Prueba Toyota RAV4 Hybrid, el SUV se hace híbrido

Si Toyota ya ha vendido más de 9 millones de coches híbridos, no es casualidad. El fabricante japonés es el que apuesta más fuerte por este tipo de movilidad y cuenta con una amplia gama de este tipo de vehículos. Uno de los últimos en llegar ha sido el Toyota RAV4 Hybrid, que se convertía en el primer SUV híbrido de la marca. Una tecnología nueva implementada en una de las bases más exitosas y conocidas en la historia de Toyota.

No hay que olvidar que el Toyota RAV4 es todo un veterano y fue lanzado hace más de veinte años. Desde 1994 se han vendido más de 6,5 millones de unidades del SUV a lo largo de cuatro generaciones. Este modelo busca ganarse una posición privilegiada en el mercado y superar en ventas al diésel. En Toyota desde el primer momento no se ha escondido la confianza depositada en él, se espera que alrededor del 80% de las ventas del modelo correspondan a esta versión híbrida.

Diseño dinámico y con personalidad 

El lavado de cara del Toyota RAV4, con el que se introdujo esta variante Hybrid, supuso un cambio bastante importante. Sobre todo en el frontal podemos notar que sigue un diseño más dinámico y atractivo. Tres parrillas encontramos en el SUV, una superior que integra el logotipo de la marca y une ambos faros, una intermedia bastante estrecha y una inferior más ancha y de forma trapezoidal. Por debajo quedará una protección de aspecto metálico.

El paragolpes ha sido rediseñado y destacarán los grandes faros con tecnología LED. Los faros antiniebla quedan alojados a ambos lados de la parte inferior. En general queda patente la robustez del vehículo. La vista lateral no se queda atrás y llamarán la atención sus llantas de 18 pulgadas y unos prominentes pasos de rueda. Si nos fijamos toda la parte inferior de la carrocería recibe protecciones plásticas, consiguiendo una estética más off-road.

Pasamos a la zaga, que es probablemente la zona mas sobria del Toyota RAV4 Hybrid. Hay menos cambios y destacará por un portón de grandes dimensiones y con una zona de chapa bastante amplia. Esto hace que la matrícula quede en una posición elevada, muy cerca de los pilotos traseros LED, que también ocupan una superficie importante. En la parte inferior volvemos a encontrarnos con una defensa cromada que endurece su carácter.

Crece en presencia y crece en dimensiones. El Toyota RAV4 Hybrid mide de largo 4,6 metros, de ancho 1,84 metros y de alto 1,70 metros. La distancia entre ejes se mantiene en 2,66 metros. Por lo tanto estamos ante un C-SUV de un tamaño generoso, que tendrá un gran espacio interior como veremos más adelante. Para aquellos que estén buscando una opción algo más pequeña, podrán esperar al Toyota C-HR, que ya está en camino.

Habitabilidad notable

Como decíamos, las dimensiones del RAV4 Hybrid serán holgadas en todos sus puntos. El habitáculo será el lugar donde más se note, ya que nos encontraremos una habitabilidad notable. Las plazas delanteras serán muy amplias y tanto piloto como copiloto irán en una posición elevada que permite dominar el terreno. Cuando pasamos a las plazas traseras nos sorprenden porque podrán acoger a tres adultos, siempre que el viaje no sea muy largo. La plaza central será mas estrecha, pero no es del todo incómoda ya que no hay apenas túnel de transmisión.

El maletero aunque no llega a ser de los mejores de su categoría, es bastante grandes. Se queda en 501 litros de capacidad, lo que significa que ha perdido 46 litros respecto a las versiones que solo tienen el motor de combustión. La explicación es que esta versión híbrida ha tenido que alojar sus baterías bajo el suelo del maletero.  Aún así su espacio se puede aprovechar a la perfección gracias a un doble fondo e incluso nos deja espacio para una rueda de repuesto.

Interior mejorado

Además de un habitáculo grande, también estará puesto al día. En el Toyota RAV4 Hybrid vemos una importante mejora en cuanto a calidad y tecnología. Los materiales utilizados para su interior son bastante agradables y lo colocan en una posición más cercana a ‘su primo’ el Lexus NX 300h. Nuestra unidad llevaba el acabado Feel, que sin ser el tope de gama ya venía con elementos destacados. Tanto la parte baja del salpicadero como el interior de las puertas estarán recubiertos de cuero.

Si seguimos hablando de materiales tendremos que decir que la parte superior del salpicadero es de plástico duro y que recibe una moldura cromada de aspecto metálico que mejora su apariencia. Los asientos en nuestra unidad son de tela, mientras que el volante, palanca del freno de mano y reposabrazos tendrán tapicería de cuero.

Pasamos a hablar de la tecnología que hemos encontrado en el Toyota RAV4 Hybrid y que es uno de sus puntos destacados. Nuestra unidad lleva el sistema multimedia Toyota Touch & GO, que permite controlar todo desde su pantalla táctil de 7 pulgadas. Justo por debajo de ella encontramos al botón de arranque y a los controles del climatizador bizona, de serie desde el acabado Advance. Más abajo y un poco escondidos están los botones para seleccionar el modo de conducción.

Detrás del volante multifunción tendremos el cuadro de instrumentos donde llama la atención un elemento. La pantalla LCD de 4,2 pulgadas a color se complementa con la otra pantalla más grande y nos ayuda dándonos todo tipo de información. Otro aspecto destacado que introduce este modelo pero que solo estará en el acabado superior será el sistema de visión de 360 grados, que facilitará las maniobras.

En el RAV4 Hybrid tampoco faltan las ayudas a la conducción. Gracias al Toyota Safety Sense tendremos todo tipo de sistemas de seguridad que facilitarán nuestra labor al volante. Nos encontramos con un sistema precolisión con detección de peatones de amenos de 30 km/h, avisador de cambio involuntario de carril o reconocimiento de señales. También destacarán otros como el control de crucero adaptativo o el detector de ángulo muerto.

Mecánica híbrida de un viejo conocido

Aunque el elemento principal y que da nombre al Toyota RAV4 Hybrid es el que está bajo el capó. Se trata del primer SUV de la marca que equipa un sistema de propulsión híbrido y además será uno que ya conocemos. Se trata del mismo que ya vimos en el Lexus NX 300h y que está formado por un motor de gasolina de ciclo Atkinson de cuatro cilindros y 2.5 litros que se combina con un motor eléctrico.

Y decimos que tenemos solo un motor eléctrico porque nuestra unidad solo tiene tracción al eje delantero. Pero la marca nipona también dará la opción de tener tracción total (AWD) en el RAV4 Hybrid. Lo hará con el sistema E-Four, que instala un segundo motor eléctrico que se encarga de mover exclusivamente el eje trasero. Con la tracción 4×4 se ganará en capacidad de remolque, que ascenderá a 1.650 kg, más del doble que en nuestra unidad.

Aunque a la gente le costará distinguir si nuestra unidad tiene tracción 4×2 o 4×4, ya que no hay diferencias estéticas entre ambas versiones. En ambos la potencia conjunta de los motores es de 197 CV, fruto de sumar 152 CV del motor de gasolina y 105 kW del eléctrico, y que son suficientes para mover este SUV de 1.600 kg. Como en el resto de híbridos de Toyota, utiliza la transmisión e-CVT de engranaje planetario, que funciona al uso como un variador continuo.

La sensación es igual que en el resto de modelos, un empuje continuado en el que no encontramos los saltos entre marchas. Aunque ahora, con la finalidad de dar al conductor una experiencia más enriquecedora, el RAV4 Hybrid equipa la caja Shiftmatic. Con la palanca del cambio (que es igual a la de cualquier automático) podremos movernos entre seis marchas de forma secuencial. Son cambios emulados, pero nos permitirán que haya algo de retención.

Silencioso y refinado

Una vez te pones al volante del Toyota RAV4 Hybrid habrá un aspecto fundamental que te llame la atención: el silencio a bordo. Siempre que la batería nos lo permita, arrancaremos y haremos los primeros metros en modo 100% eléctrico. La verdad es que sigo sin acostumbrarme a que un vehículo de este peso y dimensiones se mueva así de sigiloso. El trabajo de insonorización que se ha hecho con el habitáculo es notable, pues apenas notamos cuando entra en juego el motor de gasolina. Solo nos llegará el ruido del motor cuando demandemos mucha potencia.

Porque en situaciones normales se buscará un término medio entre eficiencia y prestaciones. Si queremos personalizar nuestros recorridos tendremos que usar los botones con los tres modos de conducción. Con el EV Mode se intentará rodar usando solo el motor eléctrico lo máximo posible. No será en distancias largas, ya que la autonomía es muy limitada, simplemente un apoyo para ahorrar combustible. Tendremos que ser cuidadosos con el pedal derecho y si nos pasamos entrará en juego el motor de gasolina.

El modo Eco es el más recomendable para el RAV4 Hybrid, se buscará la máxima eficiencia y la respuesta del acelerador será más suave. Con él lograremos nuestras mejores marcas en cuanto a consumos. Para las situaciones que necesitemos su máximo rendimiento tendremos el modo Sport. El acelerador se vuelve más sensible y conseguiremos unas aceleraciones bastante sorprendentes. No hay que olvidar que hace el 0 a 100 km/h en 8,3 segundos.

Solo hacen falta unos pocos kilómetros para darnos cuenta de que el primer SUV híbrido de Toyota es un vehículo fácil de conducir. Cualquiera se podrá poner al volante y manejarlo de forma fluida a pesar de sus dimensiones exteriores. Se sentirá a gusto en recorridos urbanos, donde saldrá a la luz el potencial que tiene y conseguiremos gastar poco. Cuando salgamos a autopista también cumplirá gracias a su aplomo y sus reacciones nobles.

Cómodo pero poco dinámico

Porque ante todo, viajar en el Toyota RAV4 es sinónimo de viajar cómodo. El tarado de sus suspensiones hace que no se nos atraganten las imperfecciones de la carretera. El nivel de confort y la calidad de rodadura serán sus aspectos más destacados. La dirección es bastante asistida y aunque no transmite demasiado, se agradece a la hora de maniobrar. Al tacto del freno nos tendremos que acostumbrar, ya que la frenada regenerativa hace que sea algo difícil de dosificar.

La parte negativa es que esta comodidad parece que se ha llevado por delante todo el dinamismo. No encontraremos ni un ápice de deportividad en este modelo, aunque bien es verdad que tampoco es su función. Su elevado centro de gravedad hace que no sea el vehículo idóneo para una carretera revirada. Allí encontraremos algo de balanceo y le costará seguir la trazada si le exigimos en las curvas más cerradas.

En la toma de contacto anterior con este Toyota RAV4 Hybrid habíamos podido rodar por algunas pistas de tierra. En esta ocasión hemos vuelto a probar su comportamiento off-road y nos ha servido para comprobar que no tendrá un enfoque puramente todoterreno. A este modelo se le complicarán algunas rampas, aunque estamos seguros que la mayoría de los usuarios que lo tengan apenas lo usarán fuera de carretera. Y quién tenga intención pedirá la tracción total.

Llegamos a la parte final de la prueba para hablar de uno de los aspectos más destacados del modelo: los consumos. El RAV4 Hybrid de tracción delantera homologa 4,9 l/100km y nosotros podemos decir orgullosos que nos hemos acercado a estas cifras. En algunos trayectos favorables, cuando el motor eléctrico entraba en acción hemos conseguido bajar de los 5 litros. Lógicamente cuando rodamos a 120 km/h por autopista esta cifra se elevará, aunque tampoco en exceso. La media total se nos quedó en 6,6 l/100km, un buen resultado para un vehículo de sus características.

Conclusión

El Toyota RAV4 Hybrid es un vehículo con el que la marca accede a un nuevo nicho de mercado y que pone las cosas difíciles a sus rivales. Ofrecerá un diseño con personalidad, sobre todo en su frontal, con rasgos muy marcados y fácilmente reconocible. Pero no sólo eso, sino que también será la solución perfecta para aquellos que busquen mucho espacio. Su notable habitabilidad interior y maletero a la altura lo colocarán como una buena opción.

El RAV4 Hybrid preferirá los trayectos cortos y urbanos ante los viajes largos por carretera. Además el bolsillo lo agradecerá, porque las mejores cifras de consumos se darán en este tipo de situaciones. La facilidad de conducción, el tarado de las suspensiones o los modos de conducción nos servirán de ayuda cuando nos pongamos a los mandos. Otra de las ventajas es que desde el acabado más básico tendrá un equipamiento bastante completo como podréis comprobar más abajo.

Equipamiento del Toyota RAV4 Hybrid

Toyota RAV4 Hybrid Advance

• Llantas de aleación de 17 pulgadas
• Toyota Touch 2 con pantalla táctil de 7 pulgadas
• Portón trasero con apertura y cierre eléctrico
• Faros con tecnología LED
• Climatizador bizona
• Sensores de iluminación y lluvia
• Entrada y arranque sin llave
• Control de crucero

Toyota RAV4 Hybrid Feel!

Toyota RAV4 Hybrid Executive

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