Mazda CX-90: SUV, híbrido enchufable y 8 plazas, pero sólo para Estados Unidos

El Mazda CX-90 es el modelo más grande y potente de la historia de la marca nipona. Este SUV ha sido presentado para el mercado norteamericano. Su precio todavía es una incógnita, pero no así la mayoría de sus características técnicas, entre las que destaca un sistema de propulsión híbrido enchufable y una configuración interior con 8 asientos. También trae consigo una pintura específica para la carrocería. Su llegada a Europa no está prevista. En nuestro continente habrá un modelo con un diseño similar, aunque con unas dimensiones exteriores inferiores, denominado CX-80.

El nuevo CX-90 es la gran apuesta de Mazda para continuar creciendo al otro lado del océano Atlántico y seguir rivalizando, por precio y calidad, contra algunas de las firmas más lujosas del mundo. Por ahora llega a Estados Unidos con dos opciones mecánicas: una convencional de gasolina con hibridación ligera (MHEV) y otra híbrida enchufable (PHEV). Con independencia de la motorización, las primeras unidades de este coche se entregarán a sus clientes a lo largo de la primavera de 2023, es decir, casi de inmediato.

Tal y como ocurría con el CX-9 de segunda generación (2016), que es el todocamino al que sustituye dentro de la gama japonesa, el CX-90 (2023) supera los cinco metros de longitud. Como referencia, un Mazda CX-60, que es el producto más largo que la casa de Hiroshima comercializa actualmente en España, mide 4,75 m (su aspecto es bastante parecido, pues se construye sobre la misma plataforma). Un SUV tan voluminoso como el que se vende en América, ha permitido a la compañía crear un habitáculo con hasta 8 plazas homologadas y aptas para adultos.

Algunos de los aspectos más destacados de este automóvil son sus acabados, los cuales, aparentemente (y como de hecho ocurre en el CX-60 europeo), nada tienen que envidiar a las marcas alemanas más reputadas del sector. Tampoco es inferior en términos de dotación tecnológica y equipamiento, a la altura del segmento en el que compite: alto grado de digitalización, mandos físicos allá donde añaden valor y todos los asistentes a la conducción disponibles a fin de lograr un nivel de seguridad activa muy elevado.

En cuanto al apartado mecánico, el CX-90 “mild-hybrid” lleva instalado un propulsor con turboalimentación, 6 cilindros en línea y 3,3 litros de cilindrada que desarrolla hasta 345 CV de potencia y 500 Nm de par. Es el más potente que jamás ha fabricado Mazda para vehículos “de calle”. La versión PHEV combina un motor de gasolina atmosférico con 4 cilindros y 2,5 litros con otro eléctrico para alcanzar un máximo de 327 CV y 500 Nm. Su batería tiene una capacidad bruta de 17,8 kWh. Aún no hay datos de prestaciones, pero se sabe que ambos sistemas se asocian a tracción integral y a transmisión automática.

Fuente – Mazda USA