La suspensión multibrazo

Aunque a muchos se les olvide, la suspensión es uno de los elementos más importantes de nuestro coche. Gracias a ella, el vehículo puede mantener la estabilidad y el confort en diversas circunstancias. Sin embargo, no todas las suspensiones son iguales. En esta ocasión os hablamos de la suspensión multibrazo o multilink. Una de las mejores soluciones para conseguir estabilidad, agilidad y confort.

Se engloba dentro de las suspensiones independientes. Es decir, en las que los movimientos de la suspensión de una rueda no afectan a las de la otra. Es frecuente encontrarlas tanto en el eje delantero como el trasero.

Qué es y cómo funciona

El concepto clave de este tipo de suspensión es que tenga varios brazos independientes. Gracias a ellos es capaz de mantener la rueda en el sitio adecuado en todo el recorrido de la suspensión y, en el caso de las ruedas direccionales, sea cual sea su orientación. Existen muchas variantes de la suspensión multibrazo. Tantos como fabricantes y modelos, que tienen sus particularidades y necesidades propias. Sin embargo, todas tienen unas características comunes en cuanto a su funcionamiento.

Repaso a la suspensión McPherson

Para entender cómo funciona una suspensión multibrazo y qué aportan a la dinámica del coche, lo mejor que se puede hacer es visualizar qué le ocurre a la rueda del coche al contraerse y estirarse la suspensión. Imagina que la rueda del coche sube y baja gracias al amortiguador, pero está fijada al coche son un solo brazo inferior. Es decir, una suspensión McPherson. El resultado es que la rueda no se puede mover de forma completamente vertical en todo el recorrido de la suspensión, porque ese brazo la obliga a moverse arriba y abajo describiendo un arco.

Si todavía no lo visualizas, imagina ese brazo fijado por un extremo a un punto y a la rueda por otro. Como está fijado a ese punto, cuando la rueda sube o baja solo puede describir la circunferencia, en la que el brazo es el radio y ese punto es el centro de la circunferencia. Pues bien, aunque la suspensión solo le permite describir un pequeño ángulo de esa circunferencia, es fácil ver que la rueda no estará en posición completamente vertical siempre. En el siguiente vídeo puedes verla funcionar en situaciones extremas y cómo la rueda no siempre está en posición vertical:

Repaso a la suspensión de paralelogramos deformables

Para solucionar esto se crearon las suspensiones de paralelogramos deformables. Guían el movimiento de la rueda mediante dos brazos o triángulos, uno inferior y otro superior. Para entender cuál es la ventaja, haz el mismo ejercicio mental que antes, pero esta vez con dos brazos paralelos unidos al coche por un lado y a la mangueta de la rueda en la parte de arriba y la de abajo. La rueda se mantiene prácticamente vertical al subir o bajar porque ya no lo hace describiendo una simple circunferencia alrededor de un punto.

Esta suspensión se llama de paralelogramo deformable porque, vista de frente, los dos brazos (o triángulos) y la mangueta forman un paralelogramo que se deforma al subir y bajar la suspensión. También se llama de triángulos superpuestos porque los brazos superior e inferior suelen ser dos triángulos unidos al coche por dos puntos y a la mangueta por uno solo.

Y por fin la suspensión multibrazo

Pues bien, una vez que conoces estos tipos de suspensión, ya estás en disposición de entender la multibrazo. En sus versiones de cuatro o cinco brazos se trata de una evolución de la suspensión de paralelogramo deformable o de triángulos superpuestos. Solo que en el caso de la multibrazo, cada triángulo está formado por dos brazos independientes (sumando cuatro), a los que se le puede añadir otro quinto brazo de control.

El hecho de que cada triángulo se divida en dos brazos independientes permite configurar el movimiento de la rueda de forma más exacta para las necesidades del modelo en cuestión. En el siguiente apartado de ventajas e inconvenientes puedes ver qué aporta tener varios brazos en la suspensión.

Ventajas y desventajas

Posición de rueda ideal

Precisamente el hecho de que tenga varios brazos es lo que le da su principal virtud: que la rueda se encuentre en la posición ideal en todo momento. La colocación estratégica de sus brazos le permite controlar de forma muy eficaz el ángulo de caída y de divergencia o convergencia de la rueda. Mientras que una suspensión de triángulos superpuestos la posición de la rueda es la que es, con los brazos independientes se puede jugar más con la colocación para variar su posición según gire, suba o baje.

Maniobrabilidad y seguridad al volante

Además, si es en las ruedas direccionales, la suspensión multibrazo permite que la rueda cambie de dirección sobre sí misma, no sobre un punto fuera de ella. En las suspensiones de tipo McPherson el cambio de dirección de la rueda se hace sobre en un eje imaginario fuera de ella, que coincide con el amortiguador. Por este motivo, si comparamos este tipo de suspensión con otros, podemos decir que la suspensión multibrazo nos garantiza una mejor maniobrabilidad y seguridad al volante. En el siguiente vídeo puedes ver cómo consigue esto en una maqueta:

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Confort de marcha

Otra de las ventajas es que puede absorber un porcentaje muy alto de ruidos y vibraciones, lo que asegura un mejor confort de marcha. Cada brazo está unido a los demás componentes mediante silentblocks. Pero es que además, la configuración de brazos separados, en lugar de triángulos, le permite una alta absorción de las vibraciones longitudinales (de adelante a atrás) y una gran firmeza en los movimientos transversales (de lado a lado). Esto le confiere un gran confort, al mismo tiempo que se consigue una gran precisión de guiado.

Además, el muelle se puede colocar separado del amortiguador. De esta forma, si es necesario, se colocan en sitios diferentes para conseguir un mejor funcionamiento de todo el esquema de la suspensión multibrazo.

Cara y complicada

Sin embargo, también cabe decir que la suspensión multibrazo tiene un coste más elevado que otro tipo de suspensiones. Además, se trata de un esquema mucho más complejo, por lo que no lo podemos ver en todos los vehículos.

Partes

• Brazos superiores: son los dos brazos superiores que sustituyen al triángulo de una sola pieza que llevan las suspensiones de triángulos superpuestos.
• Brazos inferiores: Igual que los superiores pero en la parte inferior. Entre los cuatro consiguen el mismo efecto que las suspensiones de triángulos superpuestos de mantener la rueda sin mucha variación de ángulo de caída.
• Brazo de control: es un brazo que tienen algunas suspensiones multilink para limitar el movimiento de la rueda según quiera el fabricante.
• Silentblocks: son las piezas de goma que absorben las vibraciones y ruidos propios de la marcha del coche.

• Resorte helicoidal: al igual que en otras suspensiones es el muelle que absorbe las irregularidades del terreno y mantiene la carrocería suspendida. En el caso de algunas suspensiones multibrazo o multilink, el muelle está separado del amortiguador (foto de encima), en lugar de llevarlo por dentro (foto principal).
• Amortiguador: ayuda al resorte helicoidal a absorber las irregularidades del terreno, pero su principal función es eliminar o minimizar el efecto rebote del muelle.

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Suspensión multibrazo Vs. Eje torsional

Como ya hemos dicho, es muy frecuente encontrar suspensiones multibrazo tanto en el eje delantero como en el trasero. Sin embargo, en el caso de las ruedas traseras suelen verse sustituidas cada vez más por una suspensión de eje torsional. Esta sustitución se debe principalmente a los costes y al espacio disponible. A continuación te enumeramos las ventajas e inconvenientes de uno y otro sistema en el eje trasero:

Multibrazo

Ventajas:

• mantiene la rueda pegada al suelo con mayor eficacia en todo el recorrido de la suspensión o de la dirección
• aísla mejor del ruido y vibraciones
• es independiente, así que los movimientos de una rueda no afectan al otro.

Inconvenientes:

• supone más costes de fabricación por tener más elementos
• ocupa más espacio, por lo que pierde algo de maletero y/o depósito de combustible.

Eje torsional

Ventajas:

• es más barata por tener menos elementos
• es más fácil de fabricar y de montar
• ocupa menos espacio, así que el maletero y/o el depósito de combustible pueden ser más grandes. Además permite eliminar la barra estabilizadora, porque el eje torsional cumple esa función por sí mismo.

Desventajas:

• la ruedas no se mantienen pegadas al suelo de forma eficaz, por lo que el agarre es peor en curvas y otras circunstancias
• no es independiente, por lo que los movimientos de una rueda crean movimientos parásitos en la otra. Esto afecta al confort y a la dinámica del coche negativamente.

Un ejemplo de cómo algunas marcas se han decantado por el eje torsional para algunos de sus modelos es el Grupo Volkswagen. En el Seat León, la segunda generación tenía eje multibrazo trasero en todas sus versiones, pero la tercera generación solo lo montaba en las versiones más potentes.

¿Se nota la diferencia entre ambas suspensiones?

Con una conducción tranquila a ritmos normales no se nota la diferencia entre la suspensión trasera multibrazo o el eje torsional. Solo si se conduce de forma deportiva, se notará las ventajas en inconvenientes antes mencionados.

Sin embargo, independientemente del tipo de conducción que se realice, el coche se comportará peor en situaciones de riesgo imprevistas si lleva eje torsional. Así se nota en la típica maniobra de esquiva, tan habitual en las pruebas realizadas en los coches para comprobar su comportamiento dinámico.

Por muy tranquilo que conduzcas, si tienes que esquivar algo para evitar un accidente, el coche puede perder la trayectoria más fácilmente si lleva eje de torsión en lugar de multibrazo. Según el modelo, esto se traduce en un sobreviraje provocado porque las ruedas traseras pierden más agarre al no poder mantenerse perfectamente pegadas al suelo.