja de cambios automática de tipo CVT.

Es un propulsor que, bajo mi punto de vista, está claramente enfocado para un uso principalmente urbano. Responde con algo de lentitud, no es un coche que tiene tampoco muy buena aceleración y su caja de cambios tampoco acompaña. Aunque eso sí, en el momento que dejamos a un lado carreteras secundarias o autopistas, la mecánica es perfecta.

Llega el momento de ponerse tras el volante del Honda HR-V

Nos abrochamos el cinturón, engranamos el modo B para así, desde el primer momento, ir utilizando la frenada regenerativa y aprovechar al máximo la parte eléctrica. Como norma general, el HR-V saldrá en modo totalmente eléctrico. A partir de ahí, si nuestro recorrido es mayoritariamente urbano, solo en momentos muy concretos veremos al motor de gasolina encenderse por un breve periodo de tiempo.

Ya tras hacer unos cuantos kilómetros por ciudad, el HR-V se caracteriza por ser un coche con una suspensión cómoda para ir pasando badenes o resaltos típicos. Por otro lado, hace que la conducción sea tranquila al no estar escuchando prácticamente nada la mayoría del tiempo. Además, otro detalle a tener en cuenta es que es muy maniobrable, esto nos beneficiará sobre todo de cara a las grandes ciudades con sus estrechas calles y parkings pequeños muy ajustados.

Al salir a carretera es cuando aprecio algunos aspectos que no me terminan de convencer demasiado. Sí, sigue siendo un coche confortable y con buen aislamiento, pero presionamos el pedal derecho a fondo y prácticamente no notamos nada. La respuesta es lenta, el motor se revoluciona al máximo y ganamos velocidad de una manera muy lenta. Al final, es uno de los aspectos más negativos también de las cajas de cambios de tipo CVT.

Cómodo, tranquilo y hecho para ir del punto A al punto B

Realmente no es un coche que nos aporte algo interesante a la hora de conducirlo, es un modelo para ir del punto A al punto B. No significa nada malo, pero va para un público que no es demasiado exigente en cuanto a dinámica se refiere. Es un coche suficientemente cómodo para hacer todo tipo de usos, la potencia es aceptable para el día a día y algún que otro viaje, pero no podemos esperar mucho más de eso.

Por otro lado, el aislamiento es correcto salvo en esas situaciones que aceleramos a fondo, ya que se llega a escuchar en exceso el ruido que provoca el motor de gasolina. Es verdad que esto pasa en momento muy concretos, pero hay que tenerlo en cuenta. Al final, no es como un coche con caja automática convencional que solo se escucha si lo subimos de vueltas a propósito, aquí es siempre que aceleres más de la cuenta.

Y para finalizar, la dirección también deja bastante que desear. No es muy precisa, tampoco informa demasiado de lo que ocurre en el eje delantero y creo, bajo mi propia opinión, que la dirección aún en su modo más «ECO» es dura. No es que te cueste girar, pero por norma general el tacto del volante en los modos más confort en este tipo de vehículos suele ser muy blandito, aquí no es tan suave, es algo más duro.

Consumos Honda HR-V

Ahora nos toca hablar de lo importante, los consumos. El Honda HR-V, con esta mecánica híbrida, tiene una clara ventaja en un uso urbano. Esto se traslada en que podamos conseguir medias de unos 5l/100km en este tipo de trayectos, una cifra que nos gusta y mucho. Sin embargo, si le damos un uso combinado entre ciudad y carreteras interurbanas con tráfico, el consumo puede estar rondando los 5,3l/100km aproximadamente, unas décimas más.

Sin duda alguna, las autopistas son los trayectos más perjudiciales para el SUV nipón. A 120 km/h, es bastante fácil ver un consumo medio de unos 6,5 litros a los 100, una cifra algo elevada para el tipo de vehículo que es. Por poneros un ejemplo, el Renault Arkana E-Tech Hybrid que estuvimos probando hace unos meses, en el mismo recorrido sacó un consumo de 6 litros a los 100.

Conclusiones Honda HR-V

En definitva, el Honda HR-V es un coche muy completo. Su diseño exterior es agraciado, buenas calidades interiores y el equipamiento en este acabado intermedio es realmente bueno. Como punto más destacable diría los consumos, concretamente en vías urbanas, aunque también su puesta a punto hace que sea un coche cómodo pero sin excesivos balanceos.

Lo que no me termina de convencer es su caja CVT, no me acaba de convencer como es habitual. Es un cambio lento y ruidoso cuando aceleramos. Por otro lado tenemos su interior, puede gustar más o menos, pero a mí me parece demasiado clasista y con un equipamiento tecnológico en un escalón por debajo frente a sus rivales.

Equipamiento Honda HR-V e:HEV

Elegance

• Llantas de aleación de 18”
• Sistema de apertura y arranque inteligente
• Faros, luces diurnas y pilotos traseros LED
• Luces de carretera automáticas
• Parabrisas delanteros con sensor de lluvia
• Asientos delanteros calefactables
• Retrovisores exteriores térmicos
• Levas de freno regenerativo en el volante
• Magic Seats
• Sensores de aparcamiento (delanteros y traseros)
• Cámara de visión trasera función aparcamiento y líneas de guía
• Bluetooth manos libres (HFT)
• Honda CONNECT con Navegador Garmin, pantalla táctil 9”, radio AM/FM/DAB, Android Auto y Apple CarPlay
• Sistema de ayuda de arranque en pendiente
• Agile Handling Assist (AHA)
• Conjunto de tecnologías Honda SENSING

Advance

• Sistema de información de ángulo muerto con Sistema de alerta de tráfico cruzado
• Volante en piel
• Retrovisor interior fotosensible
• Retrovisor exterior con función marcha atrás
• Volante calefactado
• Portón trasero eléctrico (manos libres)
• 4 altavoces + 2 tweets
• 2 tomas USB traseras
• Faros antiniebla delanteros LED
• Climatizador dual

Advance Style

• Railes en el techo
• Color carrocería bitono
• Cargador Inalámbrico
• Sistema Audio Premium
• Detalles interior color Naranja
• Ajuste de luces frontales automáticas
• Luces de giro activas LED (ACL)
• Parrilla con bandas tricolor delantera

Precios Honda HR-V

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Opinión del editor

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