Alfa Romeo Giulia Quadrifoglio, la primera ficha que la marca italiana puso sobre la mesa para reencontrarse con su esencia y ADN deportivos que había perdido en los últimos años. Alfa tiene planeado lanzar un gran número de nuevos productos y volver a su filosofía antigua. Deportividad, diseño y transmisión de sensaciones del coche a su conductor, eso es lo que Alfa busca en estos momentos.
Parece ser que el máximo exponente para lograrlo es el Alfa Romeo Giulia Quadrifoglio. Sin haber llegado a pasar por nuestras manos en su variante más prestacional, es posible decir que el Giulia Quadrifoglio es todo un deportivo. Y lo podemos decir porque sí hemos conducido la versión diésel de 150 CV y nos ha gustado, y mucho. Si nos ha gustado la deportividad de un diésel, ¿nos va a disgustar el mismo coche pero con un V6 biturbo de origen Ferrari y 510 CV, además de mejores suspensiones, frenos, sonido, etc.?
Este vídeo, subido a YouTube por nuestros compañeros de Car Throttle, nos permite escuchar con claridad el rugir del V6 2.9 biturbo y los 510 CV cuando salen por las cuatro colas de escape. El sonido es, cuanto menos, deportivo. No suena a V10 atmosférico, suena a motor turbo, a nervio, casi a competición.
Para hablar de sensaciones de conducción, deportividad y diversión, no vale un coche cualquiera ni una estructura mecánica cualquiera. De este modo, Alfa Romeo desarrollaba la plataforma Giorgio, volviendo a la propulsión trasera que tantos buenos resultados le ha dado a la compañía. Sobre ella se desarrollarán buena parte de los futuros modelos de la compañía, entre ellos el recientemente presentado Alfa Romeo Stelvio. Hace unos días también se rumoreaba que dicha plataforma Giorgio podría ser utilizada por otras compañías de FCA; y sí, el sucesor del Alfa Romeo Giulietta también será de propulsión trasera.