Los chips semiconductores son una parte integral de la tecnología moderna, y la industria automotriz no es una excepción. Desde el control del motor hasta los sistemas de infoentretenimiento, los semiconductores desempeñan un papel crucial en los vehículos modernos.
Y no solo eso, las nuevas tecnologías de control activo para mejorar la seguridad, los sistemas de inyección electrónica para mejorar la eficiencia y reducir el consumo, los coches conectados, y los autónomos, cada vez necesitan más chips y más potentes. Por eso, cuando antes era raro ver un chip o circuito electrónico en un coche del pasado, ahora no hay vehículo que no los tenga…
¿Para qué se necesitan chips en la industria del automóvil?
Los chips semiconductores se utilizan en una amplia gama de aplicaciones en la industria automotriz, incluyendo:
- Sistemas de infoentretenimiento: los chips controlan las pantallas táctiles, los sistemas de navegación, los sistemas de audio y las conexiones de teléfonos inteligentes. Los equipos actuales son básicamente ordenadores con sistema operativo Android, u otros.
- Asistencia al conductor: los chips también sirven para procesar datos de sensores como cámaras, radares y LiDAR para habilitar funciones como frenado automático, control de crucero adaptativo y asistencia de mantenimiento de carril.
- Conectividad: por supuesto, permiten la conexión a Internet, navegación por satélite y actualizaciones de software inalámbricas.
- Sistemas de propulsión eléctrica: en los vehículos eléctricos controlan la gestión de la batería, el motor eléctrico y la carga, modos de rendimiento, entre otros detalles.
- Control del chasis: algunos elementos activos en coches de alta gama o deportivos también están controlados por electrónica, y chips, como la suspensión, la dirección y los frenos.
- ECU: por supuesto, el ordenador central que controla los diferentes sistemas del coche y recibe información de los distintos sensores, también necesita de chips.
Escasez de chips
La industria automotriz ha experimentado una grave escasez de chips semiconductores desde principios de 2020, cono sabrás. Esto ha provocado interrupciones en la producción, retrasos en las entregas y un aumento de los precios de los vehículos. Esta escasez ha sido causada por una serie de factores, incluyendo la pandemia de COVID-19, el aumento de la demanda de productos electrónicos y las tensiones geopolíticas.
La escasez de chips ha tenido un impacto significativo, llegando a paralizar la producción de algunos fabricantes, o de reducir la producción en un alto porcentaje en otros casos. Es decir, la industria de los semiconductores han afectado a la industria del automóvil en tres puntos clave, ya que depende de estos proveedores:
- Reducción de la producción: las empresas automotrices se han visto obligadas a reducir la producción de vehículos, lo que ha llevado a una menor oferta y mayores precios para los consumidores.
- Retrasos en las entregas: los clientes han experimentado retrasos en la entrega de sus nuevos vehículos, lo que ha generado frustración y pérdida de confianza en las marcas.
- Aumento de los precios: los precios de los vehículos han aumentado debido a la escasez de chips y al aumento de los costos de producción.
Particularidades de los chips para automóviles
Los chips para automóviles no son reemplazables por otros chips, ya sea porque están especialmente diseñados para estos vehículos o porque, aunque tengan sustitutos en el sector de la electrónica general, no se pueden utilizar en los coches debido a varias particularidades que los diferencian de los chips para otros aparatos electrónicos, como:
- Mayor fiabilidad: los chips para automóviles deben ser altamente fiables y funcionar en condiciones extremas de temperatura, vibración y ruido. Ten en cuenta que de ellos depende la seguridad de las personas, por lo que es algo vital. De hecho, se estima que la media de duración de estos chips debe superar los 20 años de uso sin problemas, aunque bien es cierto que a veces puede haber partidas defectuosas que deben ser sustituidas. Para que sean más duraderos, suelen fabricarse en tecnologías de fabricación ya probadas, dejando las punteras para otros sectores, como la informática.
- Cumplimiento de regulaciones: para automóviles deben cumplir con estrictas regulaciones de seguridad y estándares, de lo contrario serán rechazados. Por supuesto, si se trata de chips para vehículos militares, las exigencias son mayores…