Hace algún tiempo os comentábamos que Suzuki Motors y Toyota Motors Corporation habían unido sus empresas bajo un acuerdo de colaboración. Básicamente en aquel momento estaban interesadas en compartir ciertas tecnologías así como ayudarse a penetrar en los mercados en los que ambas estaban más desubicadas.
En un primer momento éste acuerdo parecía suficiente, sin embargo, a medida que ha pasado el tiempo las circunstancias del mercado han cambiado y por tanto el acuerdo debe actualizarse con él. Por tanto, ambas firmas habrían decidido ampliar aquel primer acuerdo para extenderlo a otro tipo de aspectos que les puede reportar un mayor número de satisfacciones.
Según han declarado ambas firmas, se han puesto manos a la obra para iniciar conversaciones para colaborar en temas como: tecnologías relativas a sistemas de propulsión limpios, sistemas de seguridad y asistentes a la conducción, nuevas plataformas de info entretenimiento, así como el uso de plataformas logísticas comunes para la distribución de componentes y piezas para sus automóviles.
Este acuerdo es muy bueno para ambas empresas. En el caso de Suzuki los ingenieros de la firma tendrán acceso a un conjunto de tecnologías en sistemas de hibridación, pila de hidrógeno o eléctricos que no tienen hasta el momento. Con ellas podrán mejorar sus vehículos de cara a seguir liderando el mercado de vehículos pequeños a nivel mundial.
En el caso de Toyota, este acuerdo la beneficia en cuanto a entrar en mercados en los que aún no está presentes o le está costando mucho asentarse. Uno de ellos es la India puesto que el retorno de sus inversiones en este mercado asiático no se ha visto correspondido con los esfuerzos realizados. Por ello, de la mano de Suzuki podrían entrar con una mejor red de distribución o quizá con productos adaptados a los gustos locales.
Con la reformulación de este acuerdo Toyota Motors ha logrado crear uno de los súper acuerdos del sector del automóvil mundial. A la vez que la firma nipona mantiene este lazo con Suzuki también tiene otros con Mazda o Subaru. Esta situación no es igualada por ningún otro fabricante de coches en el mundo, puesto que sólo se da entre conglomerados que tienen relación societaria y de propiedad.
Fuente – Suzuki – Toyota