Un par de meses atrás os informábamos de unos primeros datos sobre el nuevo McLaren Senna; una auténtica máquina de la velocidad con el nombre del piloto de F1 más recordado de todos los tiempos. El modelo de la firma de Woking hará su debut en el oficial en el próximo Salón del Automóvil de Ginebra el próximo 6 de marzo. Si estás interesado en él, antes de nada debes saber que su precio oscila los 850.000 euros y que solo se producirán 500 unidades.
Como descubriremos unas líneas más abajo, el McLaren Senna es un hiperdeportivo extremo, cuyas capacidades dinámicas son simplemente de otro planeta. Sin embargo, y por si todo eso fuera poco, han recurrido al nombre de Senna para dar aún más “punch” comercial a su producto. Y es que, si utilizas el nombre de Senna estás dejando claro que has puesto toda la carne en el asador.
El corazón del McLaren Senna es un V8 biturbo de 4 litros
Empezaremos por su sistema propulsor. La marca británica ha puesto un V8 de 4.0 litros con sobrealimentación mediante dos turbocompresores para desarrollar 800 CV y 800 Nm, que son enviados al tren trasero, siendo éste el motor térmico más potente que jamás ha utilizado la casa de Woking en un coche homologado para la carretera. Asociado a un cambio de doble embrague con siete velocidades, el McLaren Senna es capaz de hacer el 0 a 100 en 2,8 segundos y de 0 a 200 en solo 6,8, obteniendo una velocidad punta de 340 km/h.
Relación peso potencia de 1,5 kg/CV para el McLaren Senna
Estas cifras no serían posibles si fuera un vehículo pesado, por lo que ya os podéis imaginar que el equipo de ingenieros de la marca ha trabajado muy duro para ahorrar hasta el último gramo; recurriendo a materiales muy ligeros como el aluminio o la fibra de carbono. En total, su peso es de 1.198 kilos; es decir, menos de lo que pesan la mayoría de vehículos compactos de nuestro mercado. De este modo, tenemos una relación peso potencia de 1,5 kg/CV. Espectacular. Eso sí, si lo adquirimos con los opcionales del sistema de aire acondicionado o el equipo de audio, elevaremos ligeramente su peso.
800 kilos de “downforce” lo pegan al suelo gracias a su aerodinámica activa
Pero de poco sirve tener un motor muy potente y un coche ligero si cuando llegan las curvas no tiene el agarre suficiente, primero para detenerse y, posteriormente, para virar. Para pegarse al suelo como una lapa, el McLaren Senna utiliza la aerodinámica activa, tanto en la parte frontal de la carrocería como en la trasera mediante un spoiler. Según informa la compañía, este hipercoche es capaz de generar hasta 800 kilos de carga aerodinámica a partir de 250 km/h.
Los neumáticos utilizados son unos Pirelli P Zero Trofeo R que, en el tren delantero tienen unas medidas de 245/35 ZR19, mientras que en el trasero son 315/30 ZR20; prácticamente unos slicks homologados para su uso en vía pública. Por supuesto, el equipo de frenos recurre a unos discos carbocerámicos y pinzas de grandes dimensiones.
Fibra de carbono a la vista, y no es de pegatina precisamente…
El habitáculo brilla por su minimalismo. McLaren afirma que el propósito de este coche, pese a que pueda circular legalmente por vías públicas, es rodar en circuito; por lo que no quiere distracciones para el conductor. Fijaos simplemente en su volante. Hoy día todos los volantes de nuestros coches están repletos de botones, mientras que en el McLaren Senna no hay ni uno. Tras sus radios horizontales aparecen unas preciosas y grandes levas realizadas en carbono. Una pantalla TFT hace las veces de cuadro de instrumentos.
Por otro lado, una serie de botones sirven para variar entre los cuatro modos de conducción, que ajustan la respuesta de la mecánica, la configuración del sistema de suspensiones, la altura de la carrocería y el funcionamiento de la aerodinámica activa. Antes de finalizar, y ya que estamos con el interior, queremos que os fijéis en los espectaculares acabados en fibra de carbono y alcántara totalmente visibles, así como en sus extremos asientos -también de fibra de carbono- que solo pesan 8 kilos.
