BMW M5 CS, todos los detalles del BMW M más potente de la historia

BMW ha lanzado todos los datos y multitud de imágenes del BMW M5 CS durante esta madrugada. El M5 de actual generación lleva ya tiempo en comercialización y, como en el caso de toda la familia Serie 5, ha recibido unos ligeros cambios mediante este restyling. Ojo, se convierte en el BMW M más potente de la historia, con nada menos que 635 CV.

Como apuntamos en el título de este artículo, se trata de un CS. Se trata de una serie limitada muy exclusiva y muy centrada en la máxima deportividad; pero sin perder el lujo que caracteriza también a estos vehículos. Sin duda, una pieza de colección que cualquiera desearía tener en su garaje. Conozcamos más a fondo todos sus detalles.

Agresividad en cada ángulo

Empezando por la estética, la unidad de las imágenes se siente espectacular con ese tono Frozen Deep Green metalizado. Claro, que si nos olvidamos del color, no deja de ser tremendamente llamativo. Los paragolpes son muy agresivos, por sus enormes entradas de aire y sus líneas rectas marcadas en el delantero, así como por el gran difusor negro brillante del trasero.

No faltan multitud de apéndices y detalles aerodinámicos que, sin dar una apariencia recargada, incrementan bastante la impresión deportiva que este coche transmite en parado. Fijaos en el abrupto capó con canalizaciones de aire, en los labios de fibra de carbono en el frontal, en las branquias de las aletas delanteras o en el leve spoiler sobre la tapa del maletero, también en fibra de carbono.

Mención especial merecen las llantas M forjadas, que son de 20 pulgadas y con diseño en Y. Calzan neumáticos Pirelli P Zero Corsa de serie en medidas 275/35 en el tren delantero y 285/35 en el trasero. Si os fijáis, en algunas imágenes se pueden apreciar los discos carbono-cerámicos, que también son de serie en este BMW M5 CS con pinzas fijas de seis pistones en rojo. Desde luego, hay que llevar buenos frenos para detener un coche de este calibre.

Como en todo BMW M, no podía faltar un escape deportivo con cuatro salidas. En este caso, son de acero inoxidable.

No quería olvidarme del estilo de iluminación. En la parte delantera lleva faros Laser de BMW con una línea en forma de L iluminada en amarillo muy característica.

Quién diría que deriva de un Serie 5

No es un BMW Serie 5 cualquiera, ni siquiera un M5 Competition, sino que es un BMW M5 CS. Eso significa llevar al máximo las prestaciones, creando también un ambiente más radical en el exterior y en el interior. Al fin y al cabo, donde más tiempo pasa un conductor es dentro de su coche y no viéndolo desde fuera. La firma bávara es consciente de esto y no se ha cortado un pelo en crear un habitáculo aún más bestia.

Llama la atención que es un modelo homologado para cuatro plazas, y no para cinco, utilizando cuatro asientos individuales exclusivos. Los asientos M Carbon delanteros llevan reposacabezas integrados y logotipos M5 iluminados. Son unas butacas muy finas y de estilo muy deportivo. Una curiosidad es que llevan el circuito de Nürburgring impreso en el reposacabezas.

Igualmente destacable es todo el salpicadero, con cuero oscuro y costuras en tono rojo. Y hablando de rojo, este color crea contrastes en múltiples partes del interior, incluyendo zonas de puertas, asientos, pomo de la transmisión y levas del cambio. La apariencia es realmente dinámica.

El volante está tapizado en Alcantara, contando con la tradicional marca central en la parte superior de color rojo. También en este material está tapizado el techo. Las levas antes citadas son de fibra de carbono, con un aspecto muy racing. Por último, en un BMW M5 CS no pueden faltar los cinturones de seguridad con los tonos azul y rojo típicos de BMW M.

BMW M5 CS y su técnica más efectiva

Comenta la marca que el nuevo BMW M5 CS se ha desarrollado sobre el chasis del M5 Competition, modificando además muelles, amortiguadores y barras estabilizadoras. En teoría, debería ser más preciso y ágil al límite. Para ello, también han tenido en cuenta que el coche ahora es un poquito más ligero, así como que los neumáticos darán un mayor agarre en seco.

Respecto a la transmisión, esta versión monta el sistema M xDrive variable y personalizable. El conductor puede escoger entre los modos 4WD, 4WD Sport y el modo 2WD que desconecta totalmente el tren delantero. Es decir, en este último modo, se comporta como un puro propulsión trasera. También hay modos para la suspensión adaptativa y respuesta del motor, cambio y dirección; así como diferentes niveles de intrusión de la electrónica para permitir mayores o menores deslizamientos sobre el asfalto.

Pero la parte más destacada siempre es el motor, el corazón de cualquier coche. Equipa el motor más potente de BMW M GmbH. Es el V8 de 4.4 litros visto en otras variantes M, pero llevando su potencia hasta los 635 CV a 6.000 vueltas. El par máximo es de nada menos que 750 Nm entre 1.800 y 5.950 revoluciones.

Esto significa que tenemos un motor realmente aprovechable desde muy abajo, mostrando mucha energía en todo el rango de revoluciones. Y ojo, porque este ocho cilindros estira hasta nada menos que 7.200 rpm, que se dice pronto.